lunes. 06.05.2024
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Aleix Sales |

Si una cosa hay que agradecer a Operación Napoleón es su desacomplejada vocación para el cine evasivo sin ningún tipo de pretensión más allá de contar una peripecia trepidante, actuando como un desoxidante entre cuestiones de más gravedad.

Basado en una novela de Arnaldur Indriðason, compañero de fatigas de otros representantes generacionales de esa primera ola islandesa del siglo XXI como Baltasar Kormákur o Óskar Jonasson, en el film de Óskar Thór Axelsson confluyen el relato del falso culpable de Hitchcock, la novela negra nórdica de Joël Dicker o Stieg Larsson y la aventura histórica conspiranoica de la que Dan Brown ha sacado tanto rédito que, a falta de inspiración, recurre a los efectivos villanos nazis.

Vehiculada por un McGuffin en toda regla como es un avión perdido en un glaciar islandés, Operación Napoleón tiene piezas suficientes para devenir un apetecible plato de comida rápida que, sin embargo, no alza el vuelo en ningún momento surcando un cielo plagado de clichés sin mucha alma –a excepción de Einar, el personaje que interpreta con gracia Ólafur Darri Ólafsson-.

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La travesía de dos horas adolece de un guion enquistado en muchos pasajes que boicotea la construcción de la tensión, que debería ser su bien más preciado en una obra de esta tipología, incapaz de generar suficientes y potentes picos para sostenerse a lo largo del tiempo. En los momentos donde decide ponerse intensa, tropieza al apostar por una acción barata más propia de un telefilme de Calle 13 o los momentos más bajos de Cazatesoros (Gil Grant, 1999-2002), sin recompensar al espectador con una propuesta visual que sobresalga mínimamente de la rutina más gris.

Puede que convenza a la parroquia lectora de la novela -inédita en español-, pero probablemente decepcione a los fans del género al desaprovechar su metraje en un desarrollo en buena parte arrítmico, perezoso en la sobreexplicación de sus diálogos y fiar todo a un cliffhanger final que abre la puerta a una secuela que, ciertamente, tiene un enorme bloque de hierro que esculpir para deslumbrar.

'Operación Napoleón': una búsqueda hitchcockiana desapasionada