"¡Qué cariño! ¡Cuánta entrega!", proclamó Plácido Domingo ante las ovaciones de las decenas de miles de personas, entre ellas, el responsable de Cultura y Turismo de Buenos Aires, Hernán Lombardi, que se congregaron en la popular Plaza de la República, reconocida por su famoso obelisco.
Acompañado por la soprano argentina Virginia Tola, el tenor español interpretó obras de Barbieri, Sorozábal, Lowe y Vives, entre otros. Aunque el concierto estaba previsto para el pasado miércoles, la fuerte lluvia que azotó la capital obligó a aplazar el recital hasta el jueves.
Originalmente, Plácido Domingo tenía previsto actuar en el Teatro Colón de Buenos Aires, pero el evento fue cancelado por un largo conflicto laboral que los trabajadores del organismo mantienen con la Alcaldía y cuyas negociaciones, en las que el tenor medió personalmente, fracasaron a principios de la semana.
La actuación en la Plaza de la República también pendía de un hilo, debido a que en ella debían acompañar al tenor los músicos de la Orquesta Estable y la Filarmónica del Teatro Colón. Finalmente, y pese al conflicto laboral, los músicos aceptaron acompañar a Plácido Domingo como muestra de agradecimiento a su mediación.
Horas antes, el tenor ofreció un recital para los trabajadores del teatro y sus familias, prometiendo volver al Teatro Colón el año que viene para conmemorar los 40 años de su debut en la sala.
