sábado. 27.04.2024
Thomas Sankara
Thomas Sankara

La luminosa sombra de Patrice LumunbaGamal Abdel Nasser y el capitán Sankara alumbran de nuevo a los pueblos de África. Las izquierdas sometidas al globalismo en Europa, las izquierdas sistémicas “europeístas” en lugar de abrazar a los hermanos militares sankaristas y antiimperialistas se posicionan con la potencia colonial y neocolonial Francia y el neoliberal Macron.

Thomas Sankara militar socialista y antiimperialista gobernó en Burkina Fasso y dio un gran impulso por la independencia y el progreso no solo burkinés sino africano. Sankara al igual que el congoleño Lumunba fue asesinado, en el caso del capitán en 1985 por un golpista pro occidental. Ahora el Malí y Burkina son punta de lanza del antiimperialismo en el África subsahariana y Níger con sus variantes sigue esta estela. 

Hay más, desde Guinea Conakri a la República Centroafricana pasando por Angola, Mozambique, Zambia, Sudáfrica o la histórica Argelia, madre de los frentes de liberación, incluso la Libia destrozada por la OTAN controlada desde Bengási entre otras potencias, sin olvidar Sudan y Egipto suenan tambores de fronda. Ante esto Europa no contenta con la guerra de Ucrania se plantea apoyar una nueva guerra contra Niger a pesar de las advertencias africanas con el apoyo del Zelensky territorial que puede ejercer Uganda y algún otro estado todavía controlado por la legión francesa o neo colonizado por la anglosfera. 

Malí y Burkina son punta de lanza del antiimperialismo en el África subsahariana y Níger con sus variantes sigue esta estela

Niger con un presidente blanco, de origen árabe, era el centro de control de Francia y los EEUU en la zona. Los franceses, o mejor el poder neoliberal francés, humillados en Malí y Burkina Fasso no podían consentir la lucha por la independencia o algo parecido de Niger.

El globalismo ha contagiado a los verdes, muchos socialdemócratas y ex comunistas. El globalismo de Soros y el Partido Demócrata de los EEUU trabajan por cambiar las izquierdas socialistas y antiimperialistas transformándolas en partido dóciles y que se mueven por causas “sociales” teorías que favorecen a multinacionales de farmacia… Muy alejadas de la lucha de clases y de las izquierdas del SUR global que luchan por la emancipación de sus pueblos y contra el hambre, la pobreza, la ignorancia y por recuperar sus riquezas naturales.

La dominación económica de las metrópolis tras la independencia se ha mantenido e incluso la presencia de ciertos destacamentos de tropas coloniales europeas y varias bases militares estadounidenses, pero el Estado Islámico o ISIS con oscuras conexiones con Israel y los USA en Siria, muy activo en la franja sahariana es la excusa de una intervención neocolonial francesa con ayuda de España y algún otro estado europeo. La legión Extrajera camina de nuevo sobre las arenas saharianas para combatir, dicen, el Dahes y el terrorismo ultra islamista, pero por lo visto con resultados no muy buenos pues varios estados africanos de la zona contratan a los mercenarios rusos de Wagner para hacer esta función que por lo visto hacen con más efectividad que los ejércitos regulares UE/OTAN lo que anima diversos golpes de estado cuyo cariz veremos cuál es. Malí es por ahora el más definido antiimperialista. Vamos a ver.

Los queremos pobres y darles limosnas, quejarnos de sus muertes en el mar, sin analizar el porqué, pero cuando deciden recuperar lo suyo otra cosa sucede

“Europa” es decir la UE y amplios sectores de sus ciudadanías, cuando se trata de apoyar ciertas campañas contra el hambre o apoyar a ONG,s solidarias responde, pero cuando los africanos deciden tomar en sus manos su destino y sus riquezas ya no están tan de acuerdo. Los queremos pobres y darles limosnas, quejarnos de sus muertes en el mar, sin analizar el porqué, pero cuando deciden recuperar lo suyo otra cosa sucede. Es decir les damos peces pero cuando cogen la caña de pescar estamos con Biden, Macron y Soros, las pateras.

España también es potencia ex colonizadora en África, las colonias de Guinea Ecuatorial, Sidi Ifni, Cabo Juby y el Sahara Occidental han sufrido descolonizaciones en algunos casos vergonzosas y el caso de Guinea cuajado de corrupción antes y después de la independencia no nos hacen diferentes. De hecho el apoyo a la Francia colonial es vergonzoso, pero más lo es para un gobierno progresista, según dice ser. Dejar una herencia de dictadores o entregar el noble y valiente pueblo saharaui al sultán marroquí no es tampoco un timbre de honor. El dictador Franco abandonó antes los rifeños del Protectorado del Norte de Marruecos en 1957 sin dejar ni un solo licenciado universitario, solo un militar, el teniente general El Mizzian que combatió contra la Republica al mando de un Tabor de Regulares y tras ello el franquismo tejió un entramado de intereses en Marruecos que todavía perdura y une ambas dinastías reinantes. Espero que no manchemos todavía más nuestro estado español apoyando una guerra de la OTAN contra Niger aunque sea con actores interpuestos, al igual que en Ucrania.

Espero que no manchemos todavía más nuestro estado español apoyando una guerra de la OTAN contra Niger

Ahora hablemos de “democracia” y estado de derecho: sé por experiencia personal y política vivida por mí persona en estados africanos lo que son elecciones en zonas de África. Seré cauto y políticamente correcto, pero la verdad… Voy a poner un solo ejemplo, lo de Melilla en la últimas municipales multiplicado por diez o por doce es algo muy común. Pagado todo ello por empresas extractivas europeas y caciques locales “regados” con euros y dólares. Por supuesto, sin generalizar. 

Que luego nadie diga que si China, que si Rusia que si el Dahes… Nadie desde el norte global tiene derecho a criticar porque llevamos más de trescientos años negociando con seres humanos, sembrando vientos y ahora recogemos tempestades de los antiguos y antiguas esclavas y esclavos, los salvajes, los negritos, las… pido pues apoyo y solidaridad con las personas y pueblos organizados, que quieren llevar una vida digna sin tener que subirse a un cayuco, en su tierra, porque es de ellos y de nadie más.

La resurrección de Thomas Sankara y el socialismo africano