jueves. 28.03.2024
PCE

La tensión crece por momentos a medida que se acerca la 1ª Fase del Congreso del PCE que deberá ratificar la propuesta de la dirección encabezada por José Luis Centella para desvincularse de Izquierda Unida. La cita es este sábado, 9 de abril, un día antes de la reunión del Consejo Político de IU donde también se evidenciará la división interna en torno al modelo de partido que defiende el candidato Alberto Garzón.

Sectores críticos del PCE llevan meses arremetiendo contra Centella al que califican como el “peor secretario general” que ha tenido el Partido Comunista en su historia, acusándole de querer liquidar las señas de identidad del PCE y, de paso, dar la puntilla final a Izquierda Unida.

El último motivo de arrebato ha sido la carta a la militancia escrita por Centella con su propuesta para que el PCE recupere su condición de partido electoral, una propuesta que cuenta con el respaldo de importantes dirigentes de la formación y que tiene todos los visos de salir adelante el sábado. Algunos ven esta operación como el paso definitivo para “desahuciar IU" y como la pieza clave para que la federación de izquierdas se convierta en otro sujeto político, aquél que Garzón quiere plasmar en ‘Unidad Popular’.

En una nueva carta remitida a Centella, y a la que ha tenido acceso Nuevatribuna, los críticos del PCE censuran al secretario general por querer “declarar el agotamiento de IU” apelando a ese nuevo sujeto político para “transmigrar” a otras fuerzas, en alusión a Podemos. Estas voces se muestran muy críticas con la formación de la nueva IU de Madrid que califican de “fracaso” tras la celebración, el pasado fin de semana, de su Asamblea Constituyente, “deliberadamente excluyente de la gran mayoría de afiliados con los que contaba IU en nuestra Comunidad”, dicen, y donde “el sectarismo campó a sus anchas”.

En la misma línea se ha pronunciado el partido de Gaspar Llamazares, Izquierda Abierta, al resaltar que de la nueva IU de Madrid ha quedado fuera el 70% de su militancia.

En la carta a Centella, los críticos le acusan de haber llevado al PCE “a su más mínima expresión: políticamente inerte e insignificante, federalmente desarbolado, socialmente invisible, raquítico en lo orgánico y degradado en su funcionamiento y convivencia interna”, y se preguntan con ironía: ¿Y tú eres el que, repetidamente, señala en su carta la necesidad de ‘fortalecer al PCE en lo político y en lo organizativo’?”.  Asimismo le acusan –“deslumbrado” por Podemos, dicen-, de promover “una revisión profundamente reformista del conjunto del proyecto comunista” y de dejar al partido en una “caricatura” de sí mismo.

"OPERACIÓN DE RECAMBIO"

Con todo, la correlación de fuerzas parece asegurar la victoria de Centella este sábado, en esa primera fase del Congreso donde se aprobarán los documentos políticos pero no la dirección del partido, cuyo relevo queda pospuesto a otoño. Se trata –dicen los críticos- de una “operación de recambio”, de un “proyecto político de acomodo”.

No son menos críticas algunas voces de IU, cuyo Consejo Político del domingo, 10 de abril, también se antoja tormentoso. En esa reunión se debatirá la reforma de los Estatutos (debe contar con el apoyo de 3/5) que determinará el futuro modelo de partido. Ante la Asamblea Federal prevista para junio y que podría aplazarse si hay repetición de elecciones, tres son las propuestas que se enfrentarán en el seno de IU. Por un lado, la que abandera la candidatura de Garzón, al que respaldan importantes dirigentes (los “poderes fácticos”, señalan algunos) y la propia cúpula del PCE (con un 80% de representación en los órganos de dirección de IU) y a la que se enfrentarán la corriente de la denominada ‘Declaración de Zamora’, con Paloma López a la cabeza y respaldada por Cayo Lara, e Izquierda Abierta, con la candidatura de Tasio Oliver y Teresa Aranguren.

Críticos del PCE acusan a Centella de dejar un partido de “caricatura”