viernes. 26.04.2024
Vintage Trouble. (Fotos de María Ramos)
Fotos: María Ramos

Noche en el Festival de Jazz de San Javier. Tras ‘25 años sin Tete’, espectáculo de jazz homenaje al maestro Tete Montoliú a cargo de Chano Domínguez, Horacio Fumero, David Xirgu, Eladio Reinón y Carme Canela llegó el turno de los angelinos Vintage Trouble.

Un doble programa imposible sobre el papel. Una primera parte de homenaje a pianista fallecido ahora un cuarto de siglo por alguno de quienes fueron sus acompañantes donde se tocaron estándares de jazz, versiones de boleros y de temas de Serrat y, tras apenas media hora de descanso, la sobredosis de adrenalina del cuarteto liderado por Ty Taylor. Un imposible absoluto sobre el papel. Una inolvidable velada en la realidad. Así es el festival de San Javier. Una rara avis maravillosa. 

“Deja que el ritmo entre en tu cuerpo. Deja de intentar pelear ahora, comienza a sacudirte”. James Brown a ritmo de Led Zeppelin. Como si acabase de salir de debajo de una descarga eléctrica, Ty Taylor levantó al público desde su aparición en el escenario.

Vestido completamente de blanco, pantalones, chaqueta, camiseta, zapatos y pelo, parecía convertido en un ser inmaterial, pura energía sobre el escenario. Formados hace doce años Vintage Trouble han sido los encargados de calentar al público antes de las actuaciones de grupos tan dispares como The Rolling Stones, The Who o AC/DC y de servir de arranque.

Con cinco discos a sus espaldas, andan de gira por España presentando su trabajo ‘Juke Joint Gems', un gran trabajo que, sin embargo, no parece haber encontrado su público. Grandes canciones y un potentísimo directo que apenas ha conseguido cincuenta mil escuchas de sus canciones en alguna de las plataformas digitales. Escaso bagaje para una grupo que ofrece uno directo único en energía y calidad. 

Ty Taylor, arropado en la voz de Tawny Dolley que añade calidez y nuevos matices, especialmente en los tiempos más lentos, hizo todo una demostración de show sobre el escenario, dedicando un segundo a cada cámara que se cruzaba en su mirada. Voz rica en matices y sobrada de potencia, acompañada en la guitarra un gigantesco por Nalle Colt y en la sección rítmica con el bajo del gigantesco Rick Barrio Dill y la batería de Richard Danielson en la que bien merece la pena detenerse. Danielson es de esos baterías para los que menos es más. No necesita apabullar con velocidad extrema, sino que cada vez que percute tiene sentido, le basta el pedal del bombo para sujetar la fiesta.

Obviamente, el show estuvo centrado en su último trabajo, que no deja de ser un ‘Revisted’ de su primer álbum, por lo que no faltaron sus piezas más conocidas que sirvieron para sujetar el show. Canciones como ‘Pelvis Pusher’ (intenten imaginar a un grupo haciendo una versión de esta canción en español), ‘Knock me Out’ o ‘Run like the River’ o ‘Blues Hand Me Down’ levantaron al público de sus asientos y llenaron la “orchesta” de baile y energía, a pesar de que desde la organización se había advertido que intentasen aguantar en sus asientos la primera hora de espectáculo para no limitar la visión de las primeras filas. 

No faltaron las piruetas entre el público de Ty Taylor, ni tampoco su “excursión” micro inalámbrico en mano hasta la platea superior del auditorio del Parque Almansa. Frontman espectacular, tampoco desperdició la oportunidad para hacer bandera de los derechos humanos, reivindicando la historia afroamericana, los movimientos de derechos humanos y el Black Live Matter

Una hora y media, sin bises, de intenso concierto, que deja una pregunta en el aire, dónde estaría Vintage Trouble si acertasen en la diana con un hit. 

Tras las Noches del Botánico (Madrid) y San Javier (Murcia), aún se les podrá ver en España en dos conciertos más. En el Loco Club de Valencia el viernes 15 y en Jazzaldia de San Sebastián el jueves 23 de julio.

Vintage Trouble, qué gran noche para estar sudando juntos