16 de julio de 2010, 14:18
NUEVATRIBUNA.ES - 16.7.2010
...Las personas emigran acuciadas por la pobreza, desempleo, subempleo, dictaduras, conflictos, desastres. Muchas veces la emigración no es voluntaria. Es el fruto de un desarrollo desequilibrado en el planeta y un trabajo indecente.
Los gobiernos consienten los abusos generalizados y la explotación de los trabajadores y trabajadoras migrantes. El desempleo, la precariedad, la temporalidad, los bajos salarios, la menor protección social, son elementos permanentes que golpean a los inmigrantes, especialmente vulnerables cuando son mujeres o jóvenes.
El trabajo forzoso, los malos tratos, la violencia de género, el tráfico de seres humanos, tienen que contar con una respuesta sindical en cada país. Abrir las puertas del sindicalismo a las personas migrantes es fundamental no sólo para ellas, sino para las condiciones de vida y trabajo en el país.
La crisis ha tenido como primeras víctimas a las personas migrantes, tanto desde el empleo, como desde las remesas que envían a sus países, agudizando la necesidad de endeudamiento y financiación de los países en vías de desarrollo.
La igualdad de derechos de todos los trabajadores, la persecución de las desigualdades, el combate permanente contra la xenofobia y el racismo son esenciales para el movimiento sindical mundial.
El Congreso de la CSI ha indicado a sus organizaciones en cada país, que es necesario ratificar y aplicar los Convenios de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), así como la Convención Internacional de la ONU sobre derechos migratorios. Fomentar la cooperación con los sindicatos en los países de origen para asegurar la formación de los trabajadores migrantes.
La acción sindical con los trabajadores migrantes es fundamental para asegurar su igualdad de derechos laborales y sociales, combatiendo los abusos y promoviéndola igualdad de trato. Impulsar el trabajo de instituciones internacionales, como la OIT, en este campo, y buscar alianzas con organizaciones sociales activas en la lucha por los derechos de las personas inmigrantes, debe permitir una mayor integración y cohesión social.
Francisco Javier López Martín - Secretario General de CCOO de Madrid
...Las personas emigran acuciadas por la pobreza, desempleo, subempleo, dictaduras, conflictos, desastres. Muchas veces la emigración no es voluntaria. Es el fruto de un desarrollo desequilibrado en el planeta y un trabajo indecente.
Los gobiernos consienten los abusos generalizados y la explotación de los trabajadores y trabajadoras migrantes. El desempleo, la precariedad, la temporalidad, los bajos salarios, la menor protección social, son elementos permanentes que golpean a los inmigrantes, especialmente vulnerables cuando son mujeres o jóvenes.
El trabajo forzoso, los malos tratos, la violencia de género, el tráfico de seres humanos, tienen que contar con una respuesta sindical en cada país. Abrir las puertas del sindicalismo a las personas migrantes es fundamental no sólo para ellas, sino para las condiciones de vida y trabajo en el país.
La crisis ha tenido como primeras víctimas a las personas migrantes, tanto desde el empleo, como desde las remesas que envían a sus países, agudizando la necesidad de endeudamiento y financiación de los países en vías de desarrollo.
La igualdad de derechos de todos los trabajadores, la persecución de las desigualdades, el combate permanente contra la xenofobia y el racismo son esenciales para el movimiento sindical mundial.
El Congreso de la CSI ha indicado a sus organizaciones en cada país, que es necesario ratificar y aplicar los Convenios de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), así como la Convención Internacional de la ONU sobre derechos migratorios. Fomentar la cooperación con los sindicatos en los países de origen para asegurar la formación de los trabajadores migrantes.
La acción sindical con los trabajadores migrantes es fundamental para asegurar su igualdad de derechos laborales y sociales, combatiendo los abusos y promoviéndola igualdad de trato. Impulsar el trabajo de instituciones internacionales, como la OIT, en este campo, y buscar alianzas con organizaciones sociales activas en la lucha por los derechos de las personas inmigrantes, debe permitir una mayor integración y cohesión social.
Francisco Javier López Martín - Secretario General de CCOO de Madrid