Aunque antes de nada hay que criticar, combatir, denunciar, la dictadura de la oligarquía que dirige la LFP quien con su incompetencia ha organizado un desaguisado con los horarios de tal calibre que no le ha gustado a nadie, menos a los dos titanes. Acaso piensan que la parroquia futbolera no pasa de ser un paisanaje, que es tonta y se lo traga todo con tal de estar delante de la tele huyendo de sus miserias. Cerezo y el Atleti intentaron un conato de rebeldía que quedó en eso, en conato, porque faltan bemoles o quizás porque piensen que mejor no estropear la gallina de los huevos de oro.
Otra sorpresa que me he llevado es la portada del correspondiente álbum de cromos de La Liga. ¡En su portada no aparecen jugadores del Madrid y del Barça! Sino del Atleti y del Valencia. ¿Me estarán leyendo con la matraca del bipartidismo futbolístico?
El balón ha empezado a rodar después de un verano sin fichajes galácticos ni despilfarros financieros. Con decir que el mismísimo Madrid, hasta ahora, ha vendido y no ha comprado ningún jugador ¡por primera vez en 34 años! está explicado todo. No casa esta realidad con la propaganda de D. Florentino que el Madrid tiene una economía solvente. ¿Tendrá algo que ver la situación de Bankia? En la orilla catalana se han estirado un poco más, aunque con prudencia, con el fichaje de Alba y de Song. ¿Tendrá algo que ver que Caixabank está bien? Aunque su mejor fichaje lo tenían en el hospital. Ha vuelto Villa, bienvenido para el fútbol español. Sorprendentemente el estrellato mediático de este verano ha sido el Athletic con la posible marcha de Javi Martínez y de Llorente. Parece que emigrarán, como tantos españoles. Vivir para ver. Llamativa ha sido la continuidad de Falcao a quien nada más terminar la temporada le estaban sacando del Atleti.
Otro partidazo en La Catedral
A quienes nos gusta el fútbol deberíamos hacer un peregrinaje a este templo deportivo por lo menos una vez en nuestra vida. Primera jornada y primer monumento. El Betis le ganó 3-5 al Athletic. A sus aficionados no les gustó pero no les importó porque ellos saben apreciar la magia de La Catedral cuando su equipo va perdiendo 0-3 en el descanso y en el segundo tiempo San Mamés les empuja a la proeza. Que se lo pregunten a San José con dos goles de cabeza. Les faltaban Muniaín, Javi y Llorente y, sin embargo, casi lo consiguen. En La Catedral siempre pasa algo.
Del resto de partidos (todavía faltan tres del lunes, uno de ellos a las 11 de la noche) no se pueden sacar grandes conclusiones. Estamos a mediados de Agosto y los grandes equipos todavía no están rodados. Eso no le importa al Valencia que, cambie quien cambie, es capaz de empatar en el Bernabeu. De los dos grandes, es pronto para sacar conclusiones. Si acaso en el combate por puntos que será el bipartidismo futbolístico, el Barça se ha llevado el primero. Mourinho se ha mantenido prudente y no ha levantado polémicas. Veremos con la Supercopa.
Oliver Torres, Kader, Fabrice, Beñat, Tello
Exceptuando a Messi, que no es de este mundo y que ha empezado como siempre, las grandes estrellas como Falcao o CR7 han estado ausentes. Sorprendente la pasividad de Cristiano en el Bernabeu. Así tenemos la oportunidad de dirigir los focos a su alternativa: la cantera. Aunque en su momento las estrellas coparan el protagonismo (para eso están las multinacionales deportivas y mediáticas) la temporada empieza mirando a sus cachorros. Ahí está Beñat, del Betis, reclamando un hueco junto a los centrocampistas de la Selección. O Telllo, en el Barcelona, con tres asistencias par obligar a Vilanova a contar con él y que no lo mande a la orilla del Manzanares. O Fabrice, del Málaga, ese chavalín de color que ha tenido la osadía de marcar un gol a sus 16 años.
Aunque si he de destacar a alguno, me quedo con los del Atleti, gracias a la valentía de Simeone para sacarlos en un partido difícil. Me maravilló Kader, de 20 años, quien en veinte minutos hizo más que Silvio en todo el partido hasta permitirse el lujo de sacar las faltas. Aunque la estrella de la pretemporada me parece Oliver Torres, ese jugador de 17 años a quien me permito apodarle EL DUENDE porque eso es lo que tiene en cada balón que toca. Hacía tiempo que no veía a un jugador que te transmitiera una sensación de magia. Que sea prudente; que vaya despacio; que sufra; que aprenda; que no se endiose y que su familia lo proteja, incluso de algunos directivos del Atléti. En la noche del domingo le oí unas declaraciones en directo, con un lenguaje sin los tópicos habituales, con una sabiduría y una prudencia que le harán falta para sobrevivir al cainismo tan propio de los españoles.
Lo dejo aquí. Señoras, señores, elévense por encima de las miserias y disfruten de la vida.
