lunes. 29.04.2024
Foto del autor, un sin techo en Los Ángeles, junio 2023
Foto del autor, un sin techo en Los Ángeles, junio 2023

Un viaje iniciático

Acabo de volver de un deseado viaje por los Parques Nacionales de la costa oeste de EEUU. No tengo palabras que me permitan manifestar la ruda, las más de las veces inhospitalaria, altiva hasta la arrogancia, desmedida hermosura de esa naturaleza. Para luego aterrizar sin solución de continuidad en la realidad social también ruda, también inhospitalaria (no con los turistas, no con los que tienen posibles, claro) y también de desmedida fealdad de las ciudades de San Francisco o de Los Ángeles.

El tenderloin of beef (nuestro solomillo de ternera) es la carne más apreciada por ser tierna y jugosa. Y la más cara. La ironía es que en San Francisco el barrio (district) más chic, llamado históricamente Tenderloin, ha sido ocupado (sin k, sin eufemismos) por los que se han caído de la sociedad [1], los que expresan sin manifiestos ni proclamas, los que son el síntoma, que no la enfermedad, de una sociedad orgullosa de ser lobo entre lobos.

Es paradigmático el sarcasmo con el que Gerri Kellman (genialmente interpretada por la actriz J. Smith-Cameron en su papel de General Counsel) en Succession, S4E5, 10’, afirma que no hay que temer al noruego Lucas Matsson, pues “Son jóvenes y preparados, sí, pero son europeos. Son blandos. Acostumbrados a la protección de la seguridad social, a las vacaciones pagadas y a la sanidad pública gratuita. Se creen vikingos, pero a nosotros nos criaron lobos [...] No, no tienen ni idea de lo que les espera...”.

Así es la sociedad estadounidense. Incluso entre los liberales (nuestros laboristas), la meritocracia es un dios protestante, implacable -si caes, caes por tus pecados-, inapelable, como mucho limosnero

Y no sólo la casta, también el pueblo son lobos, se sienten orgullosamente lobos y quieren seguir siendo lobos, actúan bajo el hobbesiano lema de “homo homini lupus”, y el que trastabilla no encuentra red que lo proteja, y, como los sintecho del Tenderloin, en el fondo les espera un infierno de drogas, marginación y locura, y la muerte.

Así es la sociedad estadounidense. Incluso entre los liberales (nuestros laboristas), la meritocracia es un dios protestante, implacable -si caes, caes por tus pecados-, inapelable, como mucho limosnero.

La novedad

No cabe duda de que, como animales humanos, somos curiosos y atraídos por lo novel. Es, de alguna manera, nuestro componente rousseauniano, siempre viendo lo puro y lo inmaculado en lo nuevo, en lo contrapuesto, o por lo menos alejado, de lo ya existente, perdonando su bisoñez en aras de un futuro esperanzadoramente mejor.

Esa mirada acrítica y confidente la depositamos sobre todo tipo de temas, del arte a la política, de la amistad o a la tecnología, a los amores o al trabajo. Y sirviendo esa capacidad de esperar como mejor fuente de progreso y bienestar, bien que así sea. 

El límite que debemos poner es no aceptar adanismo en los sujetos de la novedad, políticos o artistas, por ejemplo. Será nuestra responsabilidad dirimir si bajo la exaltación de lo -en apariencia- nuevo sólo hay más de lo mismo, pero presentado como si nadie lo hubiera hecho antes.

Y en política (también en el arte, pero importa menos) eso, caer en el adanismo, se paga caro, pues igual que la novedad crea un espacio pletórico de esperanzadoras ilusiones, cuando el encanto -o el encantamiento- se torna en desencanto, la realidad arranca de cuajo esas ilusionantes esperanzas, convirtiendo la tierra de vergel en erial, donde las malas hierbas podrán crecer sin término ni embocadura.

Si algún amable lector piensa que esto tiene que ver con lo que está pasando en la izquierda de la izquierda, va bien encaminado. Y si piensa que de alguna manera también tiene que ver con lo que le pasó a Ciudadanos (además de, o precisamente por pecar de hybris -desmesura de la arrogancia o del orgullo-, algo que está ocurriendo en esa izquierda de la izquierda), le daré la razón.

Chumy Chúmez, en la portada del semanario Hermano Lobo del 2 de agosto de 1975, hace decir a un orador enardecido: “¡O nosotros o el caos!”. El público emboinado responde: “¡El caos el caos!”. Y el líder, replicaba: “Es igual, también somos nosotros”. En un sentido estrictamente contrario, hoy posiblemente Chumy Chúmez, ante la idéntica afirmación que los líderes adanistas hacen, haría contestar a un público sin boinas: “Es igual, también sois vosotros”.

Caer en el adanismo, se paga caro, pues igual que la novedad crea un espacio pletórico de esperanzadoras ilusiones, cuando el encanto se torna en desencanto, la realidad arranca de cuajo esas ilusionantes esperanzas

Federación vs Confederación

Más Madrid apoyará a Sumar en las próximas elecciones del 23J con un 96,11% de votos a favor en la consulta. Vamos a poner toda nuestra fuerza para que @Yolanda_Diaz_ sea la primera presidenta del gobierno de España.” (tweet de Mónica García@Monica_Garcia_G [2], 07/06/2023)

En un artículo anterior (Chile y el federalismo, NT, 10/09/2022) advertí de los riesgos inherentes a un proceso que, desde el centralismo, aspire a descentralizar competencias. El riesgo global (suma de: deshomogeneizar el territorio; aceptar planteamientos políticos asimétricos; inexistencia de corresponsabilidad competencial, tanto vertical como horizontal; falta, o no promoción, de una cultura federal) es que se cumpla la advertencia que don José Ortega y Gasset hizo el 25 de septiembre de 1931ante las Cortes Constituyentes: “Un Estado federal es un conjunto de pueblos que caminan hacia su unidad. Un Estado unitario, que se federaliza, es un organismo de pueblos que retrograda y camina hacia su dispersión”.

El riesgo es que, poniéndose todos en la boca la palabra Federación, se actúe, no como si nos encamináramos a una Confederación, sino directamente de forma confederal.

Compromís y Sumar irán juntos a las elecciones del 23 de julio en la Comunidad Valenciana [...] Compromís consigue de Díaz conservar su marca y elegir al cabeza de lista por Valencia. La papeleta tendrá el nombre "Compromís-Sumar-Sumem per guanyar" y los de Ribó podrían formar grupo parlamentario propio si obtienen más de cinco representantes” (Huffington Post [3], 09/06/2023)

Los comuns y Sumar acuerdan presentarse juntos a las elecciones del 23J.   Las dos formaciones han pactado listas conjuntas bajo la marca Sumar - En Comú Podem”(elDiario [4], 09/06/2023)

Mas MadridCompromís o Catalunya en Comú, como seguramente el resto en sus respectivos territorios (Andalucía, Aragón, Baleares, Canaria, Navarra y Santander) se reservan implícitamente intactos no ya su derecho a volver a pelear, perdón, negociar un nuevo marco en cualquier futuro envite electoral, sino -y de forma explícita- su derecho muy confederal a actuar políticamente primando sus intereses colectivos ¿West Lothian question? De alguna manera, sí [5].

(¿Y -podría con razón alguien apuntar- qué hay de los barones territoriales del PSOE, y sus luchas cainitas, como acabamos de ver este viernes, 10 de junio? Eso, como se dice en la Bolsa, ya está descontado del precio de votarlos: son la vieja forma de hacer política y a fuer de ladinos también se aprovechan del marco de pensamiento confederalista para abogar por intereses colectivos propios, a veces directamente para abogar por intereses directamente propios. Pero, ya digo, eso ya está descontado. Lo que no está descontado y puede pasar factura es que eso mismo, la aparición de baronesías territoriales en la izquierda de la izquierda, se dé en los que enarbolan el pendón de ser una nueva forma de hacer política)

Uno casi, casi echa en falta aquello tan justamente denostado del centralismo democrático... Tampoco es que se deba pedir esa fidelidad rumiante, pero sí es exigible lealtad institucional, sin la cual, y ante la evidente complejidad del organismo creado bajo el paraguas de Díaz, el color del futuro pasará de castaño oscuro.

Uno casi echa en falta aquello tan justamente denostado del centralismo democrático... Tampoco es que se deba pedir esa fidelidad rumiante, pero sí es exigible lealtad institucional

Foto del autor, vivac de un sin techo en Los Ángeles, junio 2023
Foto del autor, vivac de un sin techo en Los Ángeles, junio 2023

¿Qué quieres ser de mayor?

 “Well, the world turns // And a hungry little boy with a runny nose // Plays in the street as the cold wind blows // In the ghetto (In the ghetto) // And his hunger burns // So he starts to roam the streets at night // And he learns how to steal and he learns how to fight // In the ghetto (In the ghetto) [...] And his mama cries // As a crowd gathers 'round an angry young man // Facedown on the street with a gun in his hand // In the ghetto (In the ghetto) // And as her young man dies (In the ghetto) // On a cold and gray Chicago mornin' // Another little baby child is born // In the ghetto (In the ghetto) // And his mama cries…” [6] (In the ghetto, del LP From Elvis in Memphis, 1969, Elvis Presley)

Esta pregunta se la hago a dos actores políticos, los principales sujetos de nuestro devenir: a la sociedad y a los partidos políticos de izquierdas, PSOE incluido.

Para no caer en la falacia de atribuir personalidad real a entes abstractos (eso que los filósofos, en su pedantería, llamamos hipostasiar), cuando digo sociedad quiero decir a todos y cada uno de los ciudadanos que la componen, y donde hablo de partidos, refiero individualmente a todos y cada uno de sus líderes, dirigentes, cuadros y militantes.

Yo, de mayor, no quiero ser una sociedad que se enorgullezca de criar lobos y se burle de “las vacaciones pagadas y la sanidad pública gratuita”, no quiero que haya tenderloins mientras “the world turns” impávidamente, ni que la educación sea o privada o las calles, donde “he learns how to steal and he learns how to fight”, ni que mis mayores, aquellos que como sociedad me hicieron, deban trabajar por falta de recursos o por miedo a la enfermedad [7]... No quiero, como sociedad, ser de mayor como la estadounidense, y, como ciudadano, es mi responsabilidad ejercer mi derecho (y también mi deber moral) de votar. La mínima acción exigible es no renunciar a ese derecho, es asumir y hacerlo propio, como si de un deber universal se tratara, la acción reflexiva de un voto, tan crítico como se quiera, pero realizado en su materialidad: introduciendo en la urna una papeleta válida.

Los partidos políticos de izquierdas deberán responder también a esa pregunta, pero en otro sentido. Tendrán que contestar, y no sólo en forma de programas, discursos o eslóganes, que también, no con arrojadas actuaciones o hábil construcción de relatos, sino que, con la materialidad de sus acciones, deberán mostrar no ya qué clase de sociedad quieren, que viene de suyo, sino cómo esperan conseguirla.

En ese “cómo”, dejando aparte vías no democráticas, sólo caben dos estrategias: una, alcanzar el poder, transitando el camino del pragmatismo necesario para que te voten, la otra, condicionar el poder, manteniendo “esa miaja de poder que su capacidad crítica le otorga: ser libre e independiente del poder para así reflexionar, informar y advertir sin cadenas que le aten ni censura que le calle.”, es decir, ser Pinocho o ser Pepito Grillo (reflexión desarrollada en un articulo anterior: Yolanda Díaz, Pinocho o Pepito Grillo, NT, 04/09/2022).

No quiero, como sociedad, ser de mayor como la estadounidense, y, como ciudadano, es mi responsabilidad ejercer mi derecho (y también mi deber moral) de votar

So pena de desperdiciar oportunidades (y ser recordado como aquél que “no desperdició prácticamente ninguna oportunidad de perder una oportunidad.”), Sumar, es decir Díaz y sus barones, y baronesas, si de verdad quieren, y no sólo desean, alcanzar el poder, deberían tener presente -es decir, escuchar de verdad- a la ciudadanía, que una y otra vez se ha expresado y se expresa a través del barómetro del CIS.

No se trata de gobernar a golpe de estadística, por supuesto que no. Pero es necesario ir no más de un par de pasos por delante para permitir que la sociedad te siga y evolucione: no se cambia la cultura de una sociedad cambiando la cultura de esa sociedad, sino cambiando las condiciones materiales en que esa cultura se da. Lo otro corre el riesgo menor de son ser comprendido ¡otra oportunidad perdida! y el mayor de caer en prácticas de raíz totalitaria.

Tal parece que, con referencia a Podemos, a Sumar y al resto de confluentes, todo lo que se tenía que decir, ya está dicho. Todo lo que se deba decir, lo dirán los votantes...

Epílogo o Epitafio

Me advierte mi buen amigo Jaime Sacasa, mi Pepito Grillo particular, del peligro de pasarse de frenada con el ánimo crítico, y para ello me apunta esta cita:

...si el 23J termina en desastre, ya ajustaremos cuentas y pediremos responsabilidades y cortaremos cabezas y proclamaremos que “ya lo decía yo”. Pero por ahora, mientras quede una posibilidad de levantar una candidatura de izquierda, y mientras no se hayan cerrado las urnas y no esté todo perdido, yo prefiero no contribuir al desánimo y la desmovilización, que ya están bastante bajos los ánimos [...] No podemos abstenernos, ni contribuir a la abstención de otros, con la excusa de que no nos han dado motivos para la ilusión, que nos han desanimado.” (Isaac RosaelDiario, 06/06/2023)

No sólo no niego, sino que afirmo que el artículo que tenía en la cabeza hubiera sido distinto (seguramente peor) de no mediar este nada sutil aguijonazo de mi querido Jaime.

Es cierto, pero también es cierto que debemos huir de una condescendencia que nos lleve a pensar que lo que decimos tiene más prevalencia en la ciudadanía que la realidad que les rodea y que sin duda ven y oyen y miran y escuchan.

Mantengo, no obstante, mi contestación: “Vale, tú. Ya te digo, la desmovilización es responsabilidad de las críticas y no de lo(s) criticado(s). Buen intento.

Si no queremos llorar ante un epitafio cuyo texto recuerde lo que pudo haber sido y no fue, no seamos condescendientes y no minusvaloremos la capacidad reflexiva, crítica y de análisis de la ciudadanía

No nos debemos -no me debo- pasar de frenada, pero si no queremos llorar ante un epitafio cuyo texto recuerde lo que pudo haber sido y no fue, si queremos que este momento sea el epílogo que, cerrando un libro, abra la posibilidad de un nuevo libro a ser escrito por la sociedad, entonces no seamos condescendientes y no minusvaloremos la capacidad reflexiva, crítica y de análisis de la ciudadanía.

Postdata

Aunque parezca que vagueo y que tiro de lo ya escrito con un leve matiz, el de la fecha de las elecciones, reproduzco por su conveniencia un trozo de otro artículo anterior:

“«Precisamente por la oscuridad moral de la actual política y el ocaso del maniqueísmo, es imprescindible el juicio singular y privado. El giro del tiempo nos exige un esfuerzo personal de análisis, crítica, reflexión y resolución, totalmente ajeno a las siglas, a los partidos, a los movimientos colectivos, a la publicidad y a la propaganda del Estado.» (Félix de Azúa, ob cit).

Poco que añadir a la petición de que el «análisis, crítica, reflexión y resolución» guíe nuestro voto en este próximo [23J] como única vía de ser “ciudadanos libres e iguales en un sistema equitativo de cooperación” (John Rawls).

¡Buenas elecciones y disfrutemos de ese día de conmemoración de la democracia!” (RGCNTLibertad, 13/05/2023)

Es nuestro derecho y nuestro deber votar con criterio en tanto es la mínima acción necesaria, la mínima aportación necesaria para la construcción de una sociedad justa y digna: si nosotros no hacemos política, otros la harán en nuestro nombre.


[1] Para mayor abundamiento e información, es suficiente con poner en un buscador las palabras tenderloin y San Francisco.
[2] https://twitter.com/Monica_Garcia_G/status/1666511307489550338?s=20
[3] https://www.huffingtonpost.es/politica/compromis-consigue-diaz-conservar-marca-elegir-cabeza-lista-valencia.html
[4] https://www.eldiario.es/catalunya/comuns-sumar-acuerdan-presentarse-elecciones-23j_1_10282518.html
[5] https://www.theguardian.com/politics/2012/jan/17/what-is-west-lothian-question
[6] “Bueno, el mundo gira //y un niño hambriento con una nariz que moquea // juega en la calle mientras sopla el viento frío // En el gueto (En el gueto) // Y su hambre arde // así que empieza a vagar por las calles por la noche // y aprende a robar y aprende a luchar // En el gueto (En el gueto) [...] Y su mamá llora // Mientras una multitud se reúne alrededor de un joven enojado // boca abajo en la calle con un arma en la mano // En el gueto (En el gueto) // Cuando su joven muere (En el gueto) // en una fría y gris mañana de Chicago // nace otro niño pequeño // En el gueto (En el gueto) // Mientras su mamá llora...
[7] https://www.estrategiaynegocios.net/lasclavesdeldia/mas-jubilados-trabajan-en-estados-unidos-DCEN1226647, “'Simplemente no tienen los medios para estar retirados', observa Kirkegaard, destacando que Estados Unidos tiene las desigualdades más marcadas entre los ingresos por jubilación entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), ante la ausencia de un sistema previsional público efectivo.”. Según la Oficina de Estadísticas Laborales de EEUU, en el 2030 está previsto que el 12% de la fuerza laboral (trabajando o en busca activa de trabajo) tengan más de 75 años. En 2020 alcanzaba el 9%, siendo el único grupo de edad rastreado por la Oficina de Estadísticas Laborales que, según sus estimaciones, aumentará durante ese periodo de 10 años.

Qué quiero ser de mayor