jueves. 28.03.2024

El líder de la oposición socialista de Portugal, Antonio José Seguro, lanzó una dura crítica al Gobierno conservador por la "austeridad ciega" que ha impuesto en el país, y pidió medidas para reactivar la economía y crear empleo

El mayor sindicato portugués, la CGTP de tendencia comunista, anunció la convocatoria de una huelga general el próximo 22 de marzo a la que no se ha sumado la otra gran central lusa, la UGT, de línea socialista.

La protesta, la segunda en cuatro meses contra las medidas adoptadas en Portugal ante la grave crisis económica que sufre el país, fue anunciada por Armenio Carlos, que asumió hace unas semanas la secretaría general de la CGTP (Confederación General de Trabajadores de Portugal).

Pocas horas antes de la convocatoria de la huelga, las autoridades lusas informaron de que, al concluir 2011, el desempleo alcanzó un nivel récord del 14 por ciento, una tasa que despertó de inmediato reacciones de preocupación tanto en el Gobierno conservador como entre la oposición socialista y la izquierda marxista.

Los conservadores lusos, que ganaron con mayoría absoluta las elecciones anticipadas de junio pasado, han adoptado severas medidas de austeridad y recortes del gasto público para sanear la economía y cumplir las exigencias del rescate financiero internacional que recibió Portugal en mayo pasado.

Los dirigentes de la UGT (Unión General de Trabajadores), que sí se sumaron a la huelga general del pasado 24 de noviembre y a la que se celebró exactamente un año antes, anunciaron hoy que esta vez no la secundarán por considerar que es una huelga de protesta sin objetivos definidos.

Sin embargo Carlos dijo a los periodistas que la fecha de la huelga se ha escogido para que el Parlamento vea la oposición de los trabajadores a la reforma laboral que debe pasar su último trámite legislativo días después.

La política económica del primer ministro Pedro Passos Coelho como un "fracaso" y la consideró la causa del "drama" que viven las familias portuguesas

No obstante el Gobierno espera que los cambios en el Código del Trabajo aprobados ya en Consejo de Ministros superen sin problemas los trámites parlamentarios gracias a su mayoría absoluta.

La convocatoria de la huelga se produce tras la multitudinaria manifestación que organizó el sábado pasado en Lisboa la CGTP para protestar también contra la política económica, que fue considerada un éxito por el sindicato.

En esa concentración Carlos cargó contra el acuerdo de concertación social alcanzado hace unas semanas entre el Gobierno, las organizaciones patronales y la UGT.

Ese pacto abrió una brecha entre las dos grandes centrales sindicales, que en más de dos décadas solo han organizado juntas las huelgas generales de noviembre de 2011 y 2010.

En medio de acusaciones mutuas, la CGTP aseguró que su rechazo a la acuerdo de concertación tenía el apoyo de sindicalistas de la UGT que están apartándose de su organización.

El secretario de la UGT, Joao Proenca, declaró a la agencia Lusa que la nueva protesta convocada por la CGTP es una "seudo huelga", que busca la lucha por la lucha y es parte de una estrategia de confrontación.

Según Proenca, la huelga no tiene sentido tras la firma del acuerdo con las patronales y el Gobierno, y exhortó a "profundizar ese camino".

Seguro, que asumió el liderazgo del Partido Socialista luso (PS) tras su derrota en las elecciones anticipadas de junio pasado, tachó la política económica del primer ministro Pedro Passos Coelho como un "fracaso" y la consideró la causa del "drama" que viven las familias portuguesas.

El mayor sindicato portugués convoca una huelga general el 22 de marzo