jueves. 25.04.2024

Hay urgencias imperiosas como la cobertura de las emergencias sociales y la creación de empleo

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha reclamado hoy que el incremento de 118 millones de euros que recibirá del Estado en 2013 se destine a políticas sociales y a la lucha contra el paro. Sostiene el portavoz que “no se puede gobernar sólo con recortes” y ha instado a la alcaldesa, Ana Botella, a regir la ciudad “mirando a la sociedad”.

Lissavetzky ha recordado que el 22% de los presupuestos de la ciudad se destinan a pagar la deuda y sus intereses -más de uno de cada cinco euros- y que esta deuda “no es una plaga de Egipto”, sino fruto de la gestión que ha realizado el equipo de Gobierno en los últimos años. Ante la negativa de la regidora, que ha avanzado que los ingresos extra “no supondrán un aumento del gasto”, el portavoz del PSOE ha subrayado que resulta “absurdo” tratar de batir récords de amortización de deudas cuando hay urgencias “imperiosas”, como son la cobertura de las emergencias sociales, atendiendo a personas en riesgo de exclusión, y la lucha contra el desempleo.

 ¿Por qué no destinan algo de los nuevos ingresos a devolver parte de lo que han quitado a los empleados municipales?

El edil socialista ha hecho hincapié en este punto, al subrayar que Madrid tiene seis distritos con tasas de paro por encima del 20%. Esto se traduce en treinta y ocho barrios por encima de ese límite, siete de los cuales llegan a sobrepasar el 25%. “Hemos insistido e insistiremos, como hacen la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional, en que son precisas medidas de crecimiento que acompañen a la austeridad. Sólo con recortes no se puede gobernar”, ha añadido Lissavetzky.

Sin embargo, la única respuesta del equipo municipal son más recortes: 28 millones de euros en el área de Familia y Servicios Sociales; 12 millones en el área de Economía y Empleo; o una rebaja de 32 millones de euros en la partida destinada a los trabajadores públicos. “¿Por qué no destinan algo de los nuevos ingresos a devolver parte de lo que han quitado a los empleados municipales?”, ha preguntado el portavoz socialista.

Para Lissavetzky, Botella parece obstinada en entrar en el libro Guiness de los Récords en el pago de la deuda. A su juicio, si se decide destinar esos 118 millones de euros extra en deuda y pago a proveedores, o el plan de ajuste aprobado por el Consistorio no llega a cumplir las previsiones, o el Consistorio “quiere ir más deprisa con los bancos” sin atender a la ciudadanía.

Lissavetzky insta a Ana Botella a usar los ingresos extra a políticas sociales y a...