viernes. 29.03.2024

Las conversaciones entre empresarios y sindicatos atraviesan una situación delicada. Cuando cumple el plazo dado por el Gobierno, y en medio de la presión que ejerce el Pacto del Euro, la mesa por la reforma de la negociación colectiva amenaza con encallar. En cualquier caso es casi seguro que Zapatero no podrá viajar con un documento cerrado bajo el brazo el próximo jueves destino a Bruselas.

La reunión del jueves resultó nefasta, según advierten en fuentes sindicales, que acusan a los patronos de tornar a posiciones “maximalistas” en la mesa encargada de dotar a 12 millones de asalariados de un nuevo sistema de negociación colectiva.

Hoy viernes UGT y CCOO se desmarcaron con una nota conjunta en la que acusaban a los empresarios de pretender menoscabar los derechos de los trabajadores. Anunciaron además que “rechazarán” todas aquellas medidas que “supongan un retroceso  en la protección de los derechos de los trabajadores, en aras de un mayor poder discrecional de los empresarios”.

La reunión de hoy viernes no ha servido para corregir la deriva en la posición patronal que denuncian los sindicatos. CCOO y UGT acusan a las confederaciones empresariales CEOE y Cepyme de intentar disminuir la cobertura de la negociación colectiva, a través de la modificación de la llamada ultraactividad de los convenios, la prórroga automática cuando cumplen su vigencia.

Además, los sindicatos anuncian que se opondrán al intento de instaurar un sistema de flexibilidad interna que signifique un “desequilibrio” en las relaciones laborales en la empresa.

Asimismo rechazan todo aquello que genere “inseguridad jurídica” en la negociación de los convenios relacionado con los problemas en la definición de la legitimación negocial de los empresarios.

También discrepan del intento de negar la negociación colectiva a los directivos y a los trabajadores contratados por los llamados emprendedores.

EL ACUERDO SE HARÁ ESPERAR

Fuentes sindicales explicaron hoy que el acuerdo no estará listo antes del próximo 24 de marzo, un día en que se celebra la cumbre donde los líderes europeos prevén aprobar el llamado Pacto del Euro. "Se dará un empujón a las negociaciones durante la semana que viene para dejar el acuerdo encarrilado para fin de mes", señalaron en fuentes sindicales.

Sin embargo, el acuerdo sí incluirá una "reivindicación" del actual modelo de formación de salarios, por lo que hará referencia tanto a su indexación a la inflación como al elemento de la productividad y las cláusulas de revisión, informaron en estas fuentes.

"Va a haber un pronunciamiento en ese sentido", confirmaron, pese a que la materia salarial no ha formado parte en ningún momento de la mesa de negociación al estar resuelta en el Acuerdo Interconfederal sobre la Negociación Colectiva 2009-2012.

Así pues, desde el ámbito sindical ya se avanza que el término productividad estará presente en el texto, pero se insiste en que se mencionará sólo como parte del actual modelo de formación de los sueldos, y no en la dirección de vincularla más a los salarios, como se aconseja en el Pacto por el Euro, que ha respaldado el Gobierno.

Posiciones “maximalistas” de la patronal bloquean el pacto