Francisco Nieto
A veces se llega a catalogar a un libro de sorprendente, y cuando llevas un rato leyéndolo ves cómo por desgracia su originalidad brilla por su ausencia. Pues con la obra infantil que ahora nos ocupa podemos gritar a los cuatro vientos que se trata de un libro ¡sorprendente!. Y es que desde la portada hasta la última página nos hallamos ante un auténtico despliegue de imaginación, tanto en lo que a los textos se refiere como a las prodigiosas ilustraciones que les acompañan. Tanto la parte escrita como la dibujada viene firmada por Víctor Bellmont, y en su primera versión se trata del proyecto final de estudios del autor en la escuela de ilustración Escuela Minúscula de Madrid, un lugar cuya filosofía de trabajo es bastante contundente: “Pensar antes que dibujar, pero dibujar bien”.
El personaje principal de la historia es daltónico y se pregunta cómo ve el mundo el resto de las personas. El libro juega con la iteración (repite varias veces el mismo proceso con variaciones significativas) con una única escena y la visión de cada miembro de su familia. Y lo cierto es que el conjunto está tratado con tal gracia y salero que en algunos de los dibujos no te queda más remedio que sonreir, sorprendiendo en los distintos tratamientos del dibujo dependiendo de la personalidad de cada comensal.
Nos hallamos ante un auténtico despliegue de imaginación, tanto en lo que a los textos se refiere como a las prodigiosas ilustraciones que les acompañan
El libro empieza con una presentación generalizada de cada miembro que forma la familia de Tomás, el narrador de la historia, aunque en realidad ya desde los títulos de credito se nos da una pista del espacio escénico donde va a tener lugar cada una de las acciones posteriores. Y ahí ya empezamos a atisbar lo ecléctico del asunto, ya que se trata de un núcleo parental en el que se mezclan varias generaciones y razas, mientras que en la siguiente página asistimos a una declaración de principios del héroe de la función confesándonos la deficiencia en la visión de los colores que padece, aunque él lo ve como algo completmanete normal y fuera de toda distinción.
El daltonismo afecta a más de trescientos cincuenta millones de personas en todo el mundo, siendo más común entre el género masculino
Como dato a tener en cuenta hay que apuntar que el daltonismo afecta a más de trescientos cincuenta millones de personas en todo el mundo, siendo más común entre el género masculino. La viñeta concluye con el protagonista preguntándose cómo verán los demás las cosas, y como el movimiento se demuestra andando, el resto del libro nos enseñará el punto de vista de cada familiar.
Así, por poner un par de ejemplos, ya que no queremos destripar el meollo del libro, el abuelo lo verá todo en blanco y negro, ya que para algo es la época en la que vivió, o el hermano más pequeño verá a todo el mundo desde una perspectiva agigantada.
En definitiva, un libro que elimina el estigma que podría estar asociado con la deficiencia de visión del color a partir de una divertida reunión familiar donde cada uno ve las cosas dependiendo del cristal con el que las mira.
