lunes. 29.04.2024

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@Montagut5 | La USC, Unión Socialista de Cataluña, o Unió Socialista de Catalunya se fundó el 8 de julio de 1923 como resultado de una escisión del PSOE en Cataluña. Su objetivo era aunar las ideas del socialismo con el nacionalismo catalán de signo progresista. Sus principales líderes fueron Manuel Serra i Moret, Rafael Campalans, Joan Comorera i Soler, Gabriel Alomar, que sería su presidente, y Josep Comaposada, aunque en 1925 abandonaría la formación, en relación con el fracaso de la propuesta de creación del Frente Único Obrero.

En principio, la USC vendría a ser una especie de plataforma política de socialistas y militantes independientes que buscaba el entendimiento entre el socialismo y el catalanismo, y la defensa de una estrategia gradualista y democrática. Al PSOE no le pareció una iniciativa adecuada.

El año 1935 fue clave en la historia de las formaciones marxistas catalanas porque se vivieron movimientos tendentes a la unificación de las distintas tendencias, espoleados por la experiencia de la Revolución de octubre

Su portavoz sería el periódico Justícia Social, un semanario que se publicó en Barcelon, y que podemos consultar en el archivo de la Fundació Rafael Campalans, entre noviembre y diciembre de 1923. Tendría otra época hasta el inicio de la Segunda República y, por fin, una tercera y última hasta 1936, cuando se crearía el PSUC, como veremos, y la publicación sería Treball. El primer director de Justícia sería Cristòfor de Domènech i Vilanova.

La USC no se pudo desenvolver durante la Dictadura de Primo de Rivera, dejando de actuar en 1926.

Con el nuevo clima político al terminar la Dictadura, la USC renació, y ya claramente como un partido político, bajo el liderazgo de Comorera, junto con Campalans y Serra i Moret. Al crearse la Esquerra Republicana entabló con la nueva formación una coalición electoral, que se mantuvo en los procesos electorales de la República. Comorera saldría elegido diputado en el Parlament, pero su llegada a la Generalitat tardaría hasta 1934, cuando fue nombrado por Companys conseller de Agricultura, destacándose en la polémica Ley de Contratos de Cultivos de 1934, que enfrentó a la Generalitat con las derechas catalana y española.

La USC trabajó por la unión de todas las tendencias del socialismo catalán mediante la fusión con la Federación Catalana del PSOE, bajo condiciones de autonomía de la dirección central del partido en Madrid. Pero este proyecto fracasó. En todo caso, la USC entraría a formar parte de la Alianza Obrera de Cataluña, impulsada por el BOC a fines de 1933, junto con el PSOE y la UGT catalanes, la Esquerra Comunista y la Unió de Rabassaires, anarquistas disidentes de la CNT y la FAI, aunque pronto se saldría la UR y la propia USC porque prefirió mantener su relación con la Esquerra Republicana. Ni el PCE ni la CNT participaron.

El año 1935 fue clave en la historia de las formaciones marxistas catalanas porque se vivieron movimientos tendentes a la unificación de las distintas tendencias, espoleados por la experiencia de la Revolución de octubre. La USC participó en reuniones con el Partido Comunista de Cataluña (PCC), la Federación Catalana del PSOE, Izquierda Comunista (ICE) y el Bloque Obrero y Campesino (BOC). Al crearse el POUM, el resto de partidos y el Partit Catalá Proletari (PCP) llegaron a un acuerdo el 23 de julio de 1936 para la creación del PSUC, o Partido Socialista Unificado de Cataluña.


Para los interesados aportamos dos apuntes bibliográficos:

R. Alcaraz, La Unió Socialista de Catalunya, Barcelona, 1987.
J. L. Martín i Ramos, Els origins del PSUC (1930-1936), Barcelona, 1977.

La Unió Socialista de Catalunya entre 1923 y 1936