Uno de esos lugares donde el azul del Mediterráneo se confunde con el verdor de los pinos, está ubicado en la provincia de Gerona, en la comunidad de Cataluña: la Costa Brava, un lugar de España que te roba el aliento.
Una franja costera que abarca toda una serie de lugares de interés, donde abundan pueblos con encanto, playas y calas paradisíacas y espacios protegidos de interés natural.
Por eso la Costa Brava es uno de los destinos favoritos de los amantes de la náutica, ya que cuenta con 214 kilómetros de playas naturales impactantes. Costa Brava fue musa inspiradora del famosísimo artista Salvador Dalí.
Por todo ello, La Costa Brava es un destino muy solicitado para el alquiler de embarcaciones, cuyos principales visitantes son los franceses, seguidos por los holandeses, alemanes y, claro está, los dueños de este paraíso sin igual, los españoles.
En la Costa Brava hay varias empresas que se dedican al alquiler de embarcaciones, pero navegar nunca ha estado tan al alcance de todos, gracias a Nautal, ya que cuenta con más de veintiséis mil embarcaciones, donde siempre habrá una que se adapte a tus necesidades.
No hay nada mejor que un paseo por cuatro de los paraísos más hermosos de la Costa Brava, así que busca un buen puerto para que puedas disfrutar de paseos alucinantes por el mar, a bordo de barcos de Nautal en la Costa Brava.
L’Escala
L’Escala es una localidad de la comarca de Alt Empordà que destaca por su enclave privilegiado al estar situado en la Bahía de Roses. Este cautivador poblado ha sabido conservar su genuino espíritu pescador, destacando por sus exquisitas anchoas de fama internacional.
L’Escala es patrimonio histórico de la región, que cuenta con un entorno natural fascinante, compuesto por calas de aguas mansas; vale la pena ir hasta allí. Igualmente las ruinas de la antigua Ampurias es uno de esos lugares que debes tomarte la libertad de visitar.
Finalmente, también te recomiendo visitar el Museo de la Moto y el Museo de la Anchoa y de la Sal, para pasar un rato diferente y entretenerte como nunca.
Calella de Palafrugell
A la orilla del mar está un interesante núcleo urbano en la comarca del Baix Empordà; uno de los pueblos más bonitos de la Costa Brava: Calella de Palafrugell.
Un pueblecito de pescadores que conserva su atractivo y transporta a sus visitantes a aquellas épocas en las que el turismo no había causado estragos en la zona costera.
Pequeñas calas de aguas mansas y cristalinas junto a las casas de pescadores, donde se ve el reposo de las barcas, conforman el hermoso, y realmente estimulante, entorno natural de este pueblo.
Este es un pueblo llamativo que te hará salir del agitado día a día, ya que no cuenta con hoteles ni edificios de gran tamaño. Esto le da un toque único y bastante agraciado.
Uno de los puntos de interés que te encantará visitar, si eres amante de la naturaleza, está en el Cabo de Cap Roig, el Jardín Botánico Cap Roig.
Cadaqués
as personas que han realizado recorridos por casi toda la Costa Brava afirman, que es el pueblo más bonito, sobretodo si lo disfrutas paseando de la mano con tu pareja. Un precioso pueblito de espíritu pescador, perteneciente a la comarca de Alt Empordà: Cadaqués.
Tiendas artesanales y bares, ocupan las antiguas casas del pueblo, que podemos apreciar a través de angostas, pero acogedoras, calles. Al estar ubicado en pleno Parque Natural del Cabo de Creus, cuenta con un entorno natural fascinante.
Cadaqués ofrece preciosas playas y pequeñas calas que constituyen el destino perfecto para una escapada en el paisaje más espléndido que se pueda imaginar.
La Casa Museo de Salvador Dalí, la Iglesia de Santa María y el famoso Museo de Cadaqués son algunos de los monumentos y edificios que se pueden visitar en esta localidad.
Palamós
La belleza de sus playas y al ambiente marinero que aún se conserva en la región, hace que este pintoresco poblado de la comarca de Baix Empordà sea muy frecuentado por los turistas: Palamón.
Un “recuerdo” de la Segunda Guerra Mundial está en el fondo de sus cristalinas aguas. Se trata del impresionante barco alemán “Boreas”. Esto hace que el buceo sea una de las actividades que más popularidad tiene este pueblo, ya hay miles de buceadores interesados en apreciar tal maravilla.
El Claustro románico del Mas del Vent y el famoso Museo de la Pesca, ubicado en el puerto pesquero de Palamós, son sitios de interés que vale la pena visitar.
En definitiva, la Costa Brava nos sorprende con rincones naturales impactantes, que invitan a la desconexión y a la emoción. Las poblaciones nombradas antes, y muchas más, mantienen el encanto y la gastronomía de épocas pasadas, cuando eran principalmente pueblos pesqueros.
Un detalle que no debe pasar desapercibido de la Costa Brava, es que un tercio del territorio está protegido, y cerca de treinta de sus playas han recibido la Bandera Azul, gracias a sus aguas limpias y libres de contaminación. Sus aguas turquesas y rodeadas por la vegetación son características de la Costa Brava. Algunas de ellas sólo son accesibles desde el mar.
Además de los cuatro poblados que hemos mencionado en este artículo, Nautal también tiene embarcaciones disponibles, en la Costa Brava, en Aiguablava, Blanes, Cala Canyelles, Canals de Santa Margarida, L’Estartit, Llafranc, Marina d’Empuriabrava, Port D'Aro, Roses, Sant Antoni de Calonge y Tamariu.
Como llegar a la Costa Brava
Es mucho más sencillo de lo que piensas, porque están disponibles todos los medios de transporte. Puedes llegar vía aérea, aterrizando en el Aeropuerto de Costa Brava - Girona, el cual está conectado con otros aeropuertos, como el Aeropuerto de Barcelona - El Prat.
También puedes llegar por tierra, en coche o autobús. Pero la forma más aconsejable, es utilizar la red de trenes de alta velocidad española, la mayor de Europa y la segunda a nivel mundial.
