nuevatribuna.es
11 de noviembre de 2009, 13:29
NUEVATRIBUNA.ES / ISABEL G. CABALLERO 11.11.2009
“Hay que seguir el rastro del dinero de esos pagos. Igual que durante un tiempo no se siguió el dinero a ETA, la comunidad internacional tiene que cortar las fuentes que les llegan a los piratas a través de los pagos que realizan los bufetes europeos”.
Así de clara se mostró este miércoles Carme Chacón en declaraciones a RNE. La ministra de Defensa afirmó que la comunidad internacional “no puede mirar hacia otro lado” cuando los piratas tienen representación legal, sobre todo con “bufetes de abogados de lo más sofisticados en Londres”, a su juicio los centros financieros donde se ha de “rastrear” el dinero de los rescates.
Con el caso Alakrana aún por resolver, Chacón quiso poner el acento en la necesidad de trabajar para erradicar la piratería tanto en el mar como en tierra ya que “aunque el problema está en África, hay conexiones con la Unión Europea y se tiene que actuar, hay que actuar en tierra, en el Este de África, y en los estados fallidos”, subrayó.
CERCA DE 500 SECUESTROS EN LAS ÚLTIMAS DOS DÉCADAS
El fenómeno de la piratería no es nuevo. Sólo en el Océano Índico –uno de los mares más peligrosos e inseguros del planeta- se han producido cerca de 500 incidentes en las dos últimas décadas. A día de hoy, más de un centenar de barcos están secuestrados por los nuevos corsarios del siglo XXI. Se trata de redes mafiosas, bien organizadas, que disponen de armamento, razón por la que la comunidad internacional “no puede permitir que siga existiendo este problema” e “impedir que se nutra esta organización criminal”, recalcó la ministra.
Pero la titular de Defensa no es la única que ha denunciado públicamente este entramado del que se nutren prestigiosas firmas de abogados europeos. El presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo, Javier Touza, aseguró a los medios que “no estamos hablando de cuatro piratas mal vestidos y mal alimentados, que van en barquitos de remos. Son auténticas mafias organizadas que tienen perfectamente planeados sus actos. Estamos ante auténticos profesionales que disponen de la más alta tecnología para atacar a los mercantes y pesqueros que operan en el Índico gracias a la información que le suministran desde centros ubicados en ciudades europeas, especialmente en Londres”.
Y es que unos hechos producidos en el cuerno de África se resuelven mediante transferencias bancarias desde la City londinense, unas transacciones habituales en los centros financieros internacionales gracias a la falta de controles sobre los flujos, sean éstos legales o ilegales. Los bufetes referidos se encargan de negociar el rescate, recibir el dinero y remitirlo a paraísos fiscales o a cuentas opacas en bancos de Yemen o Dubai.
Sobre cómo se resolverá el secuestro del Alakrana, Chacón aseguró que se están buscando todos los “recovecos legales”, siendo una de las opciones la de que los dos piratas detenidos sean juzgados en España pero cumplan su condena en Somalia. En cualquier caso, la última decisión la tiene la Audiencia Nacional.
“Hay que seguir el rastro del dinero de esos pagos. Igual que durante un tiempo no se siguió el dinero a ETA, la comunidad internacional tiene que cortar las fuentes que les llegan a los piratas a través de los pagos que realizan los bufetes europeos”.
Así de clara se mostró este miércoles Carme Chacón en declaraciones a RNE. La ministra de Defensa afirmó que la comunidad internacional “no puede mirar hacia otro lado” cuando los piratas tienen representación legal, sobre todo con “bufetes de abogados de lo más sofisticados en Londres”, a su juicio los centros financieros donde se ha de “rastrear” el dinero de los rescates.
Con el caso Alakrana aún por resolver, Chacón quiso poner el acento en la necesidad de trabajar para erradicar la piratería tanto en el mar como en tierra ya que “aunque el problema está en África, hay conexiones con la Unión Europea y se tiene que actuar, hay que actuar en tierra, en el Este de África, y en los estados fallidos”, subrayó.
CERCA DE 500 SECUESTROS EN LAS ÚLTIMAS DOS DÉCADAS
El fenómeno de la piratería no es nuevo. Sólo en el Océano Índico –uno de los mares más peligrosos e inseguros del planeta- se han producido cerca de 500 incidentes en las dos últimas décadas. A día de hoy, más de un centenar de barcos están secuestrados por los nuevos corsarios del siglo XXI. Se trata de redes mafiosas, bien organizadas, que disponen de armamento, razón por la que la comunidad internacional “no puede permitir que siga existiendo este problema” e “impedir que se nutra esta organización criminal”, recalcó la ministra.
Pero la titular de Defensa no es la única que ha denunciado públicamente este entramado del que se nutren prestigiosas firmas de abogados europeos. El presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo, Javier Touza, aseguró a los medios que “no estamos hablando de cuatro piratas mal vestidos y mal alimentados, que van en barquitos de remos. Son auténticas mafias organizadas que tienen perfectamente planeados sus actos. Estamos ante auténticos profesionales que disponen de la más alta tecnología para atacar a los mercantes y pesqueros que operan en el Índico gracias a la información que le suministran desde centros ubicados en ciudades europeas, especialmente en Londres”.
Y es que unos hechos producidos en el cuerno de África se resuelven mediante transferencias bancarias desde la City londinense, unas transacciones habituales en los centros financieros internacionales gracias a la falta de controles sobre los flujos, sean éstos legales o ilegales. Los bufetes referidos se encargan de negociar el rescate, recibir el dinero y remitirlo a paraísos fiscales o a cuentas opacas en bancos de Yemen o Dubai.
Sobre cómo se resolverá el secuestro del Alakrana, Chacón aseguró que se están buscando todos los “recovecos legales”, siendo una de las opciones la de que los dos piratas detenidos sean juzgados en España pero cumplan su condena en Somalia. En cualquier caso, la última decisión la tiene la Audiencia Nacional.
