viernes. 26.04.2024
Accidente ferroviario de Chinchilla (Archivo)

El trágico accidente ferroviario de Chinchilla fue uno de los mas graves de la historia ferroviaria de nuestro país, con 19 muertos y 50 heridos significo junto con los accidentes de  Lorca, Tobarra, y Hellín desencadenados entre los años 2001 y 2004, un trienio negro en materia ferroviaria donde los fallecidos alcanzaros la cifra de 38 personas, generó no solo una gran alarma social, también una demanda a los responsables políticos para resolver la situación tercermundista en el que se encontraba el ferrocarril en nuestra region, con 245 km. de vía única y tan solo 15 Km. con vía doble sin electrificar, un  sistema de seguridad de bloqueo telefónico, y un material rodante obsoleto que tenia una antigüedad superior a los 25 años.

10 años después seguimos igual, en el vagón de cola, a pesar de que se han aprobado diversos planes estratégicos por todos los gobiernos, que han anunciado inversiones millonarias para la región, el Plan de Infraestructuras Ferroviarias (PIF 2000-2007) que incorporó el proyecto Metrotren con una inversión prevista de 552 millones de euros para la región, el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (PEIT 2005-2013) aprobado por el gobierno anterior y actualmente el Plan de Infraestructuras, Transportes y Vivienda (PITVI 2012-2024); muchos proyectos sobre lineas de AVE con gran impacto mediático que cautivó a la mayoría de los murcianos.

Los gobiernos pasaron de largo y los planes tambien, la situación ha variado muy poco.

Cierto es que con carácter inmediato a los accidentes se modernizaron las Instalaciones de Seguridad con Control de Trafico Centralizado, Tren Tierra, se han renovado vías entre Cieza - Murcia, Cartagena - Alquerías, y Chinchilla – Hellín, se han suprimido varios pasos a nivel y se ha realizado la plataforma de entrada del Ave a Murcia de 7 Km.

Igualmente se han producido algunos cambios en el material: locomotoras nuevas, trenes Altaria, y la llegada recientemente de dos automotores 599 para media distancia, y es justo también resaltar la reciente inversión de 10 millones de euros en la renovación del tramo Lorca-Águilas cerrado por las inundaciones del pasado mes de septiembre.

Con la llegada de la crisis económica, las políticas de ajuste y los recortes en inversión pública se ha paralizado la finalización de la variante de Camarillas, el desdoblamiento de Murcia-Lorca, retrasado la llegada del AVE y el inicio de los proyectos de acceso  a Murcia y Cartagena.

Recientemente el Ministerio de Fomento y ADIF han actualizado sus planes sobre los corredores de alta velocidad para optimizar las inversiones en el momento economico actual, para el período 2016–2018, esto significa en nuestra región que el AVE llegue a Murcia en superficie, compartiendo el corredor del Mediterráneo tramos de vía de alta velocidad con vía única convencional, donde se incorpore un tercer carril, o hilo, su electrificación haciendo compatible el uso del material AVE con cercanías y mercancías. Todo esto, según sus previsiones, nos permitiría llegar a Madrid en 2h. 30 m.

Con el sistema de tres carriles se realizaría Murcia-Cartagena y Murcia-Lorca incluyendo el acceso a estas dos ciudades en superficie, y el resto de inveriones se desplaza para despues del 2018.

Esta decisión tomada por el Ministerio de Fomento que estamos conociendo a cuenta gotas, va generando frustración en la sociedad y el gobierno murciano está titubeando ante esta realidad, que trunca de nuevo los proyectos vendidos, y lanza propuestas sin pies ni cabeza, como realizar la estación en Los Dolores (40 millones de € de inversión) que seria un grave error por varios motivos, entre otros,  alejar la estación del centro de la ciudad, incluir una inversión mayor sobre las arcas públicas ya muy mermadas, y renunciar casi definitivamente al soterramiento.

Desde CCOO pensamos que seria un grave error paralizar los proyectos actuales en ejecución, corremos el riesgo de retrasar de nuevo otros 20 años las inversiones en la región. Todas las inversiones y obras que se ejecuten deben ir encaminadas a la realización de los planes previstos, incluyendo la finalización de Camarillas y el soterramiento del ferrocarril en las grandes ciudades, utilizando otras alternativas más económicas que existen en la ingeniería ferroviaria.

Una última reflexión, si los recursos invertidos en los proyectos y obras de alta velocidad se hubieran empleado en realizar la variante de Camarillas, la electrificación y desdoblamiento de las líneas de cercanías más utilizadas, nos permitiría llegar en 2h. 45m. a Madrid utilizar los trenes híbridos y mejorar las cercanías. Sobre las prioridades los datos cantan por si solos; los viajeros de los trenes de larga distancia son unos 700.000 anuales entre los corredores de Madrid y Barcelona y el núcleo de cercanías entre Murcia con Alicante, Cartagena y Lorca- Águilas cerca de 6 millones.

La región de Murcia sigue en el vagón de cola de la inversión ferroviaria