viernes. 29.03.2024

Las medidas económicas al objeto de superar la crisis implementadas por el gobierno Sánchez son claramente insuficientes, un tirita para curar una neumonía. Ciertamente la derecha lo hubiera hecho mucho peor, ya lo sabemos, pero eso no limita nuestro espíritu crítico y sobre todo la voluntad de que se haga justicia social, se redistribuyan las cargas y las clases humildes puedan comer decentemente al menos.

Los planes económicos de “recuperación” parecen improvisados y en demasiadas ocasiones chapuceros, con medidas como la de los 20 céntimos litro de combustible, fácilmente absorbibles por las petroleras y que ha enfadado mucho a los “gasolineros” pues son ellos y no las multinacionales quienes hacen el adelanto en un producto que encima sube y baja a precio de pura especulación mundial. De la electricidad mejor ya no hablamos, es simplemente indecente y criminal lo que está ocurriendo.

Echarle la culpa de todo al nuevo “Manolete” es decir Putin, suena ya a chiste Pedro Sánchez e incluso tus nefastos asesores saben que no es verdad. Cierto que Putin inicia la invasión de Ucrania, solidaridad pues con el pueblo ucraniano, sí, pero también que Biden, el viejo Biden provoca una situación que se oculta por ustedes, ahí lo dejo. Obligando a la sumisa y sometida Unión Europea a unas sanciones contra Rusia cuya efectividad si nos informamos bien es más limitada de lo que parece y ustedes lo saben pero que dejan a Europa Unión que carece de petróleo, de gas natural, ya no extrae carbón y necesita trigo, maíz, metales y abonos además de piensos para la ganadería a los pies de los caballos. Resultando que encima los EE.UU no pueden suministrar la cantidad necesaria que sustituya al gas y el petróleo ruso, pero tampoco el iraní y ofrecen gato por liebre con un crudo que no sirve para producir gasoil. Pero y quiero remacharlo lo fundamental es el trigo y en ese apartado Rusia tiene muy importantes clientes en el norte de África, Turquía, Paquistán… Que también dependen del trigo ruso y están ya incrementado sus importaciones.

Europa se queda sin elementos fundamentales para su vida diaria y su industria, adquiridas de forma barata y próxima y eso lo deben saber los “expertos” que asesoran a Sánchez, porque los alemanes y franceses parecen tenerlo más claro. En resumen las sanciones a Rusia quienes las sufren somos nosotras y nosotros. Quien más beneficio saca de esta guerra son los oligarcas estadounidenses globalistas.

Europa lleva ya perdidos más de 250.000 M de euros en esto y solo en exportaciones. Así que los estrategas de la OTAN deberían haber previsto todo este desastre humano antes de animar a Ucrania a ingresar en la OTAN y hacerle creer que luego la iban a apoyar en lugar de dejarla sola, destrozada, con territorio ocupado y no facilitarle el armamento que realmente reclama Zelenski y la exclusión aérea pues eso y la tercera guerra mundial son lo mismo.

La gran burguesía, las oligarquías españolas ya tienen por ahora planteada su solución y es que se les permita seguir robando de las arcas públicas y conteniendo las reivindicaciones sociales y es la gran coalición

Pero es que esta terrible situación a la que vamos abocados va a empeorar más todavía. Se juntan los efectos de la crisis económica del covid-19 con la invasión de Ucrania y las sanciones. Todavía veremos más. El capitalismo está en recomposición y la globalización reventada. Nos están mintiendo además acerca de la situación económica real y cuando la gente ate cabos y la publicidad comience a flaquear las movilizaciones de protesta social van a estallar y ya estamos viendo los primeros brotes. Brotes de simple rechazo que pueden ser fácilmente fagocitados por la extrema derecha pues las izquierdas oficialistas y pro-gubernamentales para la gente normal y que sufre, son el sistema y parte del sistema y del tinglado.

La solución del pacto de rentas es muy dudosa en su efectividad, con un gobierno sometido a Biden, unos sindicatos “mayoritarios” cuya implantación entre la clase trabajadora está muy debilitada, no representan realmente a la mayoría de la clase, han tenido una terrible sangría de escisiones locales y empresariales, listas independientes y multitud de pequeños sindicatos nuevos aparte de su debilidad en algunas nacionalidades históricas y sus cúpulas están en la razón de estado, lejos, muy lejos de la independencia de clase, sometidas al gobierno vía necesidades financieras, deudas y/o alejamiento de sus propias bases sociales. En la CEOE está comenzando a ocurrir algo similar. Veremos. 

El pacto de rentas entra cojo y con agentes desgastados. A esto hay que sumarle la actitud autoritaria, chula, clasista y retrograda del PP que no será fácil compañero de pacto, porque los nacionalistas juegan su liga y VOX callando gana y gana mucho.

Ante este panorama el pacto de rentas servirá para ver cómo nos recortan las rentas, como se dilapida el dinero público es sostener a las mismas grandes empresas que quieren sacar dinero del estado en su beneficio pero no pagar impuestos. En resumen que en nombre de la izquierda se hagan políticas de derechas, se privatice el estado y los de siempre paguemos la crisis.

La gran burguesía, las oligarquías españolas ya tienen por ahora planteada su solución y es que se les permita seguir robando de las arcas públicas y conteniendo las reivindicaciones sociales y es la gran coalición. A VOX lo tienen en la reserva como coco, pero ahora lo siguiente será un posible gobierno PSOE-PP que enderece esto. Lo que digo no es una locura, es una posibilidad. Porque Sánchez camina por su cuenta, tiene secuestrado el PSOE, vulnera sus acuerdos internos y no pasa nada y a sus socios de gobierno los ningunea y sabe que la operación Yolanda es la de crear una izquierda subsidiaria de un PSOE socioliberal y dinástico.

La crisis de la corona, desprestigiada, silenciosa y engreída también obligara a los partidos monárquicos es decir PP,VOX y las cúpulas y paniaguados dirigentes del PSOE a reaccionar juntos en defensa de una familia real impresentable, que puede ser que por fin y o paradoja, gracias a otra monarquía se siente en el banquillo.

Por eso y sabiendo esto, las izquierdas socialistas deben reaccionar y comenzar a pensar en ser útiles a la clase trabajadora. Es hora de tejer la alianza republicana por la democracia y la igualdad.   

Los intereses de la burguesía española indican un objetivo, la gran coalición