jueves. 25.04.2024

“!Qué miedo!” o “¡qué maravilla, qué pasada, es alucinante!”. Éstas han sido las dos expresiones, casi al 50% cada una, de las personas de mi entorno cuando hemos hablado de lo que es y hace el nuevo ChatGPT, una herramienta que he conocido y estoy experimentado desde hace un par de semanas.

Seguramente lo más lógico es sentir miedo de lo que puede hacer, y sus consecuencias, en todos los campos de la sociedad y en nuestra vida. Sus consecuencias en las formas de enseñar y aprender en las escuelas y universidades. La repercusión que tendrá en la investigación, en la comunicación, en la cultura y las formas de crear, …

Pero, ¿qué es ese ChatGPT que provoca tantos miedos y a la vez tanta admiración? Es una poderosa herramienta de Inteligencia Artificial que posibilita enviarle, en cualquier idioma, preguntas en lenguaje de diálogo de chat, como hacemos con otra persona en el WhatsApp, y el ChatGPT te responde de inmediato, en forma de conversación, con respuestas que obtiene de los inmensos volúmenes de información que hay en Internet. Unas respuestas son certeras, rigurosas e incluso muy astutas, depende de las materias, mientras que otras,no son lo suficientemente inteligentes como para reemplazar a los humanos.

Pero lo nuevo en relación con las herramientas que hasta hoy conocíamos, como Google, es que puede ser creativo: le puedes pedir que te explique el Teorema de Pitágoras, o las leyes del movimiento de Newton, y lo hace en un lenguaje comprensible, como el mejor profesor. O que te escriba una demanda por un despido al Juzgado de lo Social reclamando la readmisión, si le das los datos mínimos necesarios. También le puedes pedir que te haga una carta pidiéndole disculpas a un vecino por las molestias que le ocasionaste la noche anterior. O escribir un artículo, una intervención o un discurso sobre cualquier tema, y creo que ya he leído y escuchado más de uno hecho por este Chat, para lo cual solo hay que introducir tres o cuatro elementos que se quieran resaltar.

También te hace el resumen de un largo texto, e incluso te escribe una canción o una poesía dándole unos pocos conceptos, nombres o palabras que quieres destacar, y si no te convence la primera redacción, incluso le puedes pedir que la haga más emocionante o más apasionada, y la corrige. No sé cuántas poesías de amor se habrán recitado últimamente por nuevos poetas y poetisas que habrán emocionado a la persona destinada.

Aunque los expertos afirman que el ChatGPT no sabe exactamente nada, que la Inteligencia Artificial sólo está entrenada para reconocer patrones en vastas franjas de texto recopiladas de Internet y que, a diferencia de Google, el ChatGPT no rastrea la web en busca de información sobre eventos actuales, ya que su conocimiento está restringido a cosas que aprendió antes de 2021, lo que provoca, nos advierten, que algunas de sus respuestas sean ya obsoletas.

De igual forma que hay muchas respuestas que pueden estar completamente equivocadas. Por ejemplo, hace un par de semanas, a la pregunta tan sencilla de responder como: “si en un maratón adelanto al que va séptimo, ¿en qué lugar de la carrera me sitúo?”. La respuesta del ChatGPT fue: “en sexto lugar”. Pero si esta pregunta la haces hoy, la respuesta es la correcta, porque aprende y se corrige dinámicamente.

Imaginemos lo que puede hacer la Inteligencia Artificial en tantos campos de la empresa, de las organizaciones, de la Administración Pública y de la sociedad, o sobre el universo de la enseñanza a todos los niveles. Expertos en la educación de todo el mundo nos advierten de las consecuencias que puede tener en la forma de impartir las enseñanzas, en cómo hacer, y también corregir, los trabajos de los alumnos. En relación con el modo de realizar los exámenes, algunos están defendiendo que a partir de ahora éstos deberían ser todos presenciales y orales. El debate está abierto en este campo, y en otros mil, sobre los cambios que nos esperan con el avance de la Inteligencia Artificial.

Ahora yo me pregunto qué repercusión puede tener el ChatGPT en el sindicalismo y, como no he sido capaz de encontrar respuesta, he acudido para cerrar estas líneas al propio ChatGPT. Su respuesta a mi pregunta ha sido:

ChatGPT:

Información: ChatGPT puede proporcionar información actualizada y precisa sobre temas relevantes para los trabajadores y los sindicatos, como las leyes laborales, las negociaciones colectivas, los derechos de los trabajadores y las tendencias del mercado laboral. Esta información puede ayudar a los sindicatos a tomar decisiones informadas y a desarrollar estrategias efectivas para proteger los intereses de los trabajadores.

Asesoramiento: ChatGPT puede proporcionar asesoramiento y orientación a los trabajadores y los sindicatos sobre cómo abordar situaciones laborales específicas, como conflictos laborales, despidos injustos o discriminación en el lugar de trabajo. ChatGPT puede proporcionar respuestas imparciales y basadas en la ley, lo que puede ser útil para los trabajadores y los sindicatos que buscan asesoramiento.

Análisis: ChatGPT puede ayudar a los sindicatos a analizar los datos y tendencias del mercado laboral para identificar problemas y oportunidades. Por ejemplo, ChatGPT puede analizar los salarios y las condiciones laborales en diferentes sectores y regiones para identificar áreas donde los trabajadores están siendo explotados y necesitan protección.

Comunicación: ChatGPT puede ayudar a los sindicatos a comunicarse de manera efectiva con los trabajadores y otros grupos interesados. Por ejemplo, ChatGPT puede ser utilizado para desarrollar materiales de comunicación, como folletos y carteles, que expliquen los derechos de los trabajadores y las acciones que pueden tomar para protegerse.

En general, ChatGPT puede ser una herramienta útil para los sindicatos y los trabajadores que buscan proteger sus intereses. Al proporcionar información, asesoramiento, análisis y comunicación, ChatGPT puede ayudar a fortalecer la posición de los trabajadores en el mercado laboral y mejorar las condiciones de trabajo para todos.

Bueno, aquí lo dejo, pero lo cierto es que ésta realidad , también con un poco de fantasía, apunta que es algo extraordinario, aunque nos dé un poco de miedo.

Feliz fin de semana.

ChatGPT, Inteligencia Artificial: ¿qué  miedo, o qué maravilla?