miércoles. 24.04.2024

Portando banderas de Bahréin, unas 5.000 personas marcharon de la Perla, el epicentro de las protestas, hasta la Embajada saudí, ubicada en una exclusiva zona de la capital donde las calles estarían desiertas en cualquier otro momento.

La multitud gritó "¡Abajo, abajo con Hamad!", refiriéndose al gobernante de Bahréin, el rey Hamad bin Isa al Jalifa.

Bahréin declaró este martes la ley marcial, un día después de que tropas saudíes cruzaran el puente que une los dos países vecinos.

"La gente está enfadada. Queremos que finalice esta ocupación", indicó un manifestante. "No quiero que nadie ayude a los Al Jalifa o a nosotros", agregó refiriéndose a la familia gobernante. "No vamos a atacar la Embajada, pero si ellos nos atacan nos defenderemos", advirtió.

Alrededor del 60 por ciento de los bahreiníes son chiíes. Esta población se queja de la discriminación a la que les somete la familia real suní. Las peticiones para que se derroque a la monarquía han alarmado a la minoría suní, que teme que el descontento pueda servir al poder chií de Irán.

Irán criticó duramente la intervención de Arabia Saudí. El Gobierno de Bahréin está preocupado por que su pequeña isla pueda convertirse en un foco de disputa entre los suníes, de los países del Golfo gobernados por chiíes --aliados de Estados Unidos-- e Irán, gobernada por chiíes y enemigo estadounidense.

Miles de personas se manifiestan en protesta por la llegada de tropas saudíes a Bahréin