nuevatribuna.es
2 de junio de 2009, 20:14
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 1.6.2009
El ministro de Defensa de Brasil, Nelson Azevedo Jobim, confirmó este martes que "no hay duda" de que los restos metálicos y asientos de avión avistados por el Ejército del Aire brasileño a primera hora de la tarde, a unos 650 kilómetros al noreste de las costas brasileñas, son del Airbus 330 de la compañía Air France desaparecido con 228 personas a bordo la noche del domingo. "No hay la menor duda de que los restos son del avión de Air France", afirmó Jobim en una rueda de prensa en Río de Janeiro. El ministro precisó que un avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea brasileña (FAB) "visualizó los restos, o sea, vio material diverso en una franja de cinco kilómetros".
Barcos de la Marina de Brasil que se dirigen al área del océano indicada por la FAB recogerán los restos, indicó Jobim, quien agregó la mayor dificultad será encontrar las cajas negras del Airbus 330 que volaba de Río de Janeiro a París. La FAB había informado previamente de que entre los restos avistados figuraba un asiento de avión, trozos de metal y vestigios de aceite y queroseno.
PASAJEROS ESPAÑOLES
En el vuelo AF447 desaparecido en el Atlántico viajaban dos españoles. Uno de ellos es un ingeniero de 38 años de edad natural de Marchena (Sevilla), según Iván Casero Montés, primo del desaparecido, identificado como Andrés S.M., casado pero sin hijos. Andrés Suarez Montes había contraído matrimonio hace aproximadamente un año y trabajaba para la multinacional "Schlumberger", dedicada a la innovación tecnológica en el negocio de exploración y producción de petróleo y gas.
Según su primo, había embarcado en este vuelo que cubría la ruta Río de Janeiro (Brasil)-París (Francia) porque, tras haber pasado determinado tiempo en el país carioca trabajando para la compañía, había sido "destinado" por la empresa a Francia, donde "pensaba fijar su residencia". Debido a su trabajo, Andrés pasaba largas temporadas fuera de España, pero "venía aquí con bastante regularidad" y visitaba incluso su pueblo natal, si bien su familia se reparte entre este municipio y la capital andaluza, relató su primo. Iván Casero ha reconocido que la familia de Andrés se encuentra "mal, muy mal", a la espera de nuevas noticias sobre el destino del vuelo AF447, desaparecido con 228 personas a bordo entre las que se incluiría también una española.
DE REGRESO DE LA LUNA DE MIEL
Más de 24 horas después de que desapareciera el avión de Air France en el Océano Atlántico se conocía la identidad de la segunda pasajera de nacionalidad española que iba a bordo. Su nombre, Ana Negra Barrabeig, una joven de 28 años que trabaja en una consultoría, según han confirmado fuentes diplomáticas a Radio Nacional.
La mujer, de origen catalán, se encontraba en Brasil de Luna de Miel con su marido, también de nacionalidad española, pero que cogió otro avión con destino a Emiratos Árabes, lugar donde tiene fijada su residencia esta pareja. Ana Negra tenía unos días más de vacaciones y quiso volver a España para pasar unas jornadas en familia.
Mientras, en Francia continúa buscando explicación a lo sucedido. La mayor parte de la prensa gala coincidía el martes en titular por "Misterio". Nadie se explica qué ha ocurrido para que un Airbus cayera fulminado por un rayo, en caso de confirmarse que fue esta descarga eléctrica la causante del fallo. La investigación se ha centrado en una "zona ciega" sobre la que no tiene alcance el radar, de una extensión cercana a 120 kilómetros cuadrados y situado a 1.100 kilómetros mar adentro de la costa brasileña.
FUERA DE LOS RADARES
El avión Airbus de Air France, en el que viajan 228 personas a bordo desde Río de Janeiro al aeropuerto parisino de Charles de Gaulle, desapareció en la mañana del lunes de los radares aéreos. Al parecer, la aeronave dejó de ser contactada a las 08.00 del lunes hora española, cuando debía encontrarse cerca de la costa brasileña. Se esperaba que el Airbus A330 aterrizara a las 11.10 horas en París.
Air France cree que el Airbus "pudo ser alcanzado por un rayo", según declaró un portavoz de la compañía aérea francesa, Francois Brousse. Poco antes, la empresa indicó que el aparato había enviado un mensaje hacia las 04:14 (hora española) en el que informaba de un cortocircuito eléctrico después de atravesar una zona de tormentas con fuertes turbulencias.
"Air France lamenta anunciar estar sin noticias del vuelo AF 447 que estaba operando la ruta Río de Janeiro y París-Charles de Gaulle y cuya llegada estaba prevista esta mañana para las 11.15 hora local", indicó la aerolínea en un comunicado. La compañía explicó que el vuelo, que despegó de Río de Janeiro a las 19.00 hora local, contaba con doce tripulantes, de los cuales eran tres técnicos y nueve comerciales. Además, habilitó un número de teléfono para los que se quieran poner en contacto con Air France: 0800 800 812 para las llamadas desde Francia y +33 1 57 02 10 55 para los que llamen desde el extranjero.
El ministro de Defensa de Brasil, Nelson Azevedo Jobim, confirmó este martes que "no hay duda" de que los restos metálicos y asientos de avión avistados por el Ejército del Aire brasileño a primera hora de la tarde, a unos 650 kilómetros al noreste de las costas brasileñas, son del Airbus 330 de la compañía Air France desaparecido con 228 personas a bordo la noche del domingo. "No hay la menor duda de que los restos son del avión de Air France", afirmó Jobim en una rueda de prensa en Río de Janeiro. El ministro precisó que un avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea brasileña (FAB) "visualizó los restos, o sea, vio material diverso en una franja de cinco kilómetros".
Barcos de la Marina de Brasil que se dirigen al área del océano indicada por la FAB recogerán los restos, indicó Jobim, quien agregó la mayor dificultad será encontrar las cajas negras del Airbus 330 que volaba de Río de Janeiro a París. La FAB había informado previamente de que entre los restos avistados figuraba un asiento de avión, trozos de metal y vestigios de aceite y queroseno.
PASAJEROS ESPAÑOLES
En el vuelo AF447 desaparecido en el Atlántico viajaban dos españoles. Uno de ellos es un ingeniero de 38 años de edad natural de Marchena (Sevilla), según Iván Casero Montés, primo del desaparecido, identificado como Andrés S.M., casado pero sin hijos. Andrés Suarez Montes había contraído matrimonio hace aproximadamente un año y trabajaba para la multinacional "Schlumberger", dedicada a la innovación tecnológica en el negocio de exploración y producción de petróleo y gas.
Según su primo, había embarcado en este vuelo que cubría la ruta Río de Janeiro (Brasil)-París (Francia) porque, tras haber pasado determinado tiempo en el país carioca trabajando para la compañía, había sido "destinado" por la empresa a Francia, donde "pensaba fijar su residencia". Debido a su trabajo, Andrés pasaba largas temporadas fuera de España, pero "venía aquí con bastante regularidad" y visitaba incluso su pueblo natal, si bien su familia se reparte entre este municipio y la capital andaluza, relató su primo. Iván Casero ha reconocido que la familia de Andrés se encuentra "mal, muy mal", a la espera de nuevas noticias sobre el destino del vuelo AF447, desaparecido con 228 personas a bordo entre las que se incluiría también una española.
DE REGRESO DE LA LUNA DE MIEL
Más de 24 horas después de que desapareciera el avión de Air France en el Océano Atlántico se conocía la identidad de la segunda pasajera de nacionalidad española que iba a bordo. Su nombre, Ana Negra Barrabeig, una joven de 28 años que trabaja en una consultoría, según han confirmado fuentes diplomáticas a Radio Nacional.
La mujer, de origen catalán, se encontraba en Brasil de Luna de Miel con su marido, también de nacionalidad española, pero que cogió otro avión con destino a Emiratos Árabes, lugar donde tiene fijada su residencia esta pareja. Ana Negra tenía unos días más de vacaciones y quiso volver a España para pasar unas jornadas en familia.
Mientras, en Francia continúa buscando explicación a lo sucedido. La mayor parte de la prensa gala coincidía el martes en titular por "Misterio". Nadie se explica qué ha ocurrido para que un Airbus cayera fulminado por un rayo, en caso de confirmarse que fue esta descarga eléctrica la causante del fallo. La investigación se ha centrado en una "zona ciega" sobre la que no tiene alcance el radar, de una extensión cercana a 120 kilómetros cuadrados y situado a 1.100 kilómetros mar adentro de la costa brasileña.
FUERA DE LOS RADARES
El avión Airbus de Air France, en el que viajan 228 personas a bordo desde Río de Janeiro al aeropuerto parisino de Charles de Gaulle, desapareció en la mañana del lunes de los radares aéreos. Al parecer, la aeronave dejó de ser contactada a las 08.00 del lunes hora española, cuando debía encontrarse cerca de la costa brasileña. Se esperaba que el Airbus A330 aterrizara a las 11.10 horas en París.
Air France cree que el Airbus "pudo ser alcanzado por un rayo", según declaró un portavoz de la compañía aérea francesa, Francois Brousse. Poco antes, la empresa indicó que el aparato había enviado un mensaje hacia las 04:14 (hora española) en el que informaba de un cortocircuito eléctrico después de atravesar una zona de tormentas con fuertes turbulencias.
"Air France lamenta anunciar estar sin noticias del vuelo AF 447 que estaba operando la ruta Río de Janeiro y París-Charles de Gaulle y cuya llegada estaba prevista esta mañana para las 11.15 hora local", indicó la aerolínea en un comunicado. La compañía explicó que el vuelo, que despegó de Río de Janeiro a las 19.00 hora local, contaba con doce tripulantes, de los cuales eran tres técnicos y nueve comerciales. Además, habilitó un número de teléfono para los que se quieran poner en contacto con Air France: 0800 800 812 para las llamadas desde Francia y +33 1 57 02 10 55 para los que llamen desde el extranjero.
