nuevatribuna.es
17 de junio de 2009, 17:37
NUEVATRIBUNA.ES - 17.06.2009
Las protestas y los disturbios no cesan en Teherán. A pesar de prohibir las manifestaciones, de los muertos que se han saldado, de la violencia que están ejerciendo los paramilitares iraníes, la gente sigue saliendo a la calle y arriesgando más que nunca sus vidas.
La otra batalla se libra en la red. Como ya informábamos ayer, Twitter y Facebook se han convertido en herramientas fundamentales para denunciar la realidad que se está viviendo. Ante la censura de medios, el arresto de periodistas y la más que sesgada información que ofrecen los medios oficiales ha provocado que los iraníes se hayan tenido que abrazar a las redes sociales para mostrar la otra cara de la moneda de lo que sucede en su país.
En un repaso por diversos blogs y por el twitter iraní, la palabra que más se repite es ‘revolución’. Cuentan cómo las marchas de la población son continuas, cómo los estudiantes intentan llevar a cabo diversas acciones desde sus facultades y señalan cada una de las agresiones y las vulneraciones de derechos humanos que están produciendo el Gobierno de Mahmud Ahmadineyad.
ATAQUES EN LAS CASAS DE LOS REFORMISTAS
Según estas redes sociales, la madrugada del martes diversas motos no identificadas pasaron por algunos barrios de Teherán rompiendo las ventanas de las casas, golpeando los coches aparcados, como señalaba una bloguera: “generando terror”.
En esta misma línea el político reformista, miembro del Parlamento iraní, Akbar Aalami , denuncia en su web que su casa fue atacada la pasada noche por los paramilitares, causando el destrozo de gran parte de sus pertenencias.
Otros compañeros reformistas han sido arrestados, entre ellos se encuentra el activista Saeed Hajjarian y su mujer. Incluso un hermano del ex presidente Mohamed Jatamí, también ha sido encarcelado. Y es que desde que comenzaron las protestas lideradas por el ex candidato reformista Mir Hosein Musavi contra los resultados electorales han sido detenidas alrededor de cien personas.
CENSURA UNIVERSITARIA Y MEDIÁTICA
Otro de los ataques más brutales se ha perpetrado en la universidad de Teherán, donde según informan algunos twitteros fueron asesinados cinco estudiantes, y aseguran que esta tarde 150 profesores de esta universidad se dirigirán al entierro de los fallecidos. La corresponsal de RTVE, Yolanda Álvarez, también indica que diversos testimonios que ha entrevistado, denuncian que en las manifestaciones de ayer se produjeron diversas muertes, entre ellas la de un niño. Sin embargo ni la información de Twitter ni la de la corresponsal se pueden confirmar.
La cara más negra de la censura se muestra con el arresto de diez periodistas iraníes, entre ellos el director de un periódico crítico con el Gobierno, y con la angustiante noticia para sus familias de no saber dónde se encuentran, denunciaba una bloguera.
Más del 70% de la población iraní está formada por población joven, que es la que ha ofrecido todo el apoyo al derrotado Musavi. A pesar de que las manifestaciones de la oposición están prohibidas (las de los seguidores de Ahmadineyad sí se permiten) los jóvenes anuncian en el twitter que esta tarde volverán a salir a la calle, se aconsejan cómo tomar medidas para evitar los gases que les lanzarán, pero saldrán, porque como ellos mismos definen están ante una ‘revolución’, al menos es lo que sienten.
Las protestas y los disturbios no cesan en Teherán. A pesar de prohibir las manifestaciones, de los muertos que se han saldado, de la violencia que están ejerciendo los paramilitares iraníes, la gente sigue saliendo a la calle y arriesgando más que nunca sus vidas.
La otra batalla se libra en la red. Como ya informábamos ayer, Twitter y Facebook se han convertido en herramientas fundamentales para denunciar la realidad que se está viviendo. Ante la censura de medios, el arresto de periodistas y la más que sesgada información que ofrecen los medios oficiales ha provocado que los iraníes se hayan tenido que abrazar a las redes sociales para mostrar la otra cara de la moneda de lo que sucede en su país.
En un repaso por diversos blogs y por el twitter iraní, la palabra que más se repite es ‘revolución’. Cuentan cómo las marchas de la población son continuas, cómo los estudiantes intentan llevar a cabo diversas acciones desde sus facultades y señalan cada una de las agresiones y las vulneraciones de derechos humanos que están produciendo el Gobierno de Mahmud Ahmadineyad.
ATAQUES EN LAS CASAS DE LOS REFORMISTAS
Según estas redes sociales, la madrugada del martes diversas motos no identificadas pasaron por algunos barrios de Teherán rompiendo las ventanas de las casas, golpeando los coches aparcados, como señalaba una bloguera: “generando terror”.
En esta misma línea el político reformista, miembro del Parlamento iraní, Akbar Aalami , denuncia en su web que su casa fue atacada la pasada noche por los paramilitares, causando el destrozo de gran parte de sus pertenencias.
Otros compañeros reformistas han sido arrestados, entre ellos se encuentra el activista Saeed Hajjarian y su mujer. Incluso un hermano del ex presidente Mohamed Jatamí, también ha sido encarcelado. Y es que desde que comenzaron las protestas lideradas por el ex candidato reformista Mir Hosein Musavi contra los resultados electorales han sido detenidas alrededor de cien personas.
CENSURA UNIVERSITARIA Y MEDIÁTICA
Otro de los ataques más brutales se ha perpetrado en la universidad de Teherán, donde según informan algunos twitteros fueron asesinados cinco estudiantes, y aseguran que esta tarde 150 profesores de esta universidad se dirigirán al entierro de los fallecidos. La corresponsal de RTVE, Yolanda Álvarez, también indica que diversos testimonios que ha entrevistado, denuncian que en las manifestaciones de ayer se produjeron diversas muertes, entre ellas la de un niño. Sin embargo ni la información de Twitter ni la de la corresponsal se pueden confirmar.
La cara más negra de la censura se muestra con el arresto de diez periodistas iraníes, entre ellos el director de un periódico crítico con el Gobierno, y con la angustiante noticia para sus familias de no saber dónde se encuentran, denunciaba una bloguera.
Más del 70% de la población iraní está formada por población joven, que es la que ha ofrecido todo el apoyo al derrotado Musavi. A pesar de que las manifestaciones de la oposición están prohibidas (las de los seguidores de Ahmadineyad sí se permiten) los jóvenes anuncian en el twitter que esta tarde volverán a salir a la calle, se aconsejan cómo tomar medidas para evitar los gases que les lanzarán, pero saldrán, porque como ellos mismos definen están ante una ‘revolución’, al menos es lo que sienten.
