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NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 2.6.2010

La Knesset (Parlamento israelí) ha vivido un acalorado debate que ha terminado en trifulca sobre el asalto a la flotilla solidaria con ayuda para la Franja de Gaza. Varios diputados han sido expulsados por insultar y tratar casi de agredir a la parlamentaria árabe-israelí del partido Balad, Haeen Zuabi, que participó en la fallida iniciativa y que ha tachado la actuación de la Armada hebrea de "operación militar pirata".

Durante el debate, y antes de que el presidente de la Cámara, Reuven Rivlin, diera la palabra a Zuabi, varios diputados la han criticado y algunos han llegado a calificar a los árabe-israelíes de "enemigos de Israel", mientras que otro ha acusado a sus representantes en la Knesset de "espías parlamentarios". El diputado del Likud Miri Regev ha pronunciado incluso la palabra "traidora" dirigida a la diputado y le ha pedido que se marcha a Gaza.

El único que ha salido en defensa de Zuabi es el líder del partido Hadash, Mohamad Barakeh. "Nosotros estamos con nuestra colega Zuabi y consideramos sus acciones nobles, ya que tenían como objetivo levantar el asedio de toda una nación", ha asegurado. Su intervención tambiénb ha provocado la reacción de los diputados de la derecha, que han proferido gritos de "enemigos, enemigos". Barakeh les ha respondido acusándoles de tratar de "justificar el asesinato a sangre fría de manifestantes".

La tensión ha aumentado cuando le ha llegado el turno a Zuabi. Una vez en el atril, Anastassia Michaeli, diputada del partido ultraderechista Israel Beitenu --al que pertenece el ministro de Exteriores Avigdor Lieberman--, ha subido al estrado para intentar evitar que Zuabi hablara, lo que ha obligado a otros diputados a intervenir para separarlas, hasta que finalmente Michaeli ha sido expulsada de la sala. A ella se han sumado otros diputados más durante el discurso de la diputada árabe-israelí, de quien han dicho entre otras cosas que se merece un "premio de Hamás". Unos cuantos han vuelto a entrar en la sala, por lo que el presidente de la Knesset ha tenido que volver a intervenir.

Zuabi, que ha dicho estar "asombrada por las palabras de desprecio que había oído", ha explicado que decidió participar en la flotilla porque era "un 'mitva' --término judío que significa mandamiento-- político, humano y moral para oponerse al encarcelamiento de 1,5 millones de personas". Asimismo, ha denunciado el "asedio ilegal, inhumano e ilegítimo" que Israel mantiene sobre Gaza y que "sólo los (políticos) inmorales apoyan".

En cuanto al asalto a la flotilla, lo ha calificado de "operación militar pirata, criminal y contraria al Derecho Internacional". Asimismo, ha pedido al Gobierno que explique por qué se confiscaron las cámaras de los periodistas que viajaban a bordo de los barcos y "por qué se opone a una investigación". "¿Por qué sólo publicáis las imágenes relacionadas con la operación del Ejército? ¿Por qué no publicáis las imágenes de los diez hombres que murieron?", se ha preguntado. El balance oficial de víctimas se mantiene en nueve.

Finalmente, el presidente de la Knesset le ha pedido que abandonara el estrado, y ante su negativa, Zuabi también ha tenido que ser obligada a abandonar la sala. Posteriormente, el debate se ha dado por finalizado, después de que el viceministro de Defensa, Matan Vilnai, pidiera que se trasladara al comité de Asuntos Exteriores ya que "no está sirviendo a ningún fin de utilidad".

La diputada que viajó con la flotilla, recibida con una bronca en la Knesset