jueves. 25.04.2024
f5

¿Quieres verla?

Hazlo de la mano de la profesora de griego, Camino Azcona en la primera parte y la segunda por el profesor de Historia, Edmundo Fayanás.

Isfahán es la ciudad más bella de Irán, “la perla de Persia”.

Se trata de la tercera ciudad más grande del país, después de su capital, Teherán, y Mashad. Tiene cerca de dos millones de habitantes y es una de las más turísticas del país.

Se encuentra a 439 kms. de Teherán (al norte) y a 485 de Shiraz (al sur). Es el segundo centro industrial del país después de Teherán, con industria metalúrgica, de tejidos y talleres artesanales.

Recorrido por Irán

f12

A lo largo de la historia han pasado por ella muchos pueblos, como los aqueménidas (s.VI a.C. – IV d.C.), partos, sasánidas, árabes, selyúcidas (entre el XI y XIII que la embellecieron, siendo en época estival residencia real), ismailitas (que la destruyeron) y los safávidas, cuyo monarca, Abbás I el Grande (1587-1629), trasladó la capital a Isfahán en 1598, siendo el impulsor de su embellecimiento y de las grandes obras que hoy la adornan: palacios, mezquitas, paseos, jardines y puentes.

El establecimiento de Isfahán como la gran capital de Persia, y el esplendor material de la ciudad atrajo intelectuales de todos los rincones del mundo, lo que contribuyó a una vida cultural rica en diferentes campos.

La calle principal es la avenida Chahar bagh “cuatro jardines” que, con sus 3 km., articula la ciudad. Chahar bagh (de chāhār, 'cuatro' y bāgh, 'jardín') es una expresión persa que se utiliza para identificar un estilo de jardín persa. El jardín, cuadrilátero, sigue un esquema de planta en cruz y se divide en cuatro partes mediante dos ejes que se cortan perpendicularmente, plasmados con senderos, caminos o canales de agua. La cruz puede ser latina (un brazo más largo que los otros) o griega (cuatro brazos iguales). El punto de intersección suele destacarse con una fuente o pozo. La avenida Chahar bagh, construida por Abbas el Grande en 1596, es uno de los ejemplos más famosos de este estilo.

f9
Avenida Chahar bagh

El bulevar Chahar bagh de Isfahán desemboca en el puente monumental

f11

El famoso bulevar de Champs-Élysées de París fue diseñado según este hermoso paseo del interior de la ciudad.

La ciudad está atravesada por el río Zayandeh “dador de vida” en 7 de sus 400 km., como si se tratase de su columna vertebral. El agua de este río contribuyó al crecimiento de la población, así como de la economía, dándole un paisaje verde.

Es uno de los más grandes del país y fluye únicamente a lo largo de la provincia de Isfahán. En los últimos años, llega casi seco, especialmente en verano.

f8

El río está atravesado por 12 puentes de nombres mágicos y formas diversas. De todos ellos los más concurridos son:

Si-o-Seh o puente de los 33 arcos. Construido en 1602 en época safávida, con una longitud de 300 metros y una anchura de 14 metros. Tiene dos niveles y sirve como lugar de paso, aunque también como presa para regular el curso del río.

f10
Nota: el hotel en el que previsiblemente nos alojaremos está muy cerca de este puente. Ver en el plano

Más conocido es el puente Khaju, uno de los preferidos por los locales para pasear. En jueves o viernes la gente joven se junta en él para recitar poemas y cantar canciones típicas, dada la resonancia que ofrecen sus bóvedas.

Es considerado uno de los puentes más bellos del mundo. Construido en 1650 por el rey Abbás II, une la zona histórica persa con el barrio armenio, ubicado en la parte sur de la ciudad. Este puente tiene 24 arcos y dos pisos.

f7
En el piso inferior existe una curiosa casa de té, al lado mismo de la corriente del río

f6La plaza de Naghsh-e-Jahan (plaza del Imán), “el ombligo del mundo persa”

Todo lo que uno espera de un viaje a Irán se puede encontrar en esta plaza, una de las más grandes del mundo, la 2ª después de Tiananmen en Pekín. Fue declarada Patrimonio mundial de la Humanidad por la Unesco en 1979.

Es un enorme rectángulo de 508 metros de largo y 160 de ancho, construida a partir de 1598, cuando el rey Abbás I trasladó la capital persa de Qazvin a Isfahán. El rey quiso incluir en este lugar los tres pilares de su imperio: la religión, representada por la mezquita Masjed-e-Shah, el comercio, representado por el Gran Bazar Imperial y el poder del rey, representado por su propia residencia, el palacio Ali Qapu. Cabe f5mencionar el cuarto monumento, que cierra así la plaza por sus cuatro costados, la mezquita privada del rey, o mezquita de Lotf Allah. Hablamos de las mezquitas más impresionantes que nunca se han edificado y algunos de los palacios más suntuosos que el imperio persa mandó construir para sus dignatarios. La plaza está rodeada por una galería porticada que forma parte del enorme bazar y donde encontramos trabajadores de cobre, miniaturistas, ceramistas.

La dinastía safávida utilizó esta plaza como campo de polo, siendo la cancha de polo más refinada de la f4historia. En ella el soberano y sus caballeros jugaban al polo y el pueblo presenciaba las destrezas hípicas de su soberano. Hoy permanecen incólumes dos porterías en los frentes norte y sur con sus postes de mármol.

En medio de la plaza hay jardines, estanques, fuentes, lo cual evidencia que la cultura del agua ha estado siempre muy presente en el pueblo persa. El agua simboliza abundancia, riqueza, poder y eternidad.

f3La solemnidad de los edificios contrasta con el jolgorio popular que se vive en ella: colas de personas para montar en calesa, familias enteras tumbadas sobre alfombras haciendo pic-nic. En la plaza hay bullicio, calor y mucho color.

Como hemos dicho, destacan en la plaza cuatro puntos:

  • Al oeste: Mezquita de Lotf Allah
  • Al sur: mezquita del imán (Masjed-e-Shah)
  • Al este: palacio de Ali Qapu
  • Al norte: puerta Qeisarieh

Estas cuatro joyas arquitectónicas del arte persa están explicadas minuciosamente en la guía elaborada por Edmundo; aquí diremos lo que sorprende de cada una.

f2

  • Mezquita de Lotfollah

f15

f1La cúpula presenta el efecto óptico conocido como “cola de pavo”: un pequeño rayo de luz reflejado de forma centrípeta desde el centro de la cúpula da la sensación de que se trata de una cola de pavo. El arquitecto fue Muhammad Riza ibn Husayn, y el calígrafo Reza Abbasi (1571-1629), gran miniaturista y uno de los principales pintores persas de todos los tiempos, en especial del arte safávida.

f14

  • La Mezquita del Imam Jomeini (mezquita Real o mezquita Masjed-e-Shah)

f11

f10Sus mosaicos de siete colores destacan por encima de cualquier otra cosa: azul, azul turquesa, blanco, negro, amarillo, verde y marrón (el siete es número simbólico en el islam). El impacto óptico que producen estos colores es extraordinario. Parece que la baja humedad del aire de Persia hizo que los colores fueran más vivos y los contrastes mucho más intensos que en Europa p.e.

f9

  • Palacio de Ali Kapu “Puerta sublime”.

f8Llama la atención su planta sexta que alberga “la sala de la música” con techos decorados con formas de vasos, copas y otros utensilios domésticos que mejoran la acústica de la sala.

El entorno de este palacio es famoso por el ambiente artístico, pues contiene la Facultad de Bellas Artes.

Anotemos que cerca se halla un bar muy conocido: Azadegan Tea House. Es típico pedir: “doogh” (bebida salada de yogur y agua) con “gushfil” (dulces fritos crocantes). Es una institución en la ciudad. Está en un callejón llamado Chah Haj Mirza, al norte de la entrada a la Imam Square que se comunica con Hafez St. También es muy típico Ice cream Hafez, en la calle Hafez. En este lugar preparan el mejor “fereni”, un postre hecho con leche, harina de arroz, cereales, y almíbar de dátiles.

  • Puerta de entrada al Gran Bazar (puerta Qeisarieh)

f7

La puerta Qeisarieh está flanqueada por palcos y coronada por un balcón en el que se situaban los músicos que animaban los partidos de polo.

  • El Gran Bazar

Originalmente se construyó un bazar en el s. XI al sur de la mezquita “del Viernes” y, en época safávida, en 1619, se inició la construcción de un bazar al norte de la plaza del Imán. Finalmente los dos convergieron en uno.

Desde esta puerta hasta la mezquita del Viernes hay 1,7 km, siempre bajo cubierto. La extensión de este bazar supera los 5 km.

En este bazar todo funciona de forma orgánica, natural y cotidiana.

f6

Las pequeñas plazas ubicadas en el bazar se llaman sarais. De ellas deriva el nombre de “caravanserai”, posadas destinadas al descanso de las caravanas que viajaban a través de la ruta de la seda.

f5

La más famosa es Espadana Sarai, donde hay un café regentado por mujeres.

De una callejuela lateral se puede admirar el minarete de Ali, de 48 metros, construido en el s. XI cerca de la mezquita del Viernes.

Vistas las cuatro joyas de la plaza, comentemos algo de otros lugares que vamos a visitar y que están explicados en la guía.

  • Palacio Hasht Behesht

f1La planta, en la que ocho estancias están dispuestas alrededor de una sala con cúpula central, le valió al edificio el nombre Hasht Bihisht (ocho paraísos), una alusión a las ocho esferas celestes de la cosmología islámica. Esta forma de planta ya era conocida en el siglo XV y fue utilizada en muchos edificios profanos que se construyeron más tarde en todos los países orientales del mundo islámico.

f4Mujer tocando el ney o flauta de caña

Cerca de este palacio (en el parque), se encuentra un lujoso hotel que recomiendan visitar: Hotel Abbasi.

 Este complejo fue construido en la época del rey Sultán Husayn de Safavid hace unos 300 años como un caravansar” para proporcionar posada a los pasajeros. La estructura ha sido renovada desde la década de 1950 por André Godard para prevenir su degradación. Merece la pena recorrer las zonas públicas del hotel. En el patio hay un estanque y un maravilloso jardín. Todo Isfahán viene al hotel a disfrutar de su relajado ambiente en cuanto a normas y prohibiciones.

Es típico tomar un helado de azafrán llamado “bastani”.

  • Palacio Chehel Sotún

El palacio de Chehel Sotún (literalmente "Cuarenta Columnas") es un pabellón situado en uno de los extremos de un largo estanque de uno de los parques de la ciudad. Fue construido por el Sah Abbás II para su esparcimiento y para sus audiencias, dado que aquí se recibía a dignatarios y embajadores, sobre f10todo en la espléndida sala de audiencias. El nombre hace referencia a sus 20 columnas que, reflejadas en el estanque de la entrada, suman 40. Son famosos los frescos con escenas de ceremonias, batallas, victorias y temas campestres.

Jardín persa:

27 de junio de 2011 Chehel Sotún y otros jardines representativos de Irán fueron inscritos en la lista de Patrimonio de la Humanidad bajo la denominación común de “jardín persa”. Hablemos brevemente de esta cuestión:

A estos vergeles floridos levantados en el árido Irán se atribuye el nacimiento de la palabra "paraíso", derivada del viejo vocablo persa "paridaida", que designaba un área cerrada por un muro y se utilizaba f9para describir los jardines. El objetivo de estos jardines era el de procurar la tranquilidad tanto espiritual como recreativa (punto de reunión de los amigos); de hecho eran, esencialmente, un paraíso en la tierra.

El estilo de estos jardines es muy antiguo: los contornos del jardín de Ciro I datan del 500 a.C. y permanecen todavía visibles en la actualidad. Durante el reinado de los Sasánidas (s.VII), y, bajo la influencia del Zoroastrismo, la introducción del agua adquirió gran importancia con la presencia de fuentes y estanques en los jardines. Durante la ocupación de los árabes el aspecto estético del jardín adquirió todavía más importancia sobrepasando, incluso, la utilidad del propio jardín.

La Dinastía Safávida (s. XVII y XVIII) desarrolló la magnitud y los ornamentos con unos jardines que iban más allá de la simple extensión del palacio convirtiéndose en una parte integrante del mismo tanto funcional como estéticamente hablando.

La luz del sol y sus efectos han sido un factor de suma importancia en la estructuración de los jardines persas. Debido a la latitud de Irán, la sombra es extremadamente importante en los jardines; sin ella no se obtendrían espacios utilizables. Los pabellones y las paredes sirven, asimismo, para bloquear al sol. Los jardines persas ofrecen un espacio lleno de verdor y frescura en un país que se caracteriza por su calor y la sequedad. Otra característica, derivada del calor, es la importancia que adquiere la utilización del agua. Una especie de túnel subterráneo, bajo la capa freática, se utiliza para la irrigación del jardín y sus alrededores. Y es que estos espacios verdes persas tratan de traer para su disfrute en la tierra un pedazo del edén donde reinen la calma, la paz, el murmullo del agua, las bellas fragancias, el correr de la brisa y el mecerse de las ramas y flores al viento.

  • Mezquita de Masjed-e Jameh “del Viernes”

f8

Situada en el centro histórico de la ciudad, es otro lugar imprescindible para ver. En 2012 fue incluida en la f6lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, que destacaba: “Situada en el centro histórico de Isfahán, la “Mezquita del Viernes” ilustra de manera sobresaliente la evolución de la arquitectura de mezquitas desde el año 841 d. de C. y a lo largo de doce siglos”. Es el edificio más antiguo de su estilo en Irán y sirvió como prototipo para varias mezquitas posteriores construidas en Asia Central.

El complejo, de una extensión superior a los 20.000 metros cuadrados, es también el primer edificio islámico que adaptó el diseño de un patio con cuatro iwanes, propio de los palacios sasánidas, a la f5arquitectura islámica de carácter religioso. Sus cúpulas abovedadas representan una innovación arquitectónica que inspiró a los constructores de otros edificios en la región. Tiene además detalles decorativos representativos de desarrollos estilísticos que abarcan más de mil años de arte islámico.

Muy cerca está la calle Haroonieh, donde se halla la mezquita Ali con su minarete de 48 metros. Una de las tantas salidas del bazar se encuentra cerca de este minarete, uno de los más altos de todo Irán, con inscripciones en ladrillo y también en cerámica.

  • Barrio de Jolfa:

Alrededor de 1606 unos 150.000 armenios vinieron de Jolfa (actual Azerbaiyan) a Isfayán. No está claro si llegaron hasta aquí huyendo del imperio otomano, o fueron “invitados” por Abbás I, tras arrasar la ciudad, para beneficiarse de su fama como tratantes de seda. Este barrio es la otra cara de la ciudad donde predomina el cristianismo.

Es conocida la plaza de Jolfa, corazón del barrio armenio. Hay que probar aquí un postre con yogurt, azúcar, cáscara de naranja, azafrán y ¡carne de pollo o cordero! Esta crema amarilla, muy dulce y espesa, se llama joresht mast (guiso de yogurt).

f4Catedral de Vank (de San Salvador)

Es una catedral armenia en la ciudad de Isfahán. Vank significa “monasterio” o “convento” en el idioma armenio.

Esta catedral fue una de las primeras iglesias que se establecieron en el distrito de Jolfa de la ciudad en 1606 por parte de los cientos de miles de deportados armenios que fueron reasentados por Shah Abbas I durante la Guerra Otomana de 1603 a 1618.

Su interior es impresionante: coloridos murales que representan escenas de la vida de Jesús, de mártires torturados, un memorial a las víctimas del genocidio armenio. En el altar se guardan las reliquias de S. José de Arimatea. Hay un interesante museo. Choca bastante contemplar frescos cristianos empanados en oro contrastando con los azulejos y mosaicos de las mezquitas.

f3

Ya que nuestra estancia en Irán va a coincidir con la fiesta del año nuevo voy a decir algo sobre ella. También comentaré algo sobre el arte de las alfombras y, para terminar sobre la gastronomía en Isfahán.

1.-NOURUZ EN IRÁN “año nuevo”

En diciembre de 2016, el “Noruz” se inscribió en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco. La llegada del año nuevo persa representa el final de la oscuridad invernal y el renacimiento de la luz y la fertilidad. Para simbolizar el inicio del nuevo ciclo vital, los iraníes limpian a conciencia sus casas en los días anteriores al Nouruz. Pocas horas antes de que entre el año nuevo, las familias se reúnen en torno a una mesa con siete objetos o frutos cuyo nombre empieza en persa por s”, los cuales representan el renacimiento, la salud, la alegría, la prosperidad, la felicidad, la paciencia y la belleza.

En las calles se prenden hogueras, se canta y se acompaña a Hayi Firuz, un personaje de cara negra que danza al son de tambores y panderetas, portadores de buenos augurios. En los 13 días siguientes, en los que las escuelas permanecen cerradas, los menores de cada familia estrenan vestidos y se dedican a visitar a tíos y abuelos, quienes les hacen regalos o les entregan algo de dinero. Además, es también costumbre que los adultos se acerquen a saludar a casa de sus familiares, vecinos y amigos.

2.-EL ARTE DE LAS ALFOMBRAS PERSAS

La alfombra persa es un elemento esencial del arte y de la cultura persa, cuya confección se ha convertido en un arte.

“Una pieza, un universo”. Son obras de arte por derecho propio, al igual que los azulejos o los frescos. Las alfombras son un elemento esencial de la cultura persa cuya confección se ha convertido en un arte del que los iraníes se muestran extremamente orgullosos. La alfombra es efectivamente una cuestión capital en esta República Islámica: existen aproximadamente 1,2 millones de artesanos que tejen cada año unos 5 millones de metros cuadrados de alfombras que se exportan a más de 100 países.

Pero no todo va a parar al mercado internacional, una parte importante de esa producción sirve para abastecer la demanda local. Sí, no hay un solo hogar iraní que se precie de serlo donde no se encuentren al menos una docena de alfombras. Para el salón, cuyo suelo está literalmente cubierto, se reservan las mejores piezas y sobre ellas es frecuente que los diferentes miembros de la familia se acomoden para las comidas.

3.-GASTRONOMIA

Comer en una ciudad como Isfahán es un lujo para el paladar. En el restaurante más tradicional, el Shahzad , en la calle Abbas abad, además del exquisito fesendjan, hecho con zumo de granadas y aceite de nuez, se puede comer berian (carne picada cocida colocada entre pan), kebab de cordero, ternera o pollo, cotelette (filete ruso pero de carne picada y patatas cocidas), kufté (bola de carne con arroz, verduras, eneldo, menta y otras hierbas aromáticas, en cuyo interior se esconde una ciruela) y, de postre, leche merengada o faludé, un dulce parecido al agua con azucarillos.

Otro plato típico es el joresé, yogur con azafrán y pollo deshecho y molido. La bebida tradicional es el doogh, yogur con agua y un elemento gaseoso. Otro dulce típico de Isfahán es el gaz, un turrón blando.

El lugar más famoso es la confitería Meraj Gaz, que abrieron en 1956 y ahora tiene varios locales. El central está cruzando el puente Si-o-Seh, caminando unos cien metros por la avenida Chahar Bagh e Bala.

Vocabulario básico

El iwan es un espacio cerrado con una cúpula o libre, rodeado con paredes por tres lados y con un lado libre característica de edificios persas y de Asia central. El iwan es un pabellón cerrado por tres lados, que es su parte anterior está abierta.

Shah es el título que reciben desde la antigüedad los monarcas de Irán. El título ha pasado a otras lenguas.

Un caravasar es un antiguo tipo de edificación surgido a lo largo de los principales caminos donde las caravanas que hacían largos viajes de muchas jornadas, podían pernoctar, descansar y reponerse los viajeros y animales. Eran verdaderos antecedentes de los modernos hoteles y hostales de carretera. En Oriente medio a menudo se les llama por su nombre persa khan.

El ekyeh es un lugar donde los chiitas se reúnen para el duelo de Muharram. Tales lugares se encuentran particularmente en Irán. Se suelen diseñar tradicionalmente con elementos observables de la arquitectura persa.

El sufismo es una de las denominaciones que se han dado al aspecto místico del islam sunita.

En el islam, alquibla o quibla define la dirección de la Kaaba (en La Meca) y a la que el imán y los orantes deben dirigirse cada vez que realizan sus rezos. En las mezquitas existe un lugar que indica la orientación de la alquibla y que se denomina mihrab.

Un mocárabe o muqarmas es un elemento arquitectónico decorativo a base de yeso formando prismas yuxtapuestos y colgantes que parecen estalactitas sueltas o arracimadas. Suelen disponerse revistiendo las cúpulas o el intradós de los arcos.

Un hadiz o jadiz literalmente significa un dicho o una conversación, que para el Islam representa los dichos y las acciones del profeta Mahoma (y de los imanes en el caso de los chiíes) relatadas por sus compañeros y compiladas por aquellos sabios que les sucedieron. Los hadices son el pilar fundamental de la Sunna, la segunda fuente de la ley musulmana después del Corán y que significa, literalmente, "conducta, manera de comportarse" o "costumbre".

Un captador de viento también conocida como torre de vientos, catavientos, chimenea de vientos, torre eólica. Es un dispositivo arquitectónico de tradición iraní utilizado durante muchos siglos para proveer de ventilación natural y refrescamiento al interior de los edificios. No fue la primera cultura en desarrollarlos pero sí la que las sigue utilizando hasta el presente. Los captadores de vientos poseen varios diseños, entre los que se pueden encontrar los uni-direccionales, los bi-direccionales y los pluri-direccionales.

f2
Un ab anbar con doble cúpula y captadores de viento en Yazd, Irán

La región central de Irán es desértica, con lo cual por la carencia de humedad en el aire se generan grandes diferencias de temperatura entre el día y la noche. Así el aire va de fresco a extremadamente cálido en verano y con muy baja humedad relativa todo el día. La mayoría de los edificios se construyen de paredes muy gruesas de adobe o de ladrillo, que proporciona aislamiento térmico y masa térmica.

Con esta estrategia de diseño pasivo se consigue amortiguar la gran variación entre el día y la noche hasta hacerla imperceptible buscando una temperatura media cercana al confort higrotérmico. Por otra parte el gran espesor de paredes permite acumular el calor diurno para desplazar la onda de calor hacia la noche cuando la temperatura exterior desciende por debajo de la comodidad.

Las ciudades se localizan cercanas o en torno a oasis del desierto a fin de asegurar la provisión de agua. Son además de trama muy cerrada: calles estrechas, de paredes altas y blanqueadas con cal para reducir al mínimo la absorción del calor solar. Los edificios y casas tienen patios profundos y terrazas donde los habitantes duermen en las noches calurosas de verano. Durante el día las personas se agrupan en el umbrío interior.

El calor de la luz del sol se reduce al mínimo con el uso de ventanas pequeñas protegidas con celosías de madera tupidas que sirven de protección solar.

f1
Ilustración del uso de captadores de viento y qanat para refrescamiento

Los captadores de viento poseen las siguientes funciones:

Primero, un captador de viento se encapsula y tiene varias aberturas orientadas en la parte superior (tradicionalmente cuatro). Se cierran todas las bocas superiores menos la que se encuentra en dirección al viento forzándolo a descender para que luego suba por efecto chimenea. Esto genera la ventilación que refresca significativamente las partes inferiores de los edificios, pero si no se incorpora otra estrategia sería lo mismo que una ventana u orificio común por donde entra aire muy caliente y muy seco.

Por lo tanto, la clave para generar temperaturas bajas consiste en minimizar las pérdidas por ranuras y orificios y conducir el mayor caudal de aire posible sobre el qanat.

Qanat

Un qanat es un dispositivo que contiene agua y se forma mediante un entramado dentro del conducto sobre el cual se colocan paños húmedos o cántaros con agua en la trayectoria del aire captado. El agua tiene dos funciones. Por una parte humedece el seco aire del exterior y por otra absorbe parte del calor sensible del aire reduciendo su temperatura, produciendo el mismo efecto que un botijo, para refrescar el agua. Esto puede verificarse fácilmente mediante un diagrama psicrométrico. Como el qanat también se encuentra totalmente protegido del sol posee toda su masa una menor temperatura debido al aire fresco que circuló durante la noche. Dado que el aire fresco es más denso que el aire cálido queda dentro del sistema.

Un captador de viento, sin embargo, puede crear un gradiente de presión que aspire una cantidad pequeña de aire hacia arriba a través de una casa. Este aire fresco, seco de la noche, barre el agua evaporándola y refrescándola.

Finalmente, en un ambiente carente de viento o una casa sin agua, un captador de viento funciona como un aireador pasivo natural para extraer el aire caliente del interior del edificio. Crea un gradiente de presión que permite que menos aire fresco denso viaje hacia arriba y escape hacia fuera del tope de la columna de aire.

Cuando se combinan los efectos de gran masa térmica adobe con una alta resistencia térmica el captador de vientos puede refrescar los espacios inferiores de mezquitas y casas en el momento más cálido de los mediodías del desierto iraní. 

Isfahán, una ciudad maravillosa