viernes. 26.04.2024
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 8.3.2010

Guillermo Fariñas ha respondido que sería mejor liberar a 26 presos políticos enfermos en la isla, que no abandonará su protesta mientras sigan encarcelados y que no se plantea ir a España, opción que sólo aceptaría si le niegan la atención en los hospitales cubanos cuando sufra un colapso. Fuentes diplomáticas han confirmado a la agencia de noticias Efe que el Gobierno español se ha mostrado dispuesto a acoger al disidente "por razones humanitarias".

La solicitud del gobierno cubano le ha sido comunicada a Fariñas por el consejero político de la embajada de España en La Habana, Carlos Pérez-Desoy, que lo ha visitado este lunes en su casa de la ciudad central de Santa Clara, según ha confirmado el opositor. "Hicimos una contrapropuesta: que saquen a los 26 que se están muriendo. Ese día yo dejaré la huelga y volveré a ser periodista independiente. Ahora no pensamos abandonar el país. Seguiré hasta las últimas consecuencias", ha insistido Fariñas y ha añadido: "Para mí es un honor que el gobierno me asesine delante de toda la opinión publica internacional y nacional y el error es que lo están manteniendo de manera pública".

Precisamente este lunes el diario oficial Granma publicaba un artículo en el que el régimen cubano dejaba claro que no iba a aceptar "presiones ni chantajes" de Fariñas, cuyo estado de salud está muy deteriorado, y responsabilizaba de su posible muerte tanto al propio disidente como a "los diplomáticos extranjeros y medios de prensa que lo manipulan".

Fariñas comenzó su huelga de hambre número 23 cuando le impidieron junto a otros disidentes acudir al entierro de Orlando Zapata, el preso político que murió tras otra huelga de hambre.

Cuba ha pedido a España que acoja a Fariñas