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18 de marzo de 2009, 9:35
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 18.03.2009
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió este lunes a los líderes políticos de Madagascar que lleven a cabo una transición "suave mediante métodos democráticos" después de que el presidente del país, Marc Ravalomanana, dimitiera acosado tras dos meses de agitación civil en su contra.
La portavoz de Naciones Unidas, Marie Okabe, dijo que el secretario general "insta a todas las partes a actuar con responsabilidad para garantizar la estabilidad del país" y el proceso pacífico de transición. "Los preparativos para realizar esta transición deben ser producto del consenso y deben gozar de amplios apoyos" si se quiere mantener la paz en el país.
"El secretario general de la ONU insta a todas las partes implicadas, particularmente a la policía y al Ejército, a garantizar la seguridad de la población y colaborar para lograr que se solucione la crisis sin violencia", apuntó la portavoz.
La ONU, añadió Okabe, participa en las gestiones para lograr una solución pacífica y de consenso a la crisis política malgache. Ravalomanana dimitió tras recibir durante dos meses la presión en la calle del líder de la oposición, Andry Rajoelina, que le ha acusado de malversación de fondos públicos y de violar la Constitución.
Poco después de la renuncia del mandatario, Rajoelina se autoproclamó jefe de una "alta autoridad de transición", compuesta por un gabinete que debe ser su gobierno "de facto".
Por su parte, Ravalomanana se encuentra refugiado en el palacio presidencial de Iavoloha, a unos 15 kilómetros de la capital, Antananarivo, protegido por la guardia presidencial de un posible asalto por parte de las fuerzas militares aliadas a la oposición.
El Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana (UA) condenó el lunes los intentos anticonstitucionales y golpistas de la oposición de Madagascar para hacerse con el poder e instó a las fuerzas políticas a participar en un diálogo para resolver la crisis.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió este lunes a los líderes políticos de Madagascar que lleven a cabo una transición "suave mediante métodos democráticos" después de que el presidente del país, Marc Ravalomanana, dimitiera acosado tras dos meses de agitación civil en su contra.
La portavoz de Naciones Unidas, Marie Okabe, dijo que el secretario general "insta a todas las partes a actuar con responsabilidad para garantizar la estabilidad del país" y el proceso pacífico de transición. "Los preparativos para realizar esta transición deben ser producto del consenso y deben gozar de amplios apoyos" si se quiere mantener la paz en el país.
"El secretario general de la ONU insta a todas las partes implicadas, particularmente a la policía y al Ejército, a garantizar la seguridad de la población y colaborar para lograr que se solucione la crisis sin violencia", apuntó la portavoz.
La ONU, añadió Okabe, participa en las gestiones para lograr una solución pacífica y de consenso a la crisis política malgache. Ravalomanana dimitió tras recibir durante dos meses la presión en la calle del líder de la oposición, Andry Rajoelina, que le ha acusado de malversación de fondos públicos y de violar la Constitución.
Poco después de la renuncia del mandatario, Rajoelina se autoproclamó jefe de una "alta autoridad de transición", compuesta por un gabinete que debe ser su gobierno "de facto".
Por su parte, Ravalomanana se encuentra refugiado en el palacio presidencial de Iavoloha, a unos 15 kilómetros de la capital, Antananarivo, protegido por la guardia presidencial de un posible asalto por parte de las fuerzas militares aliadas a la oposición.
El Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana (UA) condenó el lunes los intentos anticonstitucionales y golpistas de la oposición de Madagascar para hacerse con el poder e instó a las fuerzas políticas a participar en un diálogo para resolver la crisis.
