"Estamos hablando de un caso muy grave de caza furtiva transfronteriza en la que participan cazadores procedentes de Sudán y Chad, bien dotados de armas modernas y que está diezmando estas especies salvajes para conseguir dinero rápido del mercado internacional de marfil"
Los cazadores furtivos han matado en las últimas seis semanas a más de 200 elefantes en Camerún para satisfacer la demanda del mercado asiático de marfil, según informaron este viernes fuentes gubernamentales.
"En enero contamos 146 esqueletos de elefantes y desde principios de este mes ya hemos registrado cerca de 60", explicó en declaraciones a una radio local. "Ésta es solo la punta del iceberg, ya que puede haber otros elefantes muertos en zonas del parque a las que no tenemos acceso", agregó Haman.
Según el gobernador, algunos de los cazadores se trasladan a caballo y operan con la complicidad de las poblaciones locales, que reciben con ello carne de elefante gratis y se libran de un animal que daña sus cultivos.
Asimismo, aseguró Haman, un grupo de medio centenar de cazadores llegó a matar recientemente a seis soldados chadianos en el momento en que intentaban detenerlos con una carga ilegal de marfil. El Gobierno de Camerún ha enviado una fuerza de respuesta rápida a la zona, pero no hay suficientes efectivos para cubrir todo el parque, explicó.
LA DEMANDA ASIÁTICA
El Fondo Internacional de Bienestar Animal (IFAW por sus siglas en inglés) ha advertido de que estas infiltraciones de cazadores furtivos son habituales en la estación seca, pero ha precisado en un comunicado que la dimensión de esta matanza "no tiene comparación con las de los años anteriores". Según IFAW, se desconoce cuántos elefantes sigue habiendo en Camerún, pero las estimaciones de 2007 eran de entre mil y cinco mil.
Por su parte, la organización conservacionista TRAFFIC ha advertido de que la caza furtiva de elefantes se ha disparado a causa del incremento de la demanda de marfil procedente de Asia para su uso ornamental y en joyería y ha relacionado este proceso con el incremento de las inversiones de China en África.