sábado. 20.04.2024

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha opinado que, si finalmente se reducen los días de recogida de basura, la capital pasará de ser "una smart city a una dirty city".

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha asegurado este martes que el Ayuntamiento madrileño se plantea como medida de ahorro disminuir el servicio de recogida de basuras de forma que no sea diario, lo que le ha llevado a anunciar una probable disminución de la tasa. "Vamos a disminuir probablemente el coste de la tasa", ha señalado.

Lissavetzky ha recordado que la recogida diaria cumple prácticamente 20 años y si se redujera supondría un "enorme retroceso" teniendo en cuenta las 4.000 toneladas de residuos que se generan al día en la ciudad.

En este punto, el socialista ha añadido que el Ayuntamiento puso en vigor la Tasa de Basuras hace tres años argumentando que con ella "se iba a mejorar la calidad del servicio". Después de apuntar que en este ejercicio las arcas municipales recibirán 145 millones por este concepto, se ha preguntado los motivos por los que se podría reducir la recogida diaria "si hay más ingresos para limpiar".

"Espero que la alcaldesa recapacite y no nos haga hacer más el ridículo a los madrileños", ha concluido el portavoz socialista municipal.

Madrid pasará de ser "una smart city a una dirty city"