nuevatribuna.es
22 de junio de 2009, 17:09
NUEVATRIBUNA.ES / I.G.C.
Los dos principales sindicatos rechazan la recién aprobada Ley de Cajas, que podría tener elementos de inconstitucionalidad, advierten, y también el acuerdo parcial entre PP, IU y la rama de banca de Comisiones Obreras, Confia, que virtud al acuerdo alcanzado ya tiene representación en la comisión ejecutiva, el órgano de gobierno de Caja Madrid.
CCOO y UGT anunciaron este lunes que abrirán una ronda de conversaciones con todos los partidos políticos de la región y con la patronal CEIM para abordar la, a su juicio, “situación de inestabilidad creada en la entidad tras la aprobación de la nueva normativa. Ambos sindicatos consideran que la nueva ley “no resuelve la crisis que padece Caja Madrid como consecuencia de las iniciativas de control e intervención política impulsadas por el Gobierno regional”.
Los sindicatos quieren “reeditar” un acuerdo donde no estén excluidos, como tampoco el PSOE (ni CCOO, ni UGT ni los socialistas tienen asiento en la comisión formada por 11 miembros del total que componen el Consejo de Administración). Fuentes sindicales afirman que el acuerdo es ahora más necesario que nunca dada la crisis financiera y en cuanto al papel que ha de jugar la caja en la reordenación del mapa de cajas de ahorro españolas.
En ese sentido creen que Caja Madrid “debe gozar de una independencia y estabilidad garantizadas que le permitan jugar un papel de primer orden en la solución de los problemas del sistema financiero español” y por ello resulta imprescindible un “compromiso” de todas las partes por la “profesionalización, la estabilización de sus órganos y el blindaje de su independencia del poder político. Asimismo �denuncian-, la nueva ley, “lejos de dar satisfacción a estos aspectos, incorpora serios riesgos e incertidumbres para el futuro de la Caja”.
Las fuentes sindicales consultadas consideran “impresentable” el acuerdo entre PP-IU-Confia, formaciones todas que atraviesan “problemas internos”, dicen.
El próximo 20 de julio está convocada la Asamblea General para aprobar los nuevos estatutos adaptados a la ley que deberán pasar primero por el Consejo de Administración. Podría darse el caso de que salieran rechazados por ambos órganos (la Comunidad tampoco tiene mayoría en la Asamblea), aunque el Gobierno regional tiene la potestad para imponer la nueva normativa.
Los dos principales sindicatos rechazan la recién aprobada Ley de Cajas, que podría tener elementos de inconstitucionalidad, advierten, y también el acuerdo parcial entre PP, IU y la rama de banca de Comisiones Obreras, Confia, que virtud al acuerdo alcanzado ya tiene representación en la comisión ejecutiva, el órgano de gobierno de Caja Madrid.
CCOO y UGT anunciaron este lunes que abrirán una ronda de conversaciones con todos los partidos políticos de la región y con la patronal CEIM para abordar la, a su juicio, “situación de inestabilidad creada en la entidad tras la aprobación de la nueva normativa. Ambos sindicatos consideran que la nueva ley “no resuelve la crisis que padece Caja Madrid como consecuencia de las iniciativas de control e intervención política impulsadas por el Gobierno regional”.
Los sindicatos quieren “reeditar” un acuerdo donde no estén excluidos, como tampoco el PSOE (ni CCOO, ni UGT ni los socialistas tienen asiento en la comisión formada por 11 miembros del total que componen el Consejo de Administración). Fuentes sindicales afirman que el acuerdo es ahora más necesario que nunca dada la crisis financiera y en cuanto al papel que ha de jugar la caja en la reordenación del mapa de cajas de ahorro españolas.
En ese sentido creen que Caja Madrid “debe gozar de una independencia y estabilidad garantizadas que le permitan jugar un papel de primer orden en la solución de los problemas del sistema financiero español” y por ello resulta imprescindible un “compromiso” de todas las partes por la “profesionalización, la estabilización de sus órganos y el blindaje de su independencia del poder político. Asimismo �denuncian-, la nueva ley, “lejos de dar satisfacción a estos aspectos, incorpora serios riesgos e incertidumbres para el futuro de la Caja”.
Las fuentes sindicales consultadas consideran “impresentable” el acuerdo entre PP-IU-Confia, formaciones todas que atraviesan “problemas internos”, dicen.
El próximo 20 de julio está convocada la Asamblea General para aprobar los nuevos estatutos adaptados a la ley que deberán pasar primero por el Consejo de Administración. Podría darse el caso de que salieran rechazados por ambos órganos (la Comunidad tampoco tiene mayoría en la Asamblea), aunque el Gobierno regional tiene la potestad para imponer la nueva normativa.
