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NUEVATRIBUNA.ES / I.G.C. - 23.09.2009

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Con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en Nueva York, y la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, de baja médica, la titular de Economía, Elena Salgado, tuvo que responder a la batería de preguntas formuladas por el PP sobre la crisis económica y la subida de impuestos.

Los populares siguen denunciando la “improvisación” del Gobierno en materia económica y le reprochan la anunciada subida impositiva. “Se han gastado el dinero y ahora toca subir los impuestos. ¿Hasta cuándo cree que el país puede aguantar esta situación?”, se preguntó la portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, que también le acusó de “firmar cheques en blanco” que dejarán “un futuro negro”.

“A lo que ustedes llaman improvisar este Gobierno lo que hace dialogar y consensuar”, respondió Salgado que también precisó -al reproche hecho por la portavoz popular respecto a que Francia y Alemania están creciendo- que a estos dos países aún “les queda por delante un ajuste más fuerte del empleo”, cuando en el caso español el ajuste ya se ha producido.

Salgado reprochó al PP que tenga como único objetivo “debilitar al Gobierno” y eso a pesar de que “los ciudadanos esperan que estemos unidos ante la crisis”. La ministra aseguró que los Presupuestos Generales del próximo año serán austeros y destacó que el “esfuerzo” que se va a pedir a los ciudadanos por la subida impositiva “revertirá” en ellos.

Para Sáenz de Santamaría al Gobierno “se le ha ido la situación de las manos” y sus medidas “son cada vez más inútiles”, argumentos que volvieron a repetir el resto de diputados populares que interpelaron a la vicepresidenta tercera.

Salgado destacó que “la justicia redistributiva está más en el lado del gasto que de los ingresos” y volvió a emplazar al PP a aclarar “de dónde recortarían gasto” en las cuentas públicas.

Salgado aguanta el aluvión de críticas