nuevatribuna.es
1 de julio de 2010, 12:03
NUEVATRIBUNA.ES - 1.7.2010
El Metro de Madrid ha vuelto a funcionar, aunque no al 100%, pero todo indica que lo peor está por venir. La empresa, dependiente de la Comunidad de Madrid, ha emprendido acciones contra los trabajadores que abarcan varios frentes: la apertura de cerca de 400 expedientes a las personas que no han cumplido los servicios mínimos, el envío a la policía de las imágenes de la agresión que sufrieron ayer cuatro trabajadores en las cocheras de Metro de Canillejas y la remisión al fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, de las declaraciones del portavoz del Comité de Huelga en las que dijo que Madrid "iba a reventar", así como algún cartel que se expuso en la asamblea de trabajadores del suburbano y que iba contra la presidenta, Esperanza Aguirre, por si pudieran constituir un delito de amenazas.
La empresa ha accedido a sentarse a negociar con los sindicatos, una vez reanudado el servicio al 50%, tal y como prometió ayer el consejero de Transportes, José Ignacio Echeverría. El Comité de Huelga había solicitado la reunión que se ha celebrado en la tarde del jueves sin llegar a ningún resultado. El hasta ahora portavoz del Comité, Vicente Rodríguez, que es también el secretario general del Sindicato de Conductores, aseguró ante las medidas de tipo disciplinario que "si se llegan a producir esos expedientes, y parece que así es, esto va a enquistar el problema". "Tenemos derecho a defendernos", añadió. El nuevo portavoz del Comité de Empresa es Antonio Asensio, de CC.OO., que releva a Rodríguez dentro de las rotaciones que habían determinado en el caso de que el conflicto se alargara en el tiempo.
En esta primera toma de contacto, los sindicatos han reiterado su malestar por los servicios mínimos del 50 por ciento, considerando que "encima de que la Comunidad es la culpable de la situación, establece unos mínimos que no tienen sentido". Precisamente el miércoles, este fue uno de los puntos de los que se habló en la asamblea, donde los trabajadores ofrecían, por ejemplo, mínimos del 30 por ciento. El objetivo sigue siendo el mismo: el respeto del convenio alcanzado por la negociación colectiva. "No vamos a ceder porque creemos que estamos en nuestro derecho", afirman fuentes sindicales que, si bien reconocen que la convocatoria de huelga "oficial" es de Solidaridad Obrera, proclaman que son todos "una piña" y que estos paros van a ser respaldados por el resto de sindicatos (Conductores, CC.OO., UGT y Sindicato Libre).
Por cierto que el Comité de Huelga ha negado que detrás de la 'tregua' que se acordó este miércoles en la asamblea de los trabajadores esté el deseo de no perjudicar la fiesta del Orgullo Gay, tal y como asegura hoy el periódico La Razón. El motivo real es, según el Comité de Huelga, "dar un respiro" a la ciudadanía y ofrecer "un gesto" a la Comunidad de Madrid acerca de su voluntad de negociación.
De momento, no parece que el Ejecutivo regional esté dispuesto a hacer otro gesto como retirar los expedientes abiertos a los trabajadores. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha manifestado su gratitud a "la inmensa mayoría" de los miembros del Gobierno de la nación, particularmente a los ministros de Fomento, José Blanco, e Industria, Miguel Sebastián, quienes han dicho que "la huelga es un derecho evidente y constitucional pero que los servicios mínimos forman parte de la ley y hay que cumplirlos". Estos ministros se han mostrado a favor de que se apliquen las sanciones disciplinarias que corresponda a los infractores.
Aguirre ha hablado en esRadio, donde ha arremetido contra la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, a quien ha pedido que medite las declaraciones que pronunció ayer en las que la responsabilizaba de la huelga de Metro, y le ha recordado que la Policía Nacional, dependiente del Ejecutivo central, es la que debe garantizar los servicios mínimos. La presidenta madrileña le ha reprochado que fue ella la que negoció la subida de sueldo de los funcionarios que luego, "en vez de subirlos o congelarlos, los tuvo que bajar un 5 por ciento" y ha subrayado que la Comunidad de Madrid ha aplicado el Real Decreto del Gobierno central en el que se estipula la rebaja de sueldos, al igual que han hecho otras comunidades autónomas.
Además, ha reconocido que sí es verdad que el Gobierno regional, a la hora de trasponer el texto, podría haber excluido a las empresas públicas, como ha hecho el Gobierno con Renfe o Aena. "Ya dije que me parecía injusto", ha señalado, al tiempo que ha indicado que seguramente se hizo pensando en la capacidad de movilización e incidencia de los paros en trenes y aviones de cara a las vacaciones y la llegada de turistas. En este sentido, ha precisado que le parece "injusto" que se baje el sueldo a maestros, médicos, policías o guardias civiles y no a los que tienen "un salario garantizado, que no pueden ser despedidos como Metro, Telemadrid o el Canal de Isabel II", y que tienen capacidad de movilización. "Esta decisión también se ha tomado en Cataluña y allí no ha habido huelga. ¿Por qué se hace sólo en Madrid?", se ha preguntado.
Finalmente, le ha recordado al secretario general de UGT, Cándido Méndez, que los mínimos del 50 por ciento no se han negociado porque ha habido huelgas anteriores en los que se han recurrido y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha sentenciado que son "adecuados y no abusivos".
El Metro de Madrid ha vuelto a funcionar, aunque no al 100%, pero todo indica que lo peor está por venir. La empresa, dependiente de la Comunidad de Madrid, ha emprendido acciones contra los trabajadores que abarcan varios frentes: la apertura de cerca de 400 expedientes a las personas que no han cumplido los servicios mínimos, el envío a la policía de las imágenes de la agresión que sufrieron ayer cuatro trabajadores en las cocheras de Metro de Canillejas y la remisión al fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, de las declaraciones del portavoz del Comité de Huelga en las que dijo que Madrid "iba a reventar", así como algún cartel que se expuso en la asamblea de trabajadores del suburbano y que iba contra la presidenta, Esperanza Aguirre, por si pudieran constituir un delito de amenazas.
La empresa ha accedido a sentarse a negociar con los sindicatos, una vez reanudado el servicio al 50%, tal y como prometió ayer el consejero de Transportes, José Ignacio Echeverría. El Comité de Huelga había solicitado la reunión que se ha celebrado en la tarde del jueves sin llegar a ningún resultado. El hasta ahora portavoz del Comité, Vicente Rodríguez, que es también el secretario general del Sindicato de Conductores, aseguró ante las medidas de tipo disciplinario que "si se llegan a producir esos expedientes, y parece que así es, esto va a enquistar el problema". "Tenemos derecho a defendernos", añadió. El nuevo portavoz del Comité de Empresa es Antonio Asensio, de CC.OO., que releva a Rodríguez dentro de las rotaciones que habían determinado en el caso de que el conflicto se alargara en el tiempo.
En esta primera toma de contacto, los sindicatos han reiterado su malestar por los servicios mínimos del 50 por ciento, considerando que "encima de que la Comunidad es la culpable de la situación, establece unos mínimos que no tienen sentido". Precisamente el miércoles, este fue uno de los puntos de los que se habló en la asamblea, donde los trabajadores ofrecían, por ejemplo, mínimos del 30 por ciento. El objetivo sigue siendo el mismo: el respeto del convenio alcanzado por la negociación colectiva. "No vamos a ceder porque creemos que estamos en nuestro derecho", afirman fuentes sindicales que, si bien reconocen que la convocatoria de huelga "oficial" es de Solidaridad Obrera, proclaman que son todos "una piña" y que estos paros van a ser respaldados por el resto de sindicatos (Conductores, CC.OO., UGT y Sindicato Libre).
Por cierto que el Comité de Huelga ha negado que detrás de la 'tregua' que se acordó este miércoles en la asamblea de los trabajadores esté el deseo de no perjudicar la fiesta del Orgullo Gay, tal y como asegura hoy el periódico La Razón. El motivo real es, según el Comité de Huelga, "dar un respiro" a la ciudadanía y ofrecer "un gesto" a la Comunidad de Madrid acerca de su voluntad de negociación.
De momento, no parece que el Ejecutivo regional esté dispuesto a hacer otro gesto como retirar los expedientes abiertos a los trabajadores. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha manifestado su gratitud a "la inmensa mayoría" de los miembros del Gobierno de la nación, particularmente a los ministros de Fomento, José Blanco, e Industria, Miguel Sebastián, quienes han dicho que "la huelga es un derecho evidente y constitucional pero que los servicios mínimos forman parte de la ley y hay que cumplirlos". Estos ministros se han mostrado a favor de que se apliquen las sanciones disciplinarias que corresponda a los infractores.
Aguirre ha hablado en esRadio, donde ha arremetido contra la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, a quien ha pedido que medite las declaraciones que pronunció ayer en las que la responsabilizaba de la huelga de Metro, y le ha recordado que la Policía Nacional, dependiente del Ejecutivo central, es la que debe garantizar los servicios mínimos. La presidenta madrileña le ha reprochado que fue ella la que negoció la subida de sueldo de los funcionarios que luego, "en vez de subirlos o congelarlos, los tuvo que bajar un 5 por ciento" y ha subrayado que la Comunidad de Madrid ha aplicado el Real Decreto del Gobierno central en el que se estipula la rebaja de sueldos, al igual que han hecho otras comunidades autónomas.
Además, ha reconocido que sí es verdad que el Gobierno regional, a la hora de trasponer el texto, podría haber excluido a las empresas públicas, como ha hecho el Gobierno con Renfe o Aena. "Ya dije que me parecía injusto", ha señalado, al tiempo que ha indicado que seguramente se hizo pensando en la capacidad de movilización e incidencia de los paros en trenes y aviones de cara a las vacaciones y la llegada de turistas. En este sentido, ha precisado que le parece "injusto" que se baje el sueldo a maestros, médicos, policías o guardias civiles y no a los que tienen "un salario garantizado, que no pueden ser despedidos como Metro, Telemadrid o el Canal de Isabel II", y que tienen capacidad de movilización. "Esta decisión también se ha tomado en Cataluña y allí no ha habido huelga. ¿Por qué se hace sólo en Madrid?", se ha preguntado.
Finalmente, le ha recordado al secretario general de UGT, Cándido Méndez, que los mínimos del 50 por ciento no se han negociado porque ha habido huelgas anteriores en los que se han recurrido y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha sentenciado que son "adecuados y no abusivos".
