nuevatribuna.es
2 de abril de 2009, 11:08
NUEVATRIBUNA.ES - 02.04.2009
Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha pedido hoy en el Congreso reformas normativas que mejoren “notablemente” las condiciones para abordar problemas como el ocasionado en la Caja Castilla-La Mancha que ha tenido que ser intervenida.
El gobernador del Banco de España pide que se haga una “modificación institucional” sobre el modelo de fondos de garantías de depósitos “sin que se necesite convocar un consejo de ministros cada vez que se procede a una intervención”.
También ha abogado por una mayor transparencia para que se rindan las oportunas cuentas tanto al Gobierno como al Parlamento. Asimismo, cree necesario que se facilite a la cajas de “algunos instrumentos” para ampliar sus recursos propios “con la misma facilidad que lo hacen los bancos”.
NIEGA QUE HAYA UN "AGUJERO" EN CCM
Fernández Ordóñez ha comparecido en la Comisión de economía y Hacienda de la Cámara baja para explicar la intervención de la caja de ahorros castellano manchega que ha supuesto una inversión de 9.000 millones de euros de las arcas públicas. Según ha dicho, la intervención se produjo después de haber fracasado las negociaciones iniciadas para un proceso de fusión. “Las conversaciones no llegaron a buen puerto y el Banco de España actuó”.
La premura de la intervención vino después de comprobar que los administradores “no fueron capaces de encontrar una solución”, lo que podría haber supuesto un “colapso de liquidez”, lo que “requería la activación inmediata de la medida cautelar prevista”.
Para acelerar el proceso, “el Banco imprimió la máxima velocidad a sus decisiones”, en su “voluntad” de evitar que los problemas “degenerasen y contagiasen al resto del sistema financiero. La premura también “justifica la urgencia de la adopción del real decreto ley del Gobierno”.
El gobernador del Banco de España sí ha querido dejar claro que el objetivo del Estado es evitar que una entidad llegue a la suspensión de pagos. En el caso de CCM, asegura que “podrá hacer frente a todos sus compromisos”. La entidad �ha seguido- “no presenta ningún agujero patrimonial”, aunque ello “no significa que no afronte serios problemas por la inadecuada gestión de riesgos y la potente expansión del negocio inmobiliario, que ha generado importantes desequilibrios”, unas operaciones de gestión crediticia que “son muy peligrosas”.
Fernández Ordóñez ha insistido en que “la responsabilidad recae en los anteriores administradores”. También ha querido resaltar que “la retirada de depósitos ha sido claramente inferior a la esperada”.
Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha pedido hoy en el Congreso reformas normativas que mejoren “notablemente” las condiciones para abordar problemas como el ocasionado en la Caja Castilla-La Mancha que ha tenido que ser intervenida.
El gobernador del Banco de España pide que se haga una “modificación institucional” sobre el modelo de fondos de garantías de depósitos “sin que se necesite convocar un consejo de ministros cada vez que se procede a una intervención”.
También ha abogado por una mayor transparencia para que se rindan las oportunas cuentas tanto al Gobierno como al Parlamento. Asimismo, cree necesario que se facilite a la cajas de “algunos instrumentos” para ampliar sus recursos propios “con la misma facilidad que lo hacen los bancos”.
NIEGA QUE HAYA UN "AGUJERO" EN CCM
Fernández Ordóñez ha comparecido en la Comisión de economía y Hacienda de la Cámara baja para explicar la intervención de la caja de ahorros castellano manchega que ha supuesto una inversión de 9.000 millones de euros de las arcas públicas. Según ha dicho, la intervención se produjo después de haber fracasado las negociaciones iniciadas para un proceso de fusión. “Las conversaciones no llegaron a buen puerto y el Banco de España actuó”.
La premura de la intervención vino después de comprobar que los administradores “no fueron capaces de encontrar una solución”, lo que podría haber supuesto un “colapso de liquidez”, lo que “requería la activación inmediata de la medida cautelar prevista”.
Para acelerar el proceso, “el Banco imprimió la máxima velocidad a sus decisiones”, en su “voluntad” de evitar que los problemas “degenerasen y contagiasen al resto del sistema financiero. La premura también “justifica la urgencia de la adopción del real decreto ley del Gobierno”.
El gobernador del Banco de España sí ha querido dejar claro que el objetivo del Estado es evitar que una entidad llegue a la suspensión de pagos. En el caso de CCM, asegura que “podrá hacer frente a todos sus compromisos”. La entidad �ha seguido- “no presenta ningún agujero patrimonial”, aunque ello “no significa que no afronte serios problemas por la inadecuada gestión de riesgos y la potente expansión del negocio inmobiliario, que ha generado importantes desequilibrios”, unas operaciones de gestión crediticia que “son muy peligrosas”.
Fernández Ordóñez ha insistido en que “la responsabilidad recae en los anteriores administradores”. También ha querido resaltar que “la retirada de depósitos ha sido claramente inferior a la esperada”.
