nuevatribuna.es
7 de enero de 2011, 7:32
nuevatribuna.es | 07.01.2011
La prima de riesgo del bono español escalaba a media mañana de este viernes hasta los 265 puntos básicos, su nivel más alto desde mediados de diciembre. Según los analistas, los tenedores de bonos temen que Portugal acabe contagiando a España, si, como ven probable, el país luso se ve obligado a pedir un rescate económico de la Unión Europea (UE). Así, el diferencial del bono portugués ascendía a la misma hora hasta los 438 puntos básicos, muy lejos todavía de los bonos irlandeses (+636 p.b.) y griegos (+990 p.b.).
Los temores sobre la deuda española se producen a pesar del apoyo chino a la deuda española. Al parecer, China se plantea comprar 6.000 millones de euros en deuda española, según ha trascendido tras la visita del viceprimer ministro chino, Li Keqiang, cuyo paso por España ha supuesto la firma de acuerdos comerciales entre España y el país asiático por valor de 5.666 millones de euros.
Sin embargo, los mercados también estarán pendientes de otros asuntos que llenan la agenda económica del Gobierno. En primer lugar, la reforma de las pensiones, cuyas líneas generales podrían variar pronto si fructifican los acuerdos que los sindicatos tratarán de muñir con el Gobierno a lo largo de todo el fin de semana. Con la participación de los líderes confederales de UGT, Cándido Méndez, y Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, está previsto que la negociación la aborden los negociadores habituales desde la llegada de Valeriano Gomez al Ministerio de Trabajo, es decir, la secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, el secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, y, por la parte sindical, los secretarios de acción sindical de UGT y CCOO, Toni Ferrer y Ramón Górriz, respectivamente, junto al secretario de Seguridad Social de CCOO, Carlos Bravo.
Los sindicatos rechazan hasta la fecha la pretensión del Gobierno de retrasar hasta los 67 años la edad de jubilación. Sin embargo, algunas fuentes ven un atisbo de esperanza para el acuerdo en la posibilidad apuntada por el Gobierno de permitir el retiro a los 65 años a aquéllos que desempeñen trabajos duros o peligrosos y a los trabajadores con largas carreras de cotización (36 años cotizados).
Otros asuntos importantes en la agenda económica son la reforma de la negociación colectiva, cuya estructura el Gobierno quiere cambiar antes del 19 de marzo; la reforma de las políticas activas de empleo y el desarrollo de la reforma laboral aprobada recientemente, con especial atención a la figura del despido objetivo (con 20 días de indemnización por año trabajado).
El año se inicia con un buen puñado de reformas pendientes en cuyo desarrollo el Gobierno quiere implicar a los sindicatos. Sin embargo, las centrales sindicales –que reunirán el lunes y el martes a sus Consejos Confederales- mantienen de momento su amenaza de convocar una nueva general si el Gobierno persiste en su intención de retrasar la edad de jubilación. El Ejecutivo quiere tener listo un anteproyecto de ley para la reforma de las pensiones el 28 de enero. Si no hay acuerdo este fin de semana, una nueva huelga general podría convocarse por esas mismas fechas. Veremos.
