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NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 16.06.2010

El Banco de España anuncia en su informe anual que hará públicas las pruebas de estrés de las entidades financieras para que los mercados "conozcan perfectamente la situación del sistema bancario español".

El gobernador del banco emisor, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, apuesta en su discurso por la trasparencia y sale así al paso de los rumores sobre la salud de las cajas de ahorro y los bancos españoles. En los últimos días, desde distintos sectores se había pedido que se hicieran públicos en toda Europa los resultados de las pruebas de solvencia, con el fin de que los mercados conocieran el estado real de los bancos.

Las pruebas mostrarán los deterioros estimados en el balance de las entidades, las necesidades de capital y el aporte de recursos propios comprometidos. También si disponen de suficiente capital para soportar escenarios de crecimiento complicados en el futuro proximo.

NUEVO MAPA FINANCIERO

Los últimos datos del sector señalan que los bancos que operan en España lograron un beneficio neto conjunto de 3.887,8 millones de euros en el primer trimestre de 2010, un 4,1% menos que hace un año, debido en gran parte al esfuerzo realizado en saneamientos y provisiones.

El gobernador del Banco de España considera que la reestructuración y recapitalización de las entidades españolas está "prácticamente trazada", algo que ya avanzó el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al conocer la 'fusión fría' de Caja Madrid, Bancaja y otras cinco entidades.

Fernández Ordóñez apunta que si, al cierre del mes de junio, algún proyecto hubiera fracasado "se actuará usando los mecanismos previstos en la Ley del FROB". Dicha norma da amplios poderes al organismo para intervenir una entidad si la considera inviable, al tiempo que permite también apoyar financieramente la reestructuración de entidades.

CUMPLIR EL AJUSTE

El gobernador del Banco de España considera "absolutamente imprescindible" que el Gobierno cumpla en cualquier circunstancia con su compromiso de acelerar el ajuste fiscal para reducir el déficit, incluso si el escenario económico es peor del previsto. De lo contrario, puede haber "graves consecuencias" sobre la credibilidad de España en esta materia.

Además, ha advertido de que los signos de recuperación española "son todavía muy débiles" y se sustentan en factores en muchos casos transitorios, por lo que prevé que la vuelta al crecimiento será gradual y tardará en crearse empleo.

También indica que los costes que supondrá el ajuste para la sociedad se verán compensados por "una mayor protección frente a las inestabilidades" y una posición "más sólida" para afianzar la recuperación.

El esfuerzo fiscal debe ir acompañado de "medidas estructurales orientadas a reforzar el crecimiento potencial de la economía" según el informe.

Fernández Ordoñez subraya que la corrección de las ineficiencias del mercado de trabajo tiene una "importancia primordial", puesto que de su reforma depende en gran medida la capacidad de ganar competitividad y generar empleo.

Recuerda que una parte del aumento del déficit público se debe al aumento del desempleo y que la prioridad de la reforma del mercado de trabajo "no relega la trascendencia que tiene continuar con las reformas en los mercados de productos", particularmente en el sector servicios.

La solvencia de las entidades financieras se hará pública