nuevatribuna.es
2 de junio de 2010, 14:15
NUEVATRIBUNA.ES/L.M.- 0106.2010
Los empleados públicos contarán con una mano amiga que les ayudará en la huelga general prevista el próximo martes. En Madrid, la policía se ha mostrado dispuesta hoy a “apoyar a los piquetes” que el día 8 de junio cercarán los edificios oficiales, para informar a los trabajadores. Al no gozar de derecho a la huelga, los funcionarios policiales respaldarán así la protesta contra el recorte del Gobierno a los salarios del conjunto de los empleados públicos, de un 5 por ciento de media. El mismo día, los trabajadores del sector recorrerán el centro de Madrid en una manifestación convocada a las seis y media de la tarde.
El representante del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Felipe Segundo, se mostró dispuesto hoy martes a apoyar a los piquetes sindicales el próximo martes durante la huelga prevista en la función pública. La policía, que tendrá que trabajar doble -movilizada con motivo de la huelga-, "atenderá las llamadas" de los ciudadanos que requieran sus servicios, aunque mostrará en las calles "iniciativa cero”, según confirmaron en fuentes policiales.
Por su parte, la Guardia Civil también apoyará el paro en el sector público, aunque el cuerpo tampoco tiene reconocido el derecho a la huelga, según confirmó el representante de la Unión de Guardias Civiles, Ramón Rodríguez Prendes, que hoy compareció ante la prensa junto al resto de sindicatos de la función pública madrileña: CSIF, CSIT-UP, STEM y otros.
APOYARÁN LA HUELGA GENERAL
Por otro lado, buena parte de los sindicatos de funcionarios se mostraron dispuestos a apoyar una posible huelga general en todos los sectores, si el Gobierno legisla finalmente una reforma laboral sin pactarla con los representantes de los trabajadores. En este sentido, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, reiteró hoy el plazo dado por el Ejecutivo para alcanzar un acuerdo entre obreros y patrones, que finaliza a mediados de la próxima semana.
En esta mesa del Diálogo Social, las partes parecen condenadas a levantarse sin llegar a un acuerdo. En caso de que eso suceda, el representante del CSIF madrileño, Juan Carlos Martínez, advirtió hoy que su sindicato apoyará una huelga general en todos los sectores. A su juicio, el Gobierno dinamitaría el derecho a la negociación colectiva con esta norma, dijo tras calificar de “barbaridad” que el Gobierno reduzca el número de efectivos en los cuerpos de policía, una medida prevista en el real decreto ley convalidado la semana pasada en el Congreso.
Según la representante de CSIT-UP, Esmeralda Domingo, los 'tijeretazos' el Presupuesto público supondrán una “nueva agresión” contra los empleados públicos, que llevan perdido, según sus cálculos, un 40 por ciento de poder adquisitivo a lo largo de los últimos treinta años. En la Comunidad de Madrid, los empleados públicos parten de una “mayor desventaja”, añadió, tras acusar a la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, de incumplir su compromiso de revalorizar un 2,3 por ciento el salario de los funcionarios entre 2009 y 2010.
Los empleados públicos se sienten víctimas de un intento de “criminalización” por parte del Gobierno y de otros sectores, como el Partido Popular, advirtió el representante de la rama madrileña de CCOO, Juan Antonio Olmos, quien añadió que esta huelga “no es más el principio” en la lucha por hacer respetar sus condiciones de trabajo.
Un 'decretazo' no es la única razón que detonará la huelga general, avisó el representante de de la rama de UGT en Madrid, Fernando Sánchez. Otras medidas, como el copago sanitario, así como posibles erosiones en el sistema de pensiones también servirán de espoleta para reventar la paz social, a través de la convocatoria de una huelga general.
Los empleados públicos contarán con una mano amiga que les ayudará en la huelga general prevista el próximo martes. En Madrid, la policía se ha mostrado dispuesta hoy a “apoyar a los piquetes” que el día 8 de junio cercarán los edificios oficiales, para informar a los trabajadores. Al no gozar de derecho a la huelga, los funcionarios policiales respaldarán así la protesta contra el recorte del Gobierno a los salarios del conjunto de los empleados públicos, de un 5 por ciento de media. El mismo día, los trabajadores del sector recorrerán el centro de Madrid en una manifestación convocada a las seis y media de la tarde.
El representante del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Felipe Segundo, se mostró dispuesto hoy martes a apoyar a los piquetes sindicales el próximo martes durante la huelga prevista en la función pública. La policía, que tendrá que trabajar doble -movilizada con motivo de la huelga-, "atenderá las llamadas" de los ciudadanos que requieran sus servicios, aunque mostrará en las calles "iniciativa cero”, según confirmaron en fuentes policiales.
Por su parte, la Guardia Civil también apoyará el paro en el sector público, aunque el cuerpo tampoco tiene reconocido el derecho a la huelga, según confirmó el representante de la Unión de Guardias Civiles, Ramón Rodríguez Prendes, que hoy compareció ante la prensa junto al resto de sindicatos de la función pública madrileña: CSIF, CSIT-UP, STEM y otros.
APOYARÁN LA HUELGA GENERAL
Por otro lado, buena parte de los sindicatos de funcionarios se mostraron dispuestos a apoyar una posible huelga general en todos los sectores, si el Gobierno legisla finalmente una reforma laboral sin pactarla con los representantes de los trabajadores. En este sentido, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, reiteró hoy el plazo dado por el Ejecutivo para alcanzar un acuerdo entre obreros y patrones, que finaliza a mediados de la próxima semana.
En esta mesa del Diálogo Social, las partes parecen condenadas a levantarse sin llegar a un acuerdo. En caso de que eso suceda, el representante del CSIF madrileño, Juan Carlos Martínez, advirtió hoy que su sindicato apoyará una huelga general en todos los sectores. A su juicio, el Gobierno dinamitaría el derecho a la negociación colectiva con esta norma, dijo tras calificar de “barbaridad” que el Gobierno reduzca el número de efectivos en los cuerpos de policía, una medida prevista en el real decreto ley convalidado la semana pasada en el Congreso.
Según la representante de CSIT-UP, Esmeralda Domingo, los 'tijeretazos' el Presupuesto público supondrán una “nueva agresión” contra los empleados públicos, que llevan perdido, según sus cálculos, un 40 por ciento de poder adquisitivo a lo largo de los últimos treinta años. En la Comunidad de Madrid, los empleados públicos parten de una “mayor desventaja”, añadió, tras acusar a la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, de incumplir su compromiso de revalorizar un 2,3 por ciento el salario de los funcionarios entre 2009 y 2010.
Los empleados públicos se sienten víctimas de un intento de “criminalización” por parte del Gobierno y de otros sectores, como el Partido Popular, advirtió el representante de la rama madrileña de CCOO, Juan Antonio Olmos, quien añadió que esta huelga “no es más el principio” en la lucha por hacer respetar sus condiciones de trabajo.
Un 'decretazo' no es la única razón que detonará la huelga general, avisó el representante de de la rama de UGT en Madrid, Fernando Sánchez. Otras medidas, como el copago sanitario, así como posibles erosiones en el sistema de pensiones también servirán de espoleta para reventar la paz social, a través de la convocatoria de una huelga general.
