viernes. 26.04.2024

Controladores militares para suplir a los civiles que están sospechosamente estresados

El ministro de Fomento ha reiterado que el elevado número de bajas de controladores aéreos en Barcelona responde a una estrategia, es decir, a una huelga encubierta. A su juicio, tanto estrés sólo puede significar que quizá estemos "ante personas que no están capacitadas para desempeñar ese trabajo".
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NUEVATRIBUNA.ES - 20.7.2010

El ministro de Fomento, José Blanco, ha cifrado en el 36% las bajas médicas de los controladores aéreos en Barcelona. Por este motivo, Blanco ha avanzado que ha acordado junto con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y la ministra de Defensa, Carmen Chacón, habilitar a controladores aéreos militares para que trabajen en torres de control civiles en "situaciones excepcionales".

En declaraciones a la cadena Ser, Blanco ha explicado que se requiere una orden del presidente del Gobierno para que el personal militar pueda ocupar puestos de trabajo en los aeropuertos civiles, pero que previamente éstos tienen que estar habilitados. El ministro ha informado además de que el 32% de los trabajadores del centro de Barcelona seguían hoy de baja. Ayer eran el 36%.

A su juicio, las causas como el estrés, la ansiedad o la depresión que aducen los controladores aéreos para justificar sus bajas médicas son "incompatibles" con las condiciones que deben reunir estos profesionales, por lo que ha avisado de que si estos motivos se reiteran "probablemente" haya nuevas pruebas para acceder a este tipo de puestos, ya que "podemos estar ante personas que no están capacitadas para desempeñar ese trabajo".

Asimismo, ha anunciado que la Seguridad Social ya ha comenzado con las inspecciones de trabajo para investigar las causas de las bajas médicas, y que si se confirma que éstas no fueron justificadas "puede haber despidos". "Consideramos que lo ocurrido no es fruto de la casualidad o del azar, obedece a una estrategia y vemos que puede haber incumplimiento de ley, que puede haber responsabilidades y tenemos que tomar decisiones", ha expresado, añadiendo que el esfuerzo del Ministerio de Fomento para entablar un diálogo "no está siendo correspondido".

José Blanco ha planteado la posibilidad de que todo se trate de una cuestión de dinero originada después de la aprobación de la nueva ley, por la cual los controladores cobran menos de lo que cobraban en 2009: "No están trabajando más de lo que lo hacían el año pasado, están trabajando el 15% menos de las horas que el año pasado, pero en 2009 cobraban las horas extra a un tercio más". Su tesis es que "el dinero parece que da la salud, porque con más dinero parece que había menos agobio y menos estrés".

Fomento vive estos días un conflicto con los controladores, cuyas bajas médicas se han disparado en los últimos meses, coincidiendo con la entrada en vigor del decreto ley que cambió sustancialmente sus condiciones de trabajo. El ministerio atribuye esta situación a una huelga encubierta, mientras que el sindicato de mayoritario lo atribuye al estrés y la presión que supone la nueva norma.

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