Una veintena de afectados por productos tóxicos (participaciones preferentes y deuda subordinada) vendidos por entidades bancarias se han manifestado hoy por la Rambla de Poblenou y han entrado en 18 sucursales bancarias para entregar un manifiesto en el que piden la complicidad de los empleados.
El manifiesto, que los afectados agrupados en la plataforma Estafabanca han titulado "Manifiesto del día del bocadillo de chorizo", explican que son personas "estafadas y decepcionadas por ver traicionada su confianza en su banco o caja, angustiadas por el incierto futuro de sus trabajados y humildes ahorros y totalmente indignadas por sentirse ninguneadas".
En la plataforma Estafabanca han titulado "Manifiesto del día del bocadillo de chorizo", explican que son personas "estafadas y decepcionadas por ver traicionada su confianza en su banco o caja, angustiadas por el incierto futuro de sus trabajados y humildes ahorros y totalmente indignadas por sentirse ninguneadas"
El portavoz de la plataforma Estafabanca, Miguel Rocher, ha explicado a Efe que la acción de hoy es la previa a otra que llevarán a cabo el próximo jueves día 22 por la tarde, cuando entregarán en las mismas sucursales bancarias reclamaciones oficiales por sentirse estafados.
Aproximadamente unas 300.000 familias catalanas y 1 millón en toda España no han podido recuperar el dinero que habían invertido en participaciones preferentes o deuda subordinada, en muchos casos sin que las entidades bancarias les advirtiesen que se trataba de productos tóxicos.
En el manifiesto que han entregado a los empleados, los afectados hacen constar que "sabemos y comprendemos que sois personas angustiadas, algunas avergonzadas y muchas asustadas por la doble presión que estáis recibiendo, por una parte de la alta dirección y por otra de vuestra clientela indignada por lo que considera una estafa".
"Solicitamos de vuestra parte y os ofrecemos por la nuestra que se haga un gesto simbólico para visualizar este apoyo mutuo entre todas las personas de 'dentro' y de 'fuera' de las oficinas bancarias sometidas a un creciente sufrimiento psicológico", añade el manifiesto.
"Unamos nuestras voluntades hacia una solución conjunta que ponga fin a esta grave irregularidad perpetrada por más de 50 entidades bancarias españolas y que afecta a casi un millón de familias, el 90% mayores de 65 años", concluye el manifiesto entregado hoy a los empleados de banca.
