jueves. 28.03.2024
DEBATE SOBRE POLÍTICA ECONÓMICA

¿Alguien puede creerse que el pacto para salir de la crisis le importa lo más mínimo al PP?

Los 'populares' insisten en que no se dan las condiciones para cerrarlo y que no quieren ser partícipes del "fracaso" de la política del Gobierno, después de que Rajoy fuera incapaz de presentar una alternativa. La comisión ministerial que negociará el pacto apenas ha iniciado su trabajo.
> Rajoy: "Váyase", Zapatero: "¡Vaya falta de valentía!"
NUEVATRIBUNA.ES - 18.2.2010

Es probable que a la comisión que integran la vicepresidenta Salgado, el ministro de Industria y el titular de Fomento sí que le importe. De hecho, ya han comenzado a trabajar en la propuesta que presentarán al resto de los grupos parlamentarios. Se supone que la mencionada propuesta es el punto de partida para negociar con los partidos representados en el Parlamento y que los miembros del Ejecutivo están abiertos a discutir y en su caso incorporar sus propuestas. Así lo ha reconocido Miguel Sebastián que, sin embargo, ha hecho una matización a las que procedan del PP: "Algunas propuestas se pueden considerar pero otras son más difíciles porque no son muy coherentes con el compromiso de gasto". El ministro se refería a la necesidad de no poner en riesgo las cuentas públicas, "ya que está el compromiso reducir el déficit público al 3 por ciento en 2013. (...) Ése es el reto. Por eso, todo lo que hagamos tiene que tener cero o muy poco impacto presupuestario. Sabemos que esto es muy difícil pero no imposible".

La advertencia probablemente esté siendo evaluada por los distintos portavoces, aunque cada vez resulta más dudoso que los 'populares' trabajen en un plan alternativo. A tenor de las declaraciones de sus dirigentes, el único interés del principal partido de la oposición es que se convoquen elecciones cuanto antes porque es el momento de aprovechar el clima de descontento social que alienta la difícil situación económica y que se refleja en las encuestas. Mariano Rajoy lo dejó claro en el debate económico del miércoles y así lo constata este jueves la blogosfera: Mariano (...) más que arrimar el hombro, más que apuntar ideas, aporta reproches, vaguedades de manual de economía, y ya sólo cita de pasada la solemne memez con la que nos estuvo torturando un año entero: la bajada de impuestos en la que ya no creen ni sus más ultraliberales correligionarios europeos. Las encuestas no le permiten destapar su juego porque sus votantes se han tragado el farol de que Mariano esconde un repóker que es la repera. No necesita arriesgar más. (Blog de Manolo Saco).

Pero basta recurrir a las declaraciones de algunos destacados dirigentes del PP, veinticuatro horas después del debate, para percatarse de la escasa voluntad de pacto que hay en sus filas: "Zapatero no quiere un pacto, sino una adhesión inquebrantable", ha dicho la secretaria general, María Dolores de Cospedal, en Antena 3 para insistir en que su partido no está dispuesto a darle un cheque en blanco y destacar la existencia de "motivos suficientes" para "desconfiar" de su palabra. "Lo más democrático en un momento determinado si no se tienen soluciones que ofrecer a los españoles es convocar elecciones anticipadas", ha remachado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. Pero Aguirre ha dicho más cosas como que Mariano Rajoy "presentó un discurso que estaban esperando la inmensa mayoría de los españoles" mientras que el de Zapatero "sonó a más de lo mismo".

La 'lideresa' ha pretendido hacer un elogio al presidente nacional del PP fijándose en lo mismo que muchos blogueros comentan en la red para subrayar la ausencia de propuestas de Rajoy: Mariano Rajoy está esperanzado en que las cifras negativas de la economía y sobre todo del desempleo se sigan manteniendo y con ello se mantenga el descontento social que hunda en las encuesta al PSOE. Y por tanto lo único que han de hacer es magnificar la situación negativa de la economía española y pasar de puntilla sobre las propuestas del P.P. para salir de la crisis, no sea que se levante la perdiz. (Blog de Antonio Rodríguez). Zapatero anda cicatero en propuestas de reformas, pero algo dice, pese a que todo lo que diga se pueda convertir, en un segundo, en un problema para el gobierno que preside. Rajoy, desde la oposición, no dice nada y todo el mundo piensa que más que no tener nada que decir, lo que realmente hace es ocultar su verdadera agenda. Tengo la impresión de que las palabras de Rajoy realmente son una proyección, usando la jerga psicoanalítica. Rajoy tiene un gran miedo a que los suyos, un buen día, le muevan la silla en la más insípida reunión “a priori” del Grupo Parlamentario. Han fracasado los intentos de echarlo por medio de los órganos del PP y alguien habrá pensado que se podría operar a la británica, con una remoción de Rajoy como Presidente del Grupo Parlamentario del PP en el Congreso. (Blog de Manuel Calleja).

Pero, ¿es realmente cierto que el PP carece de propuestas que llevar a la mesa de negociación sobre el pacto? Parece que no. Hay una propuesta que recoge el sentir de la patronal a cuyos postulados presta su voz en las cámaras legislativas: conseguir una reforma laboral que contemple un despido "más baratito". Y el Gobierno, al menos en principio, no está dispuesto a 'tragar' con lo que sea que suponga un recorte de derechos de los trabajadores. Además, llama la atención que la única demanda que tienen clara los 'populares' se refiera al ámbito laboral, justamente el que no estará representado en la comisión del Ejecutivo, en la que no se ha incluidoal titular de Trabajo. Se diría que el PP está poniendo el carro delante de los bueyes anticipando lo que será su respuesta al fracaso de la negociación: "Es absolutamente incomprensible que Celestino Corbacho no forme parte de la comisión ministerial anunciada para negociar pactos contra la crisis en un plazo de dos meses teniendo en cuenta que el desempleo es el mayor drama en España" (María Dolores de Cospedal, un día después del debate y cuando la comisión ni siquiera ha cerrado su oferta).

El balance del debate y lo que cabe esperar de él se resume en esta frase de Luis Solana: ¿Quién ha ganado este debate? Pues no hay ganador claro porque ha habido dos debates. Uno era sobre datos y medidas, que ha ganado Zapatero. Otro era sobre sensaciones y estados de ánimo y ese debate lo ha ganado Rajoy. Su post se titula "¡Un registrador de la propiedad anarquista!" y empieza comentando que Rajoy no planteó moción de censura, ni solicitó elecciones anticipadas, nada de eso: pidió a los diputados socialistas que quitasen a Rodriguez Zapatero de su responsabilidad de presidente del gobierno. Es decir: yo no puedo ganar tras dos elecciones generales; yo no puedo ganar en este Parlamento; pero podré ganar (a lo mejor) si el PSOE sustituye a su líder.

Y nosotros podemos concluir con él: "Es que si no se escucha no se cree".

¿Alguien puede creerse que el pacto para salir de la crisis le importa lo más...