miércoles. 24.04.2024

Luis Goytisolo, Premio Nacional de las Letras Españolas 2013 y académico, nos recibe en la magnífica Casa de las Palabras donde ocupa la silla C desde 1994. Charlamos sobre su último trabajo, El sueño de San Luis, escrito por encargo de Jorge Herralde y que funciona como un mapa estelar de su propia obra no exento de autocrítica. El título nos habla de su origen, los sueños, que en muchos casos a lo largo de su vida le han entregado la llave para abrir los secretos de su subconsciente.

Jesús Martín Tapias | Es un privilegio para La cueva del erizo y para mí un placer que nos reciba en este magnífico lugar, laCasa de las Palabras. Muchas gracias. Acaba de publicar El sueño de San Luis, que es a mi modo de ver una forma peculiar de analizar su propia obra. ¿De qué se trata exactamente?

Juan Goytisolo | Yo la defino como una obra transversal en el sentido de que fundamentalmente es unensayo, pero es un ensayo sobre unos aspectos tan personales como es el subconsciente y que no puede dejar de contener elementos autobiográficos, porque no puedo meterme en la piel de otro, no conozco sus sueños, no conozco su forma de ser y por tanto, muchísimo menos su subconsciente. En la parte final hago una extrapolación, y eso que digo que no puedo hacer lo hago. Hablo de cuatro escritores que de una forma u otra han sido afines a mí, no quiero decir que se parezcan, en un momento u otro de mi vida. Leyendo sus obras en conjunto, de cabo a rabo, pude sacar una impresión similar a partir de las repeticiones de temas, detalles. Pero aviso que no es el mismo caso. Yo hablo de mí mismo, cuento sueños, cuento otros elementos ajenos, cosas que se repiten también en mis obras, y por eso digo que es a la vez un ensayo y un elemento autobiográfico. El sueño de San Luis es el regalo que recibí el día de San Luis -su santo- del año anterior. Fue un sueño queclarificaba una serie de sueños anteriores que había tenido muchos años atrás sobre la reconstrucción de una obra arquitectónica. El sueño de San Luis me hizo ver que en realidad se trataba de la reconstrucción o construcción de una obra no arquitectónica sino de la arquitectura de una obra literaria.

LA CONSTELACIÓN DE LUIS GOYTISOLO

Su gran obra es, sin duda, Antagonía, sin embargo usted dice que es un error pensar que un escritor escribe siempre la misma obra, pero usted dice que se repite. ¿En qué medida y en qué aspectos se repite en el resto de sus obras?

Lo que he hecho a partir de entonces, con subidas y bajadas, es, de hecho, no repetir lo que ya está en Antagonía, pero sí desarrollar algunos aspectos que están apuntados, que solo en germen. Como si en una plantación de cualquier cosa al mismo tiempo hubiera otros árboles que se van a desarrollar. Una vez incluso preparé una conferencia que se titulaba Antagonías y cosmogonías, pues ya las demás obras forman como una constelación que no es real. Una estrella no sabe en absoluto que está en relación con otra, de la Osa Mayor, por ejemplo. Nosotros la relacionamos por una cosa de carácter cultural y estas estrellas, que no lo saben, resulta que están en relación desde el punto de vista del que las contempla. Y algo así es lo que sucede a partir de Diario de 360 gradosque es una novela refundadora, por así decir, contiene elementos biográficos, otros ensayísticos y otros propiamente narrativos. También el estilo se renueva y hay unos elementos que apenas están en Antagonía de carácter maravilloso que no existían anteriormente. Y en las tres novelas que siguen Liberación, Oído atento a los pájaros y El lago en las pupilas en realidad se van desarrollando aspectos, más que de Antagonía, deDiario de 360 grados, y son en cierto modo complementarios. Nos encontramos con que son cuatro volúmenes, el fundador, por así decir, que es Diario de 360 grados, y los tres siguientes que forman una especie de constelación. Desde el punto de vista argumental no tienen nada que ver una con otra.

"Considero fallida la novela que mereció el Premio Nacional de Narrativa"

Una obra también fallida que es Estatua con palomas que también es una mezcla de biografía y de paralelo en el mundo romano de un equívoco similar al que desarrolla en la parte argumental biográfica. Es la novela que mereció el Premio Nacional de Narrativa, pero que a mí me pasa lo mismo que con Las mismas palabras, que no me parece una obra conseguida. Mientras que en Las afueras no conseguí lo que yo quería pero es una novela que aguanta perfectamente, se puede leer ahora.

Usted le concede una importancia muy grande a los sueños. En primer lugar, ¿son tan claros además?

Algunos sí, por eso, y sobre todo, lo que me llamaba la atención es la reiteración, que en el curso de los años se fuese repitiendo lo mismo. A veces la casa no era en ciudad, sino una casa en el campo casi cubierta de hiedra, muy bonita, como estas ruinas góticas que hay a veces. Y pensaba, ¡caramba, pero si esto es precioso! Es decir, cambiaba, pero el tema de fondo siempre era el mismo. Otras veces era algo urbano. Otro sueño, que también lo recojo en un post scriptum, era una barrio entero en estado ruinoso. Entonces me encontraba contemplándolo, un señor me decía que se iba a reconstruir, hemos arreglado una casa museo, que explicará todo lo que ha pasado, y me daba la llave para entrar yo en esa casa y ver lo que habían hecho, es decir, me daba la clave, que eso es curioso también.

¿Qué relación puede tener eso con su obra literaria?

Bueno, se refiere sobre todo a la construcción de Antagonía. Esto lo iba soñando durante los veinte años que tomo desde la primera idea hasta que se publicó Antagonía.

LAS LETRAS EN LA GENÉTICA DE LOS GOYTISOLO

Luis Goytisolo, Premio Nacional de las Letras en 2013; Juan Goytisolo, Premio Cervantes en el 2014; ¿Qué tiene el apellido Goytisolo? ¿De dónde viene este potencial literario?

Yo siempre digo que es de naturaleza genética. Desde una tatarabuela, María de Mendoza, malagueña, que escribió novelas decimonónicas, que aquí creo que habrá algún libro supongo, en esta biblioteca. En cada generación ha habido siempre alguien que ha escrito siempre por línea femenina, es decir, que el apellido ha ido cambiando cada vez. Ella se llamaba Mendoza. El que fue escritor realmente fue su hijo, él se llamaba Vives, y él lo que hizo fue traducir a Omar Kayami en la época. Entonces una sobrina, hermana de mi madre,Consuelo Gay, escribía poesía, murió muy joven, pero una poesía con una calidad extraordinaria. Publiqué ocho poemas que se han encontrado, manuscritos, y están escritos dos en catalán, dos en francés, y cuatro en español, y son excelentes. Yo creo que tenía el mismo talento que mi hermano José Agustín, lo que pasa es que murió muy tempranamente de una tuberculosis renal. Y luego ya la generación siguiente es la nuestra.

Sólo nos queda darle las gracias por recibir a La cueva del erizo en este lugar tan emblemático que es la Real Academia de la Lengua Española.

“El sueño de San Luis”, un mapa estelar de la obra de Luis Goytisolo