Necesitamos tu ayuda para seguir informando
Colabora con Nuevatribuna
Vicente I. Sánchez | @Snchez1Godotx
A raíz de la Palma de Oro honorífica que George Lucas recibirá en la 77ª edición del Festival de Cannes, resulta muy estimulante volver a acercarse a la vida y obra de este cineasta estadounidense que puede presumir de haber revolucionado la industria del cine gracias a la creación de franquicias como Star Wars o Indiana Jones. Un cineasta que ha generado miles de millones a la industria del entretenimiento, pero que no siempre ha sido bien recibido por una gran parte de la crítica más intelectual, la cual ha tendido a considerarle como uno de los máximos responsables de que el cine se haya convertido en un mero espectáculo al servicio de las palomitas. Por ello, la Palma de Oro que recibirá en Cannes es mucho más que un reconocimiento al director de películas como “American Graffiti” y “Star Wars: Episodio IV”. Es el aplauso de la crítica a una forma de contemplar el cine que ha terminado por imponerse en todo el mundo.
Para continuar reflexionando sobre este interesante creador, Norma Editorial acaba de publicar "Las Guerras de Lucas", de Laurent Hopman y Renaud Roche. Un interesante cómic de corte autobiográfico que llega a España tras haber vendido más de cien mil ejemplares en Francia y que se presenta como un imprescindible para todos los seguidores del universo de Star Wars.
Minuciosamente documentado y lleno de referencias, "Las guerras de Lucas" nos cuenta en viñetas las dificultades y vicisitudes a las que tuvo que hacer frente George Lucas para sacar adelante su famosa película. Hopman y Roche crean un cómic lleno de veracidad que busca sintetizar todos los libros y estudios que hay sobre el autor, aunque es evidente que se nutre especialmente de la biografía escrita por Brian Jay Jones.
El cómic se remonta a la niñez de este director para ir desgranando cuáles fueron las claves que le llevaron a convertirse en un hombre de éxito y que su universo se convirtiera en la franquicia más rentable del mundo. Comienza la historia por su etapa de estudiante, presentándolo como un niño muy creativo pero que no acaba de adaptarse al entorno escolar. Uno de los episodios fundamentales del cómic es el trágico accidente de coche que el cineasta tuvo cuando estaba en el instituto, que a punto estuvo de costarle la vida y que fue clave para que Lucas se centrara en la vida.
El guionista Laurent Hopman y el dibujante Renaud Roche presentan un cómic que narra con gran velocidad y agilidad cómo Lucas comenzó a estudiar cine y cómo logró el éxito y cierto reconocimiento dirigiendo "THX-1138" y "American Graffiti". No obstante, el grueso del libro se centra en el proceso creativo y personal que llevó para el desarrollo de “Star Wars”, proyecto que contra todo pronóstico se convirtió en una de las películas más exitosas de la historia.
Uno de los puntos más interesantes del cómic es que Laurent Hopman no realiza un retrato para nada complaciente y servil de George Lucas. La imagen que se proyecta en este libro es la de un hombre lleno de creatividad pero que tenía importantes déficits como artista, empezando por un escaso talento para escribir guiones y dirigir equipos. Así, podremos ver cómo continuamente la gente se quejaba de lo confusos que eran sus textos y cómo necesitó de muchos escritores para poder poner en orden sus ideas. Resulta también divertido asistir a pequeños episodios, muy bien documentados, como cuando Harrison Ford decidió por su cuenta variar los diálogos de Star Wars, ya que nadie hablaba como Lucas escribía, o como Alec Guinness no reaccionó bien cuando se enteró de que su personaje, Obi-Wan, debía morir en escena. Por sus páginas también pasan personajes de lo más variopintos como Francis Ford Coppola y Steven Spielberg, quienes también tuvieron papeles fundamentales en la vida de George Lucas, así como las peleas y romances que se produjeron durante el rodaje.
Si algo queda claro tras la lectura de este cómic, es que George Lucas es más un gran creativo y productor que director, y que “Star Wars” logró salir adelante gracias a que supo rodearse de gente de mucho talento que logró entender lo que necesitaba. Algo que a la postre explica por qué Lucas no dirigió los siguientes episodios de la franquicia y prefirió quedarse en un segundo plano. Así se entiende en uno de los episodios cuando vemos que estuvo a punto de darle un ataque al corazónpor el estrés provocado por la película.
Otro de los elementos que hacen que "Las guerras de Lucas" funcione muy bien es el dibujo de Renaud Roche, clásico, expresivo y capaz de contar mucho en pocas viñetas. El dibujo en blanco y negro con ciertos colores que buscan resaltar ciertos elementos de la acción convence y seduce, siendo un elemento más para que esta obra se devore en pocas horas. Resultan muy útiles los bocetos finales que se incluyen en esta cuidada edición de Norma Editorial, ya que ayudan a entender el proceso creativo de sus autores.
Finalmente, "Las guerras de Lucas" es un interesante making of lleno de referencias y anécdotas que serán una delicia para todos los seguidores de esta franquicia. Pero por encima de todo, es una historia sobre la magia del cine y sobre cómo los grandes sueños pueden hacerse realidad.
