viernes. 26.04.2024
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Las ministras de Economía y Hacienda durante la presentación del Programa de Estabilidad 2022-2025.

Bruselas ya ha recibido el Programa de Estabilidad y el Plan Nacional de Reformas enviado por el Gobierno, donde se reconoce que el aumento de la presión tributaria será una realidad antes de 2025 para acercar los niveles de tributación de España a la media de los países de nuestro entorno y, además, se tiene la intención de revisar si los beneficios fiscales logran los objetivos económicos y sociales para los que fueron creados.

En España, una parte importante de las políticas de gasto se instrumentan a través de los beneficios fiscales, con un coste total de 60.000 millones de euros.

Las exenciones, los tipos reducidos, las reducciones o las deducciones en los impuestos generan incentivos que necesitan ser verificados para comprobar que cumplen su efectividad para la política para la que fueron creados.

El Comité de Expertos para la reforma fiscal concluyó que entre sus recomendaciones se encuentra la necesidad de realizar una evaluación permanente de la efectividad de los beneficios fiscales, al igual que lo determinaron los expertos de la reforma fiscal del año 2014.

El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia exige la revisión exhaustiva de todos los beneficios fiscales existentes

Además, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia exige la revisión exhaustiva de todos los beneficios fiscales existentes. Es decir, se trata de una necesidad impuesta a nivel interno y comunitario para verificar que cumplen los requisitos para la política para la que fueron diseñados.

Para esta revisión se creará un grupo de trabajo compuesto por el Instituto de Estudios Fiscales (IEF), la Agencia Tributaria y la Dirección General de Tributos (DGT), siguiendo la metodología de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) dentro de una estrategia fiscal nacional a medio plazo que garantice la sostenibilidad financiera de las Administraciones Públicas.

En este contexto, en los primeros tres meses del año, la recaudación tributaria de la AEAT ha superado por primera vez a la recaudación tributaria de un primer trimestre desde 2008, nada menos que en 6.282 millones.

De esta forma, Hacienda firma el mejor primer trimestre de la serie histórica, recaudando 54.749 millones de euros, un 20,2% más que el año anterior, a pesar de la pérdida de 1.900 millones por las medidas para aminorar el recibo de la electricidad y de otros 189 millones del mantenimiento de las medidas COVID -principalmente, los aplazamientos de impuestos-, que fueron compensadas en el trimestre por unos 289 millones por las medidas tributarias aprobadas por el Gobierno en 2021.

Así, el análisis de los beneficios fiscales prestará especial atención a aquellos que distorsionan la progresividad y la redistribución. Pero si España quiere lograr un sistema tributario más justo capaz de asegurar los recursos suficientes para garantizar nuestro Estado del Bienestar, convendría tomar medidas para reducir, por primera vez en nuestro país, la economía sumergida y el fraude fiscal.

Carlos Cruzado, presidente de los Técnicos de Hacienda (GESTHA)

¿Por qué Hacienda quiere revisar casi todos los beneficios fiscales?