martes. 30.04.2024

Con flexibilidad cognitiva nos referimos a la capacidad que tiene el cerebro para adaptar nuestra conducta y pensamiento con facilidad a conceptos y situaciones cambiantes, novedosas e inesperadas, o a la capacidad mental de pensar en varios conceptos a la vez.

La flexibilidad cognitiva tiene un papel relevante en el aprendizaje y capacidad de resolución de problemas complejos. Nos permite seleccionar la estrategia que debemos llevar a cabo para adaptarnos a las diferentes situaciones con las que nos vamos encontrando. Nos ayuda a captar la información del ambiente y responder de forma flexible, ajustando nuestra conducta a los cambios y exigencias de la situación.

La flexibilidad cognitiva tiene un papel relevante en el aprendizaje y capacidad de resolución de problemas complejos

La persona con una buena flexibilidad mental o cognitiva destacará por las siguientes características:

· Una buena flexibilidad cognitiva o mental nos permite adaptarnos rápidamente a los cambios o novedades del medio.

· La flexibilidad cognitiva nos ayuda a tolerar los cambios que puedan suceder durante la resolución de problemas o la ejecución de una tarea. Nos permite generar alternativas.

· Las personas con buena flexibilidad cognitiva efectúan fácilmente la transición de una actividad a otra y saben comportarse adecuadamente en cada situación.

· Pueden captar varias dimensiones de una misma realidad, mirar desde diferentes perspectivas y establecer relaciones ocultas, pudiendo encontrar fácilmente varias soluciones a un mismo problema.

· Las personas con flexibilidad mental o cognitiva toleran mejor los errores y cambios de planes, tienen mayor facilidad para ponerse en lugar del otro, y llegan más fácilmente a acuerdos comunes.

La flexibilidad cognitiva es una de las habilidades cognitivas básicas superiores de la metacognición, y forma parte de los procesos denominados funciones ejecutivas. Las funciones ejecutivas son cruciales para el éxito y desarrollo tanto en la escuela, como en la vida. Nos permiten formular metas, planificar y llevar adelante un plan, supervisar nuestras acciones y corregirlas en función de los resultados.

Las personas con flexibilidad mental o cognitiva toleran mejor los errores y cambios de planes

La flexibilidad cognitiva, se relaciona con la inteligencia fluida, con el razonamiento fluido y la destreza para resolver problemas nuevos de forma flexible y eficiente. Una correcta flexibilidad cognitiva a nos permite tener en cuenta otras creencias, valores, ideas o formas de pensar. Ayudándonos a comprender el punto de vista de los demás, valorando otras opciones además de la propia. Por eso, la flexibilidad cognitiva también está muy relacionada con la empatía y nuestra forma de interacción social.

Desde que nos despertamos hasta que volvemos a dormir hacemos uso innumerables veces de nuestra flexibilidad cognitiva. Podemos poner los siguientes ejemplos de flexibilidad cognitiva en el día a día:

· Un ejemplo en el que actúa es cuando vamos a desayunar, pero nos damos cuenta de que no quedan cereales ¿Qué hacemos?, ¿nos enfadamos y vamos al colegio, o al trabajo, sin desayunar?, ¿desayunamos en una cafetería?, ¿preparamos un desayuno con otros ingredientes que tengamos? La flexibilidad cognitiva nos permite, ante situaciones más o menos inesperadas, barajar mentalmente una serie de opciones alternativas y elegir la más eficiente o la que nos parece mejor.

· Si un buen amigo de repente nos deja de hablar, la flexibilidad mental nos ayudaría a comprender las causas. Nos permite darnos cuenta de que tal vez nuestra información no es la correcta, que él tiene un punto de vista diferente al nuestro, hace que podamos ponernos en su lugar y pensar qué motivos ha tenido para dejar de hablarnos. Además, también será la que nos dé la capacidad de buscar maneras de solucionar el problema.

· Si todos los días eliges el mismo trayecto para ir a trabajar, pero un día está lloviendo mucho, todo el mundo ha decidido coger el coche y te encuentras con un atasco importante, ¿qué haces? Podrías ir en metro, podrías salir antes de casa o tomar otro camino por el que tal vez no encuentres atasco... Tus planes previos o tu rutina se ha visto frustrada por una situación imprevista, pero gracias a la flexibilidad cognitiva has sabido generar opciones de manera simultánea utilizando las mismas capacidades que a la hora de tomar una decisión: experiencia, expectativas, motivación, conocimiento y emociones.

· Cuando llamamos al timbre y vemos que nadie abre la puerta, no seguimos llamando al timbre, sino que comprendemos que no hay nadie en casa. Ser capaces de dejar de apretar ese interruptor y buscar otra solución es ser mentalmente flexible. Además, dadas las circunstancias, buscamos posibles soluciones al imprevisto: llamamos por teléfono, buscamos a la persona en los sitios más probables o decidimos volver luego.

La maduración de la flexibilidad cognitiva se completa en torno a los 20 años de edad

La flexibilidad cognitiva, al igual que el lenguaje o las destrezas motoras, es una habilidad cognitiva que cuenta con su proceso de desarrollo y maduración cerebral. La maduración de la flexibilidad cognitiva se completa en torno a los 20 años de edad. Empezamos a entrenarla desde pequeños, poniéndola en práctica a diario. Podemos observar cómo los niños pequeños quieren las cosas inmediatamente, les afectan los cambios de rutina y montan rabietas muy a menudo, esto puede ser debido a que su flexibilidad cognitiva está en plena maduración y no tienen en cuenta diferentes opciones o alternativas. 

Entre las elaboradas áreas corticales frontales involucradas en la toma de decisiones flexibles, la corteza orbitofrontal (OFC) ha sido una de las estructuras más intensamente estudiadas y se sabe que tiene una conectividad generalizada con las áreas sensoriales, así como con las áreas corticales y subcorticales relacionadas con la memoria, el aprendizaje y la atención.

Asociar estímulos sensoriales con resultados previstos es esencial para el aprendizaje exitoso y el comportamiento adaptativo. Una forma en que el cerebro podría realizar esta operación es transmitiendo una señal de "enseñanza", basada en los resultados de la elección, a las áreas sensoriales involucradas en el procesamiento del estímulo. Varios estudios han proporcionado evidencia consistente con esta suposición, mostrando respuestas en cortezas sensoriales primarias relacionadas con la expectativa de un estímulo o recompensa, que las señales descendentes de OFC pueden mediar. Los estudios en roedores han descubierto las distintas reglas de cómo OFC ejerce señales de "enseñanza" para modular el procesamiento sensorial. Recientemente, utilizando una tarea de aprendizaje de inversión táctil en roedores, Banerjee y col. revelaron que la señal de arriba hacia abajo de la OFC actualizó las representaciones sensoriales en la corteza somatosensorial primaria (S1) mediante la reasignación de respuestas de una subpoblación de neuronas de valor sensibles a la historia de recompensa. En los seres humanos, no está claro si las señales comparables de arriba hacia debajo de la OFC instruyen a las áreas sensoriales para reasignar las asociaciones estímulo-resultado esenciales para la adaptación conductual. Si se validan, estas observaciones pueden revelar de manera crucial motivos comunes de circuitos entre especies que subyacen al aprendizaje y la flexibilidad dentro del mismo dominio sensorial.

Un equipo de investigación neurocientífica de la Berufsgenossenschaftliches Universitätsklinikum Bergmannsheil, el Hospital Universitario de la Universidad del Ruhr de Bochum, Alemania, y el Instituto de Biociencias de la Universidad de Newcastle ha logrado acercarse un poco más al origen evolutivo de la flexibilidad cognitiva. Los investigadores publicaron sus hallazgos en la revista Nature Communications, en línea, el 9 junio 2023: La flexibilidad cognitiva es esencial para la supervivencia de todas las especies en la Tierra. Se basa particularmente en funciones de la llamada corteza orbitofrontal ubicada en el cerebro frontal (OFC), como hemos visto previamente. "La pérdida de flexibilidad cognitiva en la vida cotidiana es un factor clave en muchas enfermedades del área emocional".

La flexibilidad cognitiva es esencial para la supervivencia de todas las especies en la Tierra

Utilizando imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI), el equipo de Bochum y su socio colaborador, el Dr. Abhishek Banerjee del Instituto de Biociencias de la Universidad de Newcastle, examinaron las funciones cerebrales de 40 participantes mientras aprendían una tarea sensoriomotora.

Mientras estaban tumbados en la resonancia magnética, los voluntarios tuvieron que aprender a reconocer el significado de diferentes señales táctiles, similares a las utilizadas en Braille, en la punta del dedo índice derecho. Una señal táctil les decía a los participantes que presionaran un botón con la mano libre, mientras que otra señal les indicaba que no lo hicieran y que permanecieran quietos.

La conexión entre las dos señales táctiles diferentes y presionar el botón o no presionar el botón tuvo que aprenderse de prueba en prueba. El desafío: después de un cierto tiempo, las señales táctiles cambiaron su significado. La tarea de aprendizaje que se eligió permitió observar los cerebros de ratones y humanos bajo demandas cognitivas comparables.

Un hallazgo sorprendente es la comparabilidad entre los resultados de Bochum en humanos y los datos publicados previamente de ratones, señala Wang. La similitud muestra que las funciones cognitivas que son importantes para la supervivencia, como la flexibilidad para adaptarse rápidamente a condiciones que cambian repentinamente, siguen reglas comparables en diferentes especies.

Además, los científicos de Bochum pudieron determinar una estrecha participación de las regiones cerebrales sensoriales en el procesamiento de las decisiones tomadas durante el aprendizaje táctil., comprobándose que además del cerebro frontal, las regiones sensoriales son esenciales para la toma de decisiones en el cerebro. Esto ahora sugiere que la interacción entre el cerebro frontal y las regiones cerebrales sensoriales para la toma de decisiones, se formó de forma temprana en el desarrollo evolutivo del cerebro.

Por último, compartir esta reflexión del psicólogo Gustave Le Bon: “La abundancia de palabras inútiles en el discurso, es un síntoma cierto de falta de flexibilidad mental”.

Adaptación y flexibilidad cognitiva