domingo. 28.04.2024
Fragmento portada “Frailes, curas y masones” (1901)
Fragmento portada “Frailes, curas y masones” (1901)

@Montagut | El Apostolado de la Prensa dedicó en el cambio entre el siglo XIX y XX un conjunto de obras y opúsculos a cargar contra la Masonería en España. En Frailes, curas y masones, publicado en 1901, se dedicó un capítulo a explicar la obra que los “masones y demás sectarios” habría hecho en la historia contemporánea de España. Esta pieza quiere recoger esta cuestión para mostrar cuál era la consideración que el integrismo tenía de la Masonería en relación con los supuestos males que habría inoculado en el país. En otra pieza seguiremos ahondando en esta cuestión en relación con los frutos de los que se consideraba la “enseñanza masónica”.

En España ya no imperaban la “robusta fe” ni la piedad de antaño, ni “un sincero amor a la patria”, el mismo que habría llevado a “plantar la bandera española en todos los confines del mundo conocido”, pero tampoco la adhesión (obediencia, parecería mejor) a los “soberanos temporales”, y que, supuestamente habían permitido coronar las “empresas gloriosas”. También se había perdido el respeto a la ley y sus representantes, así como la misericordia del rico para con el pobre, y de la gratitud de éste para con sus bienhechores. Se habrían roto las relaciones en las que se cada uno guardaba su puesto, “de amos y criados, de maestros y oficiales, ó de patronos y obreros”.

Se habrían roto las relaciones en las que se cada uno guardaba su puesto, “de amos y criados, de maestros y oficiales, ó de patronos y obreros”

Aunque se conservasen algunos vestigios de ese supuesto orden de antaño basado en la armonía del “mismo Dios, de la misma patria y de la misma familia”, en realidad en España reinaban la desunión y la discordia. Al romperse la unidad de la fe, los que antes se consideraban hijos del mismo Dios ahora eran enemigos irreconciliables, esperando el momento de la batalla definitiva para exterminar al otro bando.

En el orden político ocurriría lo mismo. El turno de partidos había sustituido al gobierno estable de los viejos tiempos, cuando el oficio de gobernante no tenía que conquistarse por el voto de la muchedumbreque se dejaba convencer por frases de relumbrón de audaces y charlatanes, y ya había muy pocos españoles que no se consideraban aptos para escalar en los puestos más preeminentes de la gobernación del país. Y como no había muchos puestos, y había muchos candidatos pues había que formar partidos políticos que dividían a los españoles para no concurrir todos unidos a la realización del bien común.

Para el integrismo católico la Masonería sería responsable del fin de un mundo armónico

Del semillero de odios surgían los problemas que dificultaban la solución del problema social, y que se había agravado por las doctrinas masónicas y sectarias, porque al acabar con la idea de Dios y suprimida la obligación de seguir sus preceptos, el hombre se habría entregado al egoísmo, haciendo al rico duro de corazón para con el pobre y haciendo ver a éste que el otro era el enemigo que le arrebataba la parte de los bienes que le correspondería para atender sus necesidades.

Otra supuesta labor perniciosa de la Masonería era la destrucción de la familia. Ahora se veía a muchos padres “haciendo alardes de impiedad ante sus hijos”, y también a éstos olvidarse del respeto que debían a sus padres. Pero lo peor era que las mujeres estaban dejando de lado a la religión. Las costumbres públicas y privadas se habrían pervertido, en consecuencia.

La libertad de prensa para esparcir errores y abominaciones tenía mucha responsabilidad, una prensa que estaría en manos de los masones.

Así pues, para el integrismo católico la Masonería sería responsable del fin de un mundo que, supuestamente, había sido armónico en lo político, en lo social y en el ámbito familiar, y donde imperaba el patriotismo y la obediencia. España se habría convertido en un caos en todos los aspectos. En la misma no existía el orden de antaño.

¿Cuál era la obra de la Masonería en España para el integrismo hacia 1901?