Los problemas para Twitter no dejan de crecer.
Después de despedir al 50% de la plantilla, 3700 trabajadores, impulsar un sistema de pago para en pocos días anularlo y amenazar a los empleados con que deben trabajar mucho más, un número importante de ingenieros y otros directivos y empleados han optado con pronunciarse con los pies. Es decir dimitiendo o aceptando la escasa indemnización ofrecida por el magnate enloquecido que puede llevar más temprano que tarde al cierre de esta red social.
Nadia Calviño abre la puerta a que el Gobierno español salga de Twitter si deja de ofrecer certidumbre
El mundo de los negocios y sus personajes en la actualidad está lleno de gente que se hace milmillonaria con grandes pelotazos tecnológicos o de inventos extraños que poca gente entiende como las criptomonedas y que de la noche a la mañana se arruinan y destruyen los puestos de trabajo creados. Un personaje estrambótico puede permitirse el lujo de gastarse o pedir prestado 50.000 millones de dolares y después poner en riesgo su juguete con medidas suicidas.
El nuevo jefe de Twitter ha seguido apretando las tuercas de la compañía hasta un límite insospechado para muchos.Tanto ha sido así que muchos piensan que Twitter va a cerrar ante la salida masiva de empleados que han renunciado a su puesto.
Elon Musk ha mandado un mensaje con un asunto singular: “Una bifurcación en el camino”. Cabría esperar que tenía pensado abrir una línea de negocio nueva, pero nada estaba más lejos de la realidad. Por lo que cuenta The Washington Post, el cuerpo del mensaje decía que “en el futuro, para construir un Twitter 2.0 rompedor y tener éxito en un mundo cada vez más competitivo, tendremos que ser extremadamente duros. Esto significará trabajar muchas horas a gran intensidad. Solo un rendimiento excepcional constituirá un aprobado”.
Musk ha decidido cerrar la sede de Twitter en San Francisco, invalidar los pases de seguridad y denegar el acceso a los trabajadores hasta el lunes por temor a que puedan boicotear a la empresa, como ya hizo en la primera oleada de despidos.
El mensaje del jueves fue divulgado por Bloomberg: “Hola. Con efecto inmediato, cerramos temporalmente nuestros edificios de oficinas y se suspende el acceso a las tarjetas de identificación. Las oficinas volverán a abrir el lunes 21 de noviembre. Gracias por vuestra flexibilidad"
¿Twitter está cada vez más cerca del cierre?
Pues esto es lo que muchos auguran. La red social del pajarito lleva años luchando contracorriente, acumulando pérdidas sin cesar, y siempre ha salido a flote pese a tener rachas malas. La llegada de Elon Musk, que no lleva ni un mes a los mandos, ha provocado la decepción de muchos, especialmente de los trabajadores y directivos.
Con cada vez menos empleados y condiciones más duras el éxodo masivo, que algunas informaciones cifran en 1000 trabajadores, deja la compañía bajo mínimos con la pérdida de experiencia y talento acumulada.Recordemos que no es la primera vez que se provoca un despido masivo en las oficinas de Twitter ni se habla de las medidas de trabajo cada vez más abusivas.
Tampoco lo sería la primera vez que vemos una medida tan drástica, porque ya hemos visto que estar en desacuerdo con él supone un motivo para el despido. Todavía no se sabe exactamente cuántos trabajadores se han negado a aceptar el acuerdo ya que la sede, al igual que los servicios de comunicación internos de la firma se han cerrado.
Nadia Calviño abre la puerta a que el Gobierno español salga de Twitter si deja de ofrecer certidumbre
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha abierto la puerta a que el Gobierno español deje de usar Twitter como canal de comunicación si deja de ofrecer "seguridad" y "certezas" sobre la veracidad de la información en la plataforma. "Continuaremos usando Twitter, pero, eventualmente, si no proveen o no mantienen la necesaria certidumbre y seguridad sobre la información en la plataforma, hay muchas plataformas que se pueden tener en cuenta", ha subrayado Calviño.
