Un varón de 50 años ha fallecido en Bilbao al arrojarse desde el cuarto piso de su vivienda, ubicada en la calle Txakoli de la capital vizcaína, cuando iba a ser desahuciado, según han informado fuentes jurídicas.
Tras introducir una tarjeta en la puerta y no poder abrir, el cerrajero "ha cogido un taladro" y ha abierto. "Los señores han entrado y han preguntado si había alguien y allí no había nadie", ha añadido.
La testigo, vecina del fallecido, ha visto desde la puerta que éste tenía "ropa en el sofá" y unas "bolsas en la entrada". "He dicho: '"yo no entro", ha añadido.
Según ha precisado, una vez en su domicilio, ha mirado por la ventana y ha visto a un hombre tumbado en el suelo y a una ambulancia, aunque había pensado que a alguien le había dado un mareo. Otra vecina, que se ha percatado de que el hombre se había tirado por la ventana, ha avisado a un coche de la Ertzaintza que patrullaba por la zona.
Junto al portal de la víctima había un servicio de ambulancias, y sus responsables han intentado reanimarle, pero hombre ya había fallecido. La vecina que vivía enfrente de él ha afirmado que le conocía desde hace "muchos años", y que tenía una niña de 13 años. Era chiquitina (cuando se mudó a la casa). Salía con la mujer y yo con mi nieto a pasear", ha asegurado, para indicar que solía hablar con él, aunque éste era parco en palabras.
