Acompañado por un numeroso grupo de vecinos, Vadillo partió de Alburquerque hacia Badajoz, desde donde se dirigirá a Mérida, Cáceres, Plasencia y llegar a Madrid pasada la Semana Santa.
El primer edil espera recorrer unos 20 kilómetros al día para llegar hasta la sede del Ministerio de Industria, Energía y Turismo con el fin de que se mantengan en la región los incentivos a los proyectos existentes para instalaciones de producción de energías renovables.
Alburquerque cuenta en la actualidad con cinco proyectos de plantas termosolares, proyectos que, según Vadillo, se verán truncados tras la supresión de las primas a este tipo de instalaciones.
Para Vadillo, esta decisión del Gobierno es "un revés" a este sector estratégico para Extremadura y para Alburquerque, ya que a la población, que tiene más del 30 por ciento de desempleo, le reportarían las termosolares "una inyección económica única en estos momentos".
