viernes. 29.03.2024
Co2-2

Entre 1990 y 2010, un total de 36,1 millones de toneladas de CO2 equivalente (CO2-eq) se vincularon con la carne producida en un país y consumida en otro diferente.

La mayor cantidad de emisiones incorporadas procedían de la carne de vaca (26,7 Mt de CO2-equivalente), carne de cerdo (7,3 Mt de CO2-eq) y pollo (2,1 Mt de CO2-eq), respectivamente. Rusia fue identificado como el mayor importador de las emisiones incorporadas en la carne durante ese periodo, consumiendo más emisiones de lo que produce, recibiendo la mayoría de sus emisiones de Brasil y Argentina.

Los autores, científicos de la Institución Carnegie para la Ciencia y la Universidad de California (Irvine), ambas en Estados Unidos, y la Universidad de Siena, en Italia, detectaron que las emisiones incorporadas u "ocultas" de carne de res, pollo y cerdo han aumentado un 19 por ciento durante los últimos 20 años y que actualmente hay una inestabilidad global causada por un gran número de países que contribuyen a la producción de emisiones en otro país.

Por primera vez se ha estimado el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O) que se libera a la atmósfera por la producción de carne en unos países y ha asignado las emisiones a otros donde se consume.

Tras analizar los datos de 237 países, los investigadores también revelaron los flujos comerciales internos de emisiones entre los países europeos. Los resultados, que se publican en la edición de este vierntes de 'Environmental Research Letters', añaden más peso a la idea de la contabilidad basada en el consumo, en la que los países tienen en cuenta las emisiones de los productos que consumen, así como los que producen.

El autor principal de la investigación, Darío Caro, de la Institución Carnegie para la Ciencia (Stanford) y la Universidad de Siena, explica: "Un país en desarrollo, por ejemplo, puede carecer de infraestructura específica y, por tanto, emite grandes cantidades de gases de efecto invernadero cuando produce carne de ganado. Estas emisiones pueden incrementarse cuando países más desarrollados demandan a este país que produzca más carne".

En Europa, la carne exportada de Francia a Italia y Grecia suponía 1,4 Mt y 1,2 millones de toneladas de emisiones de CO2-eq, respectivamente, y las importaciones italianas de carne procedente de Polonia, Alemania y Países Bajos suponía 0,7, 0,6, y 0,7 millones de toneladas de emisiones de CO2-eq, respectivamente.

Noticia publicada en ECOticias.com

36 millones de toneladas de CO2 detrás del comercio mundial de carne