jueves. 18.04.2024
ORGANIZACION INTERNACIONAL DEL TRABAJO (OIT)

La gente se sacrifica, pero no ve que los ricos se esfuercen para aliviar la crisis

Con más de 200 millones de desempleados a nivel mundial y la económica en estado crítico, la necesidad de puestos de trabajo nunca ha sido mayor. Sin embargo, los ricos no emprenden esfuerzos por aliviar la situación, afirman los expertos.

El desempleo juvenil ha alcanzado niveles críticos y amenaza con desestabilizar a muchos países. Sin embargo, los líderes de estos países y la clase más adinerada prefiere hacer oídos sordos a estos indicadores. 

"La situación es mala y está empeorando. El futuro no es inevitable. El futuro depende de lo que hacen los políticos". Son palabras de  Guy Ryder, director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). 

Ryder destaca que las personas en todo el mundo se sienten desilusionadas ya que se le pide que se aprieten el cinturón y hagan sacrificios, pero no reciben nada en cambio.

"Las personas que han hecho un sacrificio no perciben los resultados. La gente quiere que las políticas sean justas. Si hago un esfuerzo, alguien más debe hacer un esfuerzo. Y los que tienen más capacidades, que son los más ricos, deben hacer un esfuerzo mayor. 

Guy Ryder cita como ejemplo a países como China, Brasil, México que han avanzado mucho en el camino de la protección social y beneficios sociales. "Es interesante que en muchos de los países emergentes y en desarrollo se esté haciendo un gran progreso. Miren a China. Se están aplicando esquemas de pensiones y de atención médica para toda su población. Es un enorme esfuerzo. En Brasil, en México se están haciendo grandes avances, Tailandia y Filipinas también avanzan. Al mismo tiempo, algunos de los países más ricos  dan marcha atrás diciendo que tal vez no nos podemos permitir la protección social y que tal vez es algo a lo que tenemos que renunciar para seguir siendo competitivos. Nosotros pensamos que eso es un error", explica Guy Ryder. 

"Cosa curiosa: es más costoso no hacer nada que hacer algo. Lo importante es que los políticos no deben esperar a que el desempleo juvenil se convierta en una amenaza para la sociedad. La verdadera tragedia del desempleo de los jóvenes es que hay 75 millones de jóvenes en el mundo que hoy no tienen trabajo y no tienen futuro. Es una pérdida humana masiva, es un drama humano, es una tragedia humana", lamenta.

La gente se sacrifica, pero no ve que los ricos se esfuercen para aliviar la crisis