jueves. 25.04.2024

El Gobierno intenta evitar la imagen de soledad que sufrió con el 'tijeratazo'

Los contactos con el resto de Grupos parlamentarios se están sucediendo en los últimos días y horas. El Gobierno quiere contar con el apoyo de la mayoría de la Cámara baja para sacar adelante la reforma laboral al margen de que se consiga o no un acuerdo en la mesa de diálogo social.
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> El Gobierno concreta su propuesta
NUEVATRIBUNA.ES / ISABEL G. CABALLERO 09.06.2010

El Gobierno está celebrando reuniones “discretas” con los portavoces parlamentarios para alcanzar un acuerdo sobre la reforma laboral. Este miércoles por la tarde, la mesa de diálogo social intentará por última vez cerrar un pacto entre sindicatos y patronal pero desde el Ejecutivo el pesimismo cunde: “No hay un clima optimista, no parece que sea fácil un acuerdo”, reconocían fuentes de La Moncloa en los pasillos del Congreso de los Diputados.

Desde la semana pasada se están llevando a cabo “contactos genéricos” –así lo calificaron las mismas fuentes- entre los ministros de Economía y Trabajo, Elena Salgado y Celestino Corbacho y representantes de las demás fuerzas políticas. El Gobierno ya se ha reunido con Convergencia i Unió, Partido Nacionalista Vasco y hoy lo hará con Esquerra Republicana de Catalunya. Quien no ha sido llamado de momento es el principal partido de la oposición. Así lo destacó Mariano Rajoy si bien el presidente José Luis Rodríguez Zapatero anunció que lo hará de forma inmediata pero precisó que el PP ya “sabe lo que tiene que saber” sobre este asunto.

En caso de que los agentes sociales no lleguen a un acuerdo, el Gobierno aprobará la reforma por decreto el próximo 16 de junio. El Ejecutivo pretende contar con el apoyo de los Grupos y evitar así la imagen de soledad que escenificó con las medidas de ajuste para reducir el salario a los funcionarios y congelar las pensiones y que sólo contó con los 169 votos a favor de los diputados socialistas. Las fuentes consultadas afirman que, de una u otra manera, el Gobierno “asumirá” como principal “impulsor” la nueva regulación del mercado laboral y “peleará” para que, al igual que pasó con el ‘tijeretazo’, no se tramite como proyecto de ley dada la urgencia por sacarla adelante.

El siguiente paso será la reforma de las pensiones con la ampliación de la edad de jubilación y del cómputo para el cálculo de las mismas. El PP considera que una vez aprobado el “decretazo”, el Ejecutivo ha optado por actuar unilateralmente al margen del resto de Grupos Parlamentarios. “El Pacto de Toledo está en coma”, señalaba a nuevatribuna.es un dirigente popular.

Lo cierto es que PSOE y PP parecen haber roto todos los puentes. A día de hoy no hay abierta ninguna línea de negociación ni diálogo, pero los socialistas esperan contar con el apoyo de CiU y del PP para aprobar la reforma laboral en el Parlamento, ya que estos dos Grupos la llevan pidiendo desde hace tiempo. La propuesta concreta del Gobierno no se conocerá hasta que se sepa sin CEOE y sindicatos consiguen sellar un acuerdo en las próximas horas.

El Gobierno intenta evitar la imagen de soledad que sufrió con el 'tijeratazo'