viernes. 19.04.2024

Nuestras últimas estimaciones sobre el alcance de la economía sumergida apuntan a una cifra cercana a los 250.000 millones de euros, lo que supone una pérdida para las arcas públicas de 89.000 millones de euros anuales. Para entendernos, ese dinero que se deja de ingresar es más del doble del ajuste presupuestario aprobado por el Gobierno para el año 2013.

Ese dinero que se deja de ingresar es más del doble del ajuste presupuestario aprobado por el Gobierno para el año 2013

Precisamente, una de las medidas que más hemos defendido para paliar los efectos del déficit y aumentar la recaudación en 38.500 millones de euros es reducir en diez puntos la tasa de economía sumergida, lo que situaría a España en un nivel de fraude fiscal similar al de los países más avanzados de nuestro entorno.

Pero ¿cómo conseguir esa rebaja de diez puntos en el fraude? Los Técnicos de Hacienda consideramos que se puede lograr actuando en cinco frentes: mejorar la colaboración entre las distintas administraciones públicas con la creación de una base de datos compartida; aumentar la responsabilidad de los técnicos en el control del fraude y la evasión fiscal a través de la atribución de mayores competencias, en el marco de una profunda reforma del Ministerio de Hacienda y la Agencia Tributaria; cuantificar periódicamente la economía sumergida mediante estudios y estimaciones plurianuales, desagregados por sectores, impuestos y territorios , garantizar el control parlamentario en la fijación de objetivos de reducción del fraude y cumplimiento de los mismos y, finalmente, potenciar la investigación centrada en las grandes bolsas de fraude, más allá del fácil control de los contribuyentes “controlados”, en que ahora se centra fundamentalmente el trabajo de la Agencia Tributaria

Lo que no parece pertinente, en ningún caso, es adoptar medidas como la amnistía fiscal aprobada hace seis meses por el actual Ejecutivo, ya que la experiencia muestra como la mal denominada “regularización” de rentas y activos ocultos solo ha servido para aumentar la bolsa de fraude en el pasado. Así, las anteriores amnistías no fueron eficaces ya que no consiguieron corregir los defectos de gestión que, a la larga, permiten que estas prácticas sigan produciéndose.

Además, las amnistías suponen una discriminación para los contribuyentes que sí cumplen con sus obligaciones, por lo que se incentiva la insumisión fiscal. Al mismo tiempo, no se concentran las investigaciones en los principales focos de economía sumergida que todos conocemos, me refiero a, las operaciones de grandes patrimonios y corporaciones o la compraventa inmobiliaria de carácter puramente especulativo.

Contesta Carlos Cruzado,

Presidente de los Técnicos de Hacienda (GESTHA)

¿Cómo se podría reducir en diez puntos la economía sumergida en España?