viernes. 26.04.2024
Fotos: Wikimedia

Se encuentra situada en el este del continente africano. Limita al norte con Sudán del Sur, al oeste con la República Democrática del Congo, al sur con Ruanda y Tanzania y al este con Kenia. Tiene una extensión de 241.038 km2.

Uganda no tiene salida al mar, pero en su territorio en se encuentran los lagos Victoria, Alberto, Kyoga y Eduardo. El mayor de ellos es el lago Victoria, en el que Uganda posee varias islas y que sirve de frontera con Kenia y Tanzania. Del lago Victoria nace uno de los ramales del Nilo.

La mayor parte de Uganda es una meseta que desciende suavemente hacia el norte. La parte occidental del país está constituida por el Rift Albertino, la rama occidental del Rift de África Oriental. Al sudoeste, donde se encuentran Uganda, la República Democrática del Congo y Ruanda, se encuentran las montañas Virunga, con sus ocho volcanes.

 

En la frontera de Uganda con Ruanda se encuentran alienados de este a oeste los volcanes Muhavura con 4.125 metros de altitud, Gahinga con 3.474 m y Sabinio con 3.645 m. Los tres forman parte del parque nacional del Gorila de Mgahinga.

La frontera sigue hacia el norte haciendo frontera del Congo a través de una línea de montañas de 1.800 m que descienden hasta los 912 m del lago Eduardo. El relieve vuelve a subir en las montañas Rwenzori con una serie de picos importantes en la misma frontera, el monte Speke con 4.890 m, el monte Emin de 4.798 m, el monte Baker con 4.844 m, y el más alto, el monte Stanley con 5.109 m, y vuelven a descender hasta el lago Alberto con 615 m, que desemboca en el río Nilo Blanco.

Es un país con una tasa de crecimiento población increíble y marcada por el tribalismo pero sobre todo por la desigualdad política económica y social

La frontera sigue hacia el norte atravesando una meseta ondulada a 1200 m de altitud y una zona de colinas hasta la frontera con Sudán del Sur, al norte.

El resto del país es una amplia meseta dominada por el lago Victoria, al sur, a 1.134 m de altitud, dividido a partes iguales entre Uganda y Tanzania, de las que 31.000 km² pertenecen a Uganda.

 

El lago Kyoga con 914 metros de altitud, situado en el centro del país, siendo alimentado por el Nilo Blanco procedente del lago Victoria por el sur y de una serie de caudales que proceden del este, de la frontera con Kenia, donde se encuentra el monte Elgon, que es un volcán aislado extinto de 4.321 m que forma parte de una cadena de volcanes de este tipo al este del país, entre los que destacan el monte Moroto con 3.083 m, el monte Kadam con 3.063 m, y el monte Morungole, al norte, de 2.749 m.

El lago Kuoga tiene una extensión de 1.720 km2 y una profundidad media de 4 m, y está formado por un conjunto de zonas húmedas que se extienden hacia el este y sudeste e incluyen los lagos Kwania, Kojweri, Nawampasa, Adais, Nyasala, Nyaguo, y más al este, Bisina, Opeta, Lemwa y Okolitorum.

Hacia el oeste, el lago desagua en el Nilo Blanco, que después de un giro hacia el norte y este al Lugogo y de nuevo hacia el oeste desemboca en el norte del lago Alberto, muy cerca de donde sale de nuevo del lago para dirigirse hacia Sudán del Sur. Por el sudoeste, el Nilo Blanco recibe al río Kafu antes de girar hacia el norte, y éste recibe a los ríos Lugogo y Mayanja.

Antes de alcanzar el lago Alberto, el Nilo Blanco, procedente del lago Kyoga atraviesa una serie de rápidos entre los que destacan las cataratas Murchison, en el parque nacional de las cataratas Murchison, un zona protegida con una altitud 3.480 km², que cubre los últimos 115 km del Nilo Blanco antes del lago.

El norte de Uganda es una meseta separada de Sudán del Sur en su parte central por las montañas Imatong, que culminan en el monte Kinyeti, ya en el país vecino, con 3.187 metros de altitud.

El centro norte de la meseta de Uganda, está recorrida por el río Achwa que desciende suavemente hacia Sudán del Sur, donde desemboca en el Nilo Blanco después de cruzar el parque nacional Nimule, a una altitud cercana a los 600 m. Tiene como afluente al río Pager.

 

El nordeste del país está drenado por el río Okok, que circula, en cambio, de norte a sur y desemboca en el lago Bisina.

Al sudoeste, entre las montañas Virunga y el lago Victoria, hay una zona montañosa del Rift, con serranías que discurren de sur a norte, de más de 2.000 m de altitud, en la que se encuentran el lago Mutanda a 1.800 m. de altitud, y el lago Bunyonvi, a 1.962 m de altitud, en una falla volcánica.

El lago Mutanda está drenado por el río Rutshuru, que desemboca en el lago Eduardo. El lago Bunyovi tiene una longitud de 25 km de largo y 7 km de anchura, y posee veintinueve islas.

El clima de Uganda es tropical y húmedo en general, modificado por la altitud y localmente por los lagos. Las masas de aire proceden normalmente del nordeste y el sudeste.

Al estar en el Ecuador, los días duran todo el año doce horas, y la cobertura nubosa hace que haya pocas variaciones, con medias anuales entre 21º y 23º y lluvias entre 1.000 y 1.500 mm, con máximos entre abril y mayo, y julio y agosto.

Hace un poco más de calor en el lago Alberto, por su menor altitud, así como en la región de las cataratas Murchison. Por encima de 1.500 m, en cambio, las noches son frías. El periodo más cálido y seco es de diciembre a marzo, con vientos del nordeste, procedentes de Sudán y Eritrea.

Entre junio y septiembre los vientos del sudeste proceden del Océano Índico y Tanzania, algo más frescos, en la parte sur del país. El norte está dominado por las corrientes más húmedas desde el Congo.

 

En la capital de Uganda, Kampla, al sur, junto al lago Victoria, llueve unos 1.290 mm en 94 días, con un máximo entre marzo y mayo y otro entre septiembre y noviembre, cuando el sol pasa por la vertical de los equinoccios, y mínimos en febrero y julio, aunque nunca llueve menos de 65 mm al mes. Las temperaturas oscilan entre los 17º-27º de julio y agosto, y los 18º- 29º de febrero-marzo.

En Golu, en el centro norte, también a 1.100 m de altitud, en plena meseta, caen 1.480 mm en 88 días, pero las lluvias están menos repartidas, hay un periodo seco entre diciembre y febrero, y en mayo y agosto se dan máximos de 200 mm con tormentas más intensas.

En la zona más seca del país, en el nordeste, en Moroto una zona rica en minerales a los pies del monte Moroto que tiene una altitud de 3.083 m, en la frontera con Kenia, llueve 810 mm en 127 días, con un mínimo entre diciembre y febrero, pero muy repartido el resto del año.

En Uganda habitan muchos grupos étnicos distintos, ninguno de los cuales es mayoría en el conjunto de la población. Hay cuatro grupos étnicos principales en Uganda, con distintos orígenes:

1. Los batúes viven en el oeste e incluyen las tribus buganda, banyankole, basoga, bakiga, batoro, banyoro, banyarwanda, bagisu, bagwere y bakonjo.

2. Los nilóticos, en el norte, incluyen las etnias lango, acholi, alur, adhola, luhya y jonam.

3. Los nilo-hamitas incluyen las etnias, teso, karamojong, kumam, kakwa, sebei, pokot, labwor y tepeth y los sudaneses, que incluyen las tribus lugbara, madi y lendu.

4. Los hamitasestán formados principalmente por los bahima. Los árabes y el resto de componentes de la población se hallan a distancia en número.

Más allá de los grupos étnicos, en Uganda se hablan unas treinta lenguas. Los idiomas oficiales son el inglés y el suahili. Otros grupos hablantes de lenguas bantúes son los ankole, los toro, loa banyoro y los basoga.

 

El inglés se convirtió en el idioma oficial a partir de la independencia, pero en el país se usan más de cuarenta lenguas. El idioma con mayor número de hablantes nativos es el luganda, hablado en Buganda, región donde se encuentra la capital, Kampala.

Le sigue en cantidad de hablantes con 4,2 millones el iteso, hablado en siete distritos de la zona oriental del país. El suajili, curiosamente adoptado como lengua oficial, al igual que en Kenia y Tanzania, lo hablan muy pocas personas, ya que como consecuencia del régimen de Idi Amín actualmente es señalado como lenguaje de pillos y ladrones, creando un grave problema de comunicación en el comercio con su vecino más desarrollado, Kenia.

La población de Uganda de 45.740.000 habitantes, de los cuales el 99% es de raza negra y el 0.3% de raza blanca con europeos o descendientes, en su mayoría de origen británico, mientras que el restante 0.7% son asiáticos y árabes.

La esperanza de vida es de 52,72 años. La raza blanca, junto con las élites negras, domina la vida política y económica de Uganda, viviendo en barrios lujosos. Frente a ellos, está una gran mayoría negra que trabaja fundamentalmente para los anteriores y vive en la pobreza o extrema pobreza.

Los grupos asiáticos, por su parte, constituyen la llamada clase media, dedicándose al comercio y a la artesanía. El porcentaje de blancos y asiáticos era mayor, pero la gran mayoría abandonaron el país durante la dictadura de Idi Amin, volviendo buena parte de ellos después de su derrocamiento.

El promedio de hijos por mujer es de 6,73, una de las tasas más elevadas del mundo, lo cual está provocando un crecimiento poblacional nunca visto en la historia del país.

 

Alrededor del 84% de la población es cristiana, de los que el 41,9% pertenecen a la iglesia católica y el resto a diversas confesiones protestantes, entre las que destaca la iglesia anglicana de Uganda con un 35,9%.

Hay una minoría musulmana, de alrededor del 12%. También se practican las creencias indígenas. La minoría asiática practica el hinduismo. Además, hay una minoría de unos 1.100 judíos.

Las principales ciudades de Uganda son su capital Kampala con 1.500. 000 de habitantes, Golu con 275.000 h., Lira con 240.000 h., Kasese con 120.000h., Jinja con 102.000 h., Mbarara con 101.000 h.

ECONOMIA

Uganda tiene considerables recursos naturales: suelos fértiles, lluvias regulares y grandes yacimientos de cobre, oro, cobalto y otros minerales. La economía de Uganda tiene un gran potencial.

La agricultura es el sector más importante de la economía. Uganda posee tierras fértiles, lluvias regulares. Da empleo a más del 80% de la fuerza de trabajo y el ingreso más significativo procede de la exportación de café.

Desde el año 1986, el gobierno, con el apoyo de otros países y agencias internacionales, ha tomado medidas para rehabilitar una economía diezmada durante el régimen de Idi Aminn y la posterior guerra civil.

 

Destacan, entre otras, una reforma monetaria, el alza de los precios para los productores de los cultivos de exportación, incrementos en el precio de los productos del petróleo y mejoras salariales en la administración estatal.

Según los datos del FMI, en el año 2016, el PIB per cápita de Uganda alcanzaba más de 2.000 dólares, valor mucho más alto que los registrados en las décadas de los ochenta y noventa.

La mayor parte de la industria está relacionada con la agricultura. El sector industrial ha sido rehabilitado para retomar la construcción y la producción de materiales de construcción como cemento, planchas de techo corrugado y pintura. Los productos de consumo interno que se hacen en Uganda incluyen, plásticos, jabón, corcho, cerveza y bebidas sin alcohol.

SU HISTORIA

En el territorio de la actual Uganda, las ruinas de los grandes muros de barro del reino de Bigo evidencian restos de civilizaciones urbanas existentes en el siglo X de nuestra era.

Son ruinas de amplios fuertes rodeados de muros de tierra, fosos y trincheras en torno a un gran espacio abierto, en cuyo centro una colina permanente que permite observar el territorio circundante.

Las fortificaciones jalonan las líneas de penetración, desde el norte, de un pueblo pastoril de origen nilótico, los bacwezi, que hacia el siglo XII sometieron a los bantúes de la región.

El espacio fortificado, de unos 300 metros de diámetro servía para proteger el ganado que era su principal riqueza y símbolo de su buena posición social y económica. Poco a poco, sin embargo, los conquistadores se mezclaron con la población local y terminaron por cambiar su nombre a bahimas y adoptaron la lengua bantú, aunque continuaron siendo nómadas.

Entre los siglo XVII y XVIII, se formaron los reinos de Bunyoro, Buganda, Busoga y Ankole. Una disputa por la supremacía surgió entre los bunyoro, apoyados por los traficantes swahilies y buganda, vinculados a los shirazis de Zanzíbar.

A principios de siglo XIX, bunyoro había sufrido la deserción de algunos aliados, que crearon el reino de Toro, liderados por la indisputable hegemonía de los buganda.

A mediados del siglo XIX, Buganda estaba gobernado por los kabakas, reyes teóricamente absolutos, pero en la práctica limitados por el Lukiko, un consejo representativo de la alta nobleza.

Buganda tenía un ejército permanente que garantizaba su autonomía en la región. Su sociedad, relativamente equilibrada, en donde los privilegios de la nobleza eran más honoríficos y políticos que económicos. Tenía una sólida economía agropecuaria que le permitió sobrevivir a la decadencia del comercio de esclavos.

H.M. Stanley, el aventurero y periodista británico llegó a la zona en el año 1875. Él denunció el avance del Islam en la región y llamó para que Europa enviara misioneros a fin de contrarrestar la infiltración religiosa musulmana.

 

Los misioneros llegaron pronto. Los protestantes británicos en el año 1877 y los católicos franceses en el año 1879, rápidamente convirtieron a parte de la jerarquía bugandesa y la elite poderosa se dividió en tres facciones.

En el año 1888, los misioneros depusieron al kabala musulmán nwanga. Llego la Imperial British East África Co, que era una compañía comercial al viejo estilo colonial precursora del gobierno inglés.

Los Acuerdos del año 1886 con Alemania habían otorgado a los ingleses los reinos de los lagos, convertidos en protectorado británico desde el año 1893.

Los demás reinos debieron adoptar sistemas políticos iguales a los de buganda, pues los ingleses veían al Lukiko, como algo semejante a su Parlamento. Pensando en desarrollar una clase dirigente intermedia del poder colonial, emprendieron una reforma de la propiedad que privatizó la posesión de la tierra hasta entonces comunal y despojó a los campesinos en beneficio de la nobleza sentada en el Lukiko.

En el año 1894, Buganda pasó a ser un protectorado británico, En el año 1900, mediante un acuerdo, se transformó en una monarquía constitucional, controlada por los protestantes. En el año 1902, la provincia oriental paso a pertenecer a Kenia.

El cultivo comercial del algodón comenzó en el año 1904.

Durante la primera mitad del siglo XX, hasta el fin de la II Guerra Mundial, rigió el sistema de gobierno indirecto. El poder era ejercido por estructuras locales. Londres permitió la formación de agrupaciones de tipo sindical que reunieron a los militantes. Las modernas tendencias nacionalistas generaron sentimientos anticolonialistas.

La distorsión de las estructuras productivas, causada por la confiscación de tierras, se agravó después de la guerra. Muchos de los cultivos para la exportación, ajenos a la tradición agrícola de la región y su prominencia en la producción, generó el deterioro de las condiciones de vida de la población hasta el año 1960.

 

Fue cuando comenzó el movimiento de descolonización que llevó a la independencia de Buganda. El kabaka Mutesa II de Buganda fue el primer presidente y Milton Obote fue el primer ministro.

Milton Obote cambió la Constitución en el año 1965 para asumir mayores poderes y eliminar la división federativa impuesta por los ingleses. Adoptó una política a favor de los sectores más pobres y se enfrentó a la población india que controlaba casi toda la actividad comercial.

Obote apoyó la integración económica regional con Tanzania y Kenia formando la Comunidad del Este Africano. Obote fue derrocado por un sangriento golpe militar en enero del año 1971 dirigido por el exboxeador y sargento del ejército Idi Amín Dada.

Con la economía en crisis, el gobierno enfrentó la oposición de la minoría india a la que expulsó en masa así como a las empresas multinacionales. Las actitudes de Amín Dada fueron controvertidas pues mantuvo relaciones comerciales con Estados Unidos e Inglaterra, pero también y en buenos términos con el bloque socialista.

Apoyó algunos movimientos de liberación de África, pero se opuso al ingreso de Angola en la Organización de Unidad Africana y hostigó al gobierno de Nyerere en Tanzania. Expropió tierras y propiedades a los judíos y se acercó a los países árabes.

A mediados de la década de los año de 1970, Amín Dada se proclamó presidente vitalicio. Provocó una guerra con Tanzania en el año 1978, al anexionarse una extensa zona del norte de ese país. El conflicto terminó con la fuga de Kampala en abril del año 1979, después de una ofensiva conjunta de tropas de Tanzania y militantes de la oposición, unificados en el Frente Nacional de Liberación de Uganda.

El nuevo poder, un Consejo Nacional Consultivo dirigido por el profesor universitario conservador y sin experiencia política, Yusuf Lule, que duró 68 días en el poder. Lule fue sustituido por Godfrey Binaisa, que era el líder del Frente Nacional de Liberación de Uganda, un movimiento cuya unidad estaba basada en el deseo de acabar con el terror de Amín Dada.

 

Binaisa no tuvo habilidad para conciliar las tendencias dentro de su movimiento y menos para enfrentar el creciente prestigio de Milton Obote, cuyo partido, El Congreso Popular de Uganda contaba con un extenso apoyo popular.

El presidente fijó las elecciones para el año 1981, pero intentó evitar que Obote se presentara a las mismas. Esto precipitó una crisis que explotó en mayo del año 1980, cuando el ejército sustituyó a Binaisa por una Comisión Militar, encargada de mantener los plazos electorales y respetar los principios pluralistas del movimiento que derrocó la dictadura de Amín Dada.

La Comisión bajo las órdenes del general David Oyite Ojok, controló las elecciones de diciembre, que terminaron en una aplastante victoria de Milton Obote como presidente.

Obote recibió un país en ruina. Las minas de cobre no funcionaban desde hacía años, y la corrupción era generalizada. Pese al amplio respaldo electoral en el año 1981, los grupos derrotados iniciaron una campaña de desestabilización que se transformó en guerrilla.

El gobierno autorizó el regreso de los comerciantes asiáticos, reglamentó la participación de capitales extranjeros y comenzó a reordenar la economía, atacando en primer lugar la corrupción y la especulación. Pese a la creciente violencia política, en el año 1981, logró la salida de las tropas tanzanas, instaladas en Uganda desde el derrocamiento de Amín Dada.

Entre los años 1881 y 1985, hubo muchas ofensivas militares contra los reductos del Ejército de Resistencia Nacional, fundado por el ex presidente Yusuf Lule y dirigido por Yoweri Museveni y otros grupos de la oposición.

El gobierno reprimió el contrabando de ganado entre los pastores nómadas a lo largo de la frontera con Kenia en el año 1981, que estaba causando hambrunas a miles de personas en la provincia de Karamoja.

El triunfo anticipado del Congreso Popular de Uganda en las elecciones del año 1985, se vio frustrado por un golpe de Estado que, en julio, dio el general Bazilio Olara Okello. El nuevo presidente que pertenecía a la etnia acholli acusó a Obote de la etnia langi de dominio tribal unilateral y anunció la convocatoria a elecciones para formar un gobierno de base amplia en un plazo de seis meses.

 

Desde el golpe, el Movimiento de Resistencia Nacional intensificó la lucha y ocupó Kampala en enero del año 1986. El treinta de ese mes, Yoweri Museveni asumió la presidencia y en marco anunció la caída de Golu en el norte, último bastión de las fuerzas de Okello.

Museveni debió enfrentar la reconstrucción de un país arrasado, con un saldo de casi un millón de muertos, dos millones de refugiados, 600.000 lisiados y una destrucción incalculable.

Con una deuda externa de 1.200 millones de dólares en el año 1987, Museveni recurrió al trueque con los demás países de África, en un intento de crear una economía independiente para evadir al Fondo Monetario Internacional.

Algunos países de Occidente no veían con buenos ojos las relaciones con Cuba y Libia. Estados Unidos presionó a Tanzania y Ruanda, lo que frustró operaciones de trueque pactadas.

En febrero del año 1992, organizaciones locales de derechos humanos pidieron el establecimiento de una democracia con pluralidad de partidos. El gobierno respondió que construiría una democracia a partir de las estructuras tribales, por lo que los partidos políticos eran innecesarios.

Igualmente ante la presión de la oposición y de los organismos internacionales en febrero del año 1993, se autorizó la elección de una Asamblea Constituyente a establecerse en el año 1995, que debería estudiar un anteproyecto de Constitución.

El texto gubernamental, criticado por la oposición del Partido Democrático y por la UPC, del ex presidente Obote, mantenía el estatus de semi-ilegalidad de los partidos por siete años más.

 

En las elecciones constituyentes de marzo del año 1994, los oficialistas obtuvieron casi la mitad de los escaños, pero la designación directa de algunos constituyentes otorgo a Museveni una mayoría holgada en la nueva Asamblea.

Siguiendo la política de restauración, se autorizó a los bunyoros, del norte del país, a tener su propio rey, lo cual se concreto en junio de dicho año. Museveni siguió sosteniendo que el multipartidismo agudizaría las divisiones tribales en el año 1995.

Los organismos financieros internacionales manifestaron su satisfacción por los resultados económicos del país. Las inversiones extranjeras crecieron, pero los recortes presupuestarios agravaron la situación de la mayoría pobre de la población.

En nueve de mayo del año 1996, Museveni fue reelegido presidente con más del 75% de los votos y tuvo una participación del 72,6%, derrotando a Paul Semogerere y a Muhammad Mayanja.

Las reformas económicas realizadas por Museveni, situaron a Uganda en el primer lugar dentro del programa de asistencia del Banco Mundial para veinte países deudores en el año 1997.

Se estimó en 24 millones de dólares lo necesario para paliar el hambre en el este del país. Uganda recibió fondos de la empresa franco-australiana La Source para explotar las minas de cobalto junto con los préstamos de la Unión Europea y de Corea del Norte para construir una planta hidroeléctrica.

A mediados del año 1998, el ejército ugandés entro en la vecina República Democrática del Congo y se sumó a las fuerzas rebeldes en su lucha contra el presidente Laurent Kabila.

En octubre del año 1999, el ministro de Defensa de Uganda, Stephen Kavuma, dijo que las tropas permanecerían en el Congo hasta que se restableciese la paz.

 

En noviembre del año 1999, los presidentes de Uganda, Tanzania y Kenia firmaron, en la ciudad tanzana de Arusha, un tratado por el cual se creó la Unión Económica del Este de África en el año 2001.

Museveni fue el anfitrión del Foro Africano de Desarrollo del año 2000, celebrado en Addis Abeba. Se refirió a las alarmantes estadísticas del VIH/SIDA en el África Subsahariana. La tasa de Uganda era de las más altas del mundo. Por medio de campañas de información y prevención, se logró reducir considerablemente la epidemia.

En julio del año 2000, se sometió a referéndum la posibilidad de implantar un sistema multipartidista. Pese al boicot del Partido Democrático y otras fuerzas políticas, la fórmula de democracia sin partidos defendidos por Museveni fue respaldada por el 80% de los votantes, con una participación electoral del 50%.

Uganda iba a continuar en un sistema de gobierno insólito en el continente. Esto no impedía que, en la práctica, el Movimiento de Resistencia Nacional ejerciera como un partido de Estado. El sistema ponía todo el poder en las manos de su creador, Meseveni.

En las elecciones presidenciales de marzo del año 2001, Museveni fue reelegido con el 69,3% de los sufragios frente a los 78% obtenidos por su rival más votado, Kizza Besigye, ex coronel del Movimiento de Resistencia Nacional. Observadores internacionales estimaron hasta en un 15% el voto fraudulento y ratificaron que estas elecciones se habían realizado en un clima de intimidación.

En julio del año 2001, Museveni se reunió con el líder de la República Democrática del Congo, Josep Kabila en Dar es Salaam, lo que aceleró la retirada del ejército ugandés de este país y la interposición de efectivos de la ONU a lo largo de las líneas del frente.

 

Un informe de la Organización Mundial del Comercio indicó que la reforma económica llevada por el gobierno de Museveni atrajo inversiones extranjeras y contribuyó al crecimiento del país. La reforma incluyó la liberalización del régimen comercial.

El PIB real había crecido hasta el año 2001 alrededor del 6% anual. El déficit fiscal se redujo y la inflación disminuyó, lo que mejoró el entorno económico. El sector agropecuario representaba entonces el 42% del PIB real y el 80% del empleo.

La historia de lo que ha sucedido en los últimos años es de todos conocidas. País con una tasa de crecimiento población increíble y marcada por el tribalismo pero sobre todo por la desigualdad política económica y social, hace que esperamos que consiga un mayor desarrollo para que la desigualdad social vaya desapareciendo y consigan una sociedad más justa y democrática.

Uganda, la explosión demográfica africana